La Comisión Provincial por la Memoria (CPM), en su calidad de Mecanismo local de prevención de la tortura, se reunió con las organizaciones que representan al colectivo travesti-trans y expresó su preocupación por la gravedad de las medidas anunciadas, que implican trasladar al bosque platense la actual zona de oferta de trabajo sexual. En ese marco, la CPM junto a las organizaciones realizaron presentaciones ante el Ministerio de Seguridad provincial y el municipio solicitando que se suspenda cualquier procedimiento orientado a esta relocalización, que pueda derivar en un escenario de violencia y que se abran instancias de diálogo con las trabajadoras sexuales.
Al iniciar abril se anunció en los medios de la ciudad de La Plata la decisión del ejecutivo local de avanzar con el traslado de la denominada “zona roja”. En paralelo, las organizaciones fueron convocadas por la Municipalidad de La Plata, para ser notificadas sobre la reubicación -en el plazo de 15 días- hacia la calle 122, desde 52 hasta 55, sin ninguna instancia de diálogo ni posibilidad de negociación previa.
En declaraciones a la prensa, funcionarios municipales dijeron que la medida se funda en el Código de Convivencia de la Ciudad de La Plata, pero la redacción de la norma no contempla ninguna medida operativa al respecto: sólo contiene una cláusula que deja abierta la facultad del reglamentar los lugares y condiciones donde se permitirá el ejercicio de la oferta sexual. Al momento tampoco hay ningún acto administrativo conocido que avance en esa reglamentación, lo que significa que en caso de llevarse a cabo la medida sería ilegal.
La denominada reubicación pretende regular el trabajo sexual sin consentimiento de quienes lo ejercen, imponiendo la zona donde puedan trabajar y propiciando las condiciones para la imposición de multas a quienes circulan por fuera de ese espacio. Desde la CPM advierten que se constituye en una medida que viola claramente derechos esenciales de este colectivo, criminaliza la oferta de sexo en la vía pública y genera las condiciones de posibilidad para la profundización de vulneraciones. El organismo subrayó además su desacuerdo con la demarcación de espacios de segregación a los que se envía a personas y grupos específicos y que promueven la estigmatización, segregación y discriminación.
La fecha que se indicó para la reubicación sería este mismo lunes 17, fecha para la que se anunció un operativo conjunto de la Municipalidad con el Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires. Por eso desde la CPM se realizaron presentaciones ante el Ministerio y la Municipalidad de La Plata para solicitar que suspendan cualquier medida que implique un potencial escenario de violencia que colocaría en una situación de especial vulnerabilidad al colectivo travesti-trans.
Las presentaciones de la CPM fueron acompañadas, a su vez, con las firmas de OTRANS Argentina, Marea Rosa (organización de la diversidad), Somos Diversxs La Plata, La Divina JP, Venganza Afectiva, Frente TLGBI de la provincia de Buenos Aires, comisión organizadora de La Marcha Provincial, Secretaría Académica de la FALGBT, AMMAR y la Convocatoria Federal de Travestis y Trans Argentina.
La CPM instó además a las distintas esferas estatales a pensar en conjunto la situación como un problema complejo y de muchos años, y a asumirlo utilizando los recursos estatales en clave de reconocimiento de derechos, inclusión y acuerdos democráticos, y no de represión e imposición arbitraria y unilateral de medidas que pueden derivar en violencia. El organismo se reunió además con funcionarias del Ministerio de las Mujeres, quienes también se mostraron preocupadas y realizando gestiones para resolver la situación.