El gobierno acaba de publicar un decreto que constituye un grave ataque contra la libre circulación y confrontación de ideas en las escuelas e incluso en las universidades. Más allá de su inaplicabilidad –sobre todo en el nivel superior–, queda claro que la medida apunta a intimidar y regimentar la educación pública en nuestro país.
Milei por decreto incorpora a la Ley de Protección Integral de las Niñas, los Niños y Adolescentes, un artículo especial que penaliza la “imposición de una manera de pensar y/o actuar político partidaria especialmente en el ámbito educativo”. Los medios oficialistas han difundido la noticia como un “una medida que prohíbe el adoctrinamiento en las aulas”.
La AGD ya ha respondido oportunamente a este argumento que el gobierno utiliza con la intención de deslegitimar a la docencia y al sistema educativo como paso simultáneo y justificativo del ajuste brutal que lleva adelante desde que asumió hace un año. Al mismo tiempo, que usa la mentira del adoctrinamiento para llevar adelante el programa que la ultraderecha global reivindica para sí. Los campeones de la destrucción del Estado son los más férreos defensores del aparato estatal, no sólo a la hora de reprimir o desplegar protocolos sino también de intervenir en la vida escolar.
Repudiamos el concepto de adoctrinamiento en las aulas que se plantea desde una neutralidad que no sólo es imposible sino que es una verdadera impostura. Para el gobierno, son las ideas científicas y políticas de los otros las que manipulan las conciencias del estudiantado. Promueve las suyas –su versión del pasado e incluso de la historia más reciente– como si respondieran al orden de la naturaleza.
Repudiamos este decreto y lucharemos por su derogación ya que pretende intimidar a la docencia, tergiversar lo que ocurre en las escuelas y universidades atentando así contra todo pensamiento crítico y la ciencia.
Comprometemos nuestra acción sindical contra cualquier intento de censura o sanción en la defensa de la libertad de opinión y el libre intercambio de ideas en todos los lugares, sobre todo en las aulas.