Cada vez que estoy frente a un dilema imposible de resolver siempre pienso, ¿qué haría Norita? “Siempre del Lado Norita de la Vida” es una frase recurrente de la militancia, de lxs amigxs. La militancia de la vida. La de luchar sin prisa pero sin pausa, como nos enseñaron siempre las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, que no son sólo de la Plaza, son de todos, de todas, del Mundo, una referencia de lucha inagotable, como bien nos sabía dar con el ejemplo Norita. Estaba en todas las luchas, presente en todos los lugares, apoyando la búsqueda de justicia de todas las causas nobles, del lado del pueblo. Norita, siempre pueblo.
Por Nicolás Ramos (ANRed).
Ya no la encontraremos en la Ronda de las Madres, pero ahí va a estar igual. Ya no la encontraremos en el medio de las manifestaciones, pero ahí va a estar igual. No la veremos ya sonriendo con su puño en alto en los Centros Culturales, en los Barrios Populares, en los Comedores, en el Congreso, en la Plaza, en las Escuelas, con lxs Docentes, con lxs Médicxs, con lxs Enfermerxs, con lxs que buscamos Justicia, con lxs que tienen Hambre, con lxs Desocupadxs, con la Causa Palestina, con lxs hijxs, con los Niñxs, con las Mujeres, con las Disidencias, con lxs Artistas, con lxs Científicxs, con lxs Laburantes, con todxs… Pero ahí la vamos a encontrar igual.
Cada vez que la pensemos, cada vez que busquemos Memoria, Verdad y Justicia, cada vez que no sepamos dónde ir, cada vez que creamos que no hay nada más que hacer, cada vez que digamos “Presente”, cada vez que la nombremos, ahí va estar. Como siempre, a pesar de todo, contra viento y marea, contra todo pronóstico. Norita, siempre Norita.
Cada vez que nos quieran hacer creer que todo está perdido, cada vez que nos quieran vencer a palos, con hambre y de tristeza, cada vez que sintamos en lo más profundo el dolor propio y el ajeno, cada vez que todos los planes parezcan fallar, cada vez que parezca que no hay salida, ahí va estar. Norita, siempre Norita.
No habrá fotos ni videos ni libros ni anécdotas que puedan encerrar la grandeza de Norita, su conducta intachable, su palabra justa, su abrazo sentido, su consejo oportuno, su sonrisa inclaudicable.
Si Norita pudo, nosotrxs también. Si Norita llegó a los 94 años como lo hizo, con todo lo que hizo, no podemos menos que homenajearla y continuar el camino honrando esa lucha, su lucha, nuestra lucha.
Recordar es volver a pasar por el Corazón. Y como lo que no se dice y no se nombra no existe, te invocaremos y te nombraremos siempre, porque estás en cada unx de nosotrxs, presente.
¡Hasta la Victoria Siempre Norita!
¡Te veremos como siempre en las calles Norita!
¡Nos vemos como siempre en las calles!
Fuente: https://www.anred.org/2024/05/31/que-hacemos-sin-norita/