Chubut: “No nos dejan transitar libremente pero sí a los matones”

“Llegaron en cuatro camionetas, rompieron los candados de las tranqueras, los cambiaron, dejaron encerrados a una anciana mapuche de 78 años (la papay) y a su sobrino y los amenazan constantemente con que deben abandonar su ruka, que tienen que irse solo con lo puesto y que ellos son dueños del lugar”, denunció un integrante de la comunidad Paillako que prefiere reservar su identidad.

La foto es del territorio recuperado lof Paillako Futalaufken Mew, comunidad vecina que denuncia el hecho.

08/05/2020

A pesar de regir una rigurosa cuarentena en la provincia de Chubut, este martes 5 de mayo, un grupo de personas que no son del lugar ingresó en cuatro camionetas por la puerta de acceso al Parque Nacional Los Alerces y avanzó hasta el territorio conocido como Laguna Larga, donde vive hace más de dos décadas la anciana mapuche Isabel Catriman.

“La papay está encerrada con su sobrino. No dejan que se acerque la familia ni nadie porque está prohibido el acceso al parque nacional, pero a estas camionetas las dejaron entrar. También ingresaron con una casa rodante y llevaron albañiles que están trabajando en el lugar”, afirmaron desde el lof Paillako Futalaufken Mew, recuperación territorial que está ubicada muy cerca de donde está sucediendo este nuevo avance y atropello contra el pueblo mapuche.

“Han prendido fuego, han cortado árboles y ahora están construyendo, sin que ellos puedan hacer nada. Desde febrero vienen hostigándolos y diciéndoles que se tienen que ir. Quisieron hacer denuncias en Gendarmería y les dijeron que no era su jurisdicción. Fueron a la policía y tampoco le dieron respuesta. ¿Cómo van a ingresar estos matones al Parque Nacional siendo que no dejan pasar a nadie, a nosotros no nos dejan entrar ni salir de nuestro territorio?”, apuntó una lamgen (hermana) de la comunidad Paillako.

Mientras, en una entrevista por la radio comunitaria FM Alas la titular del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI), Magdalena Odarda, dijo que está al tanto de la situación pero no adelantó medidas a tomar por el organismo. A través de un comunicado, diferentes comunidades denunciaron que desde febrero la familia Catriman viene siendo hostigada y amenazada por Alejandro Samame y Nahuel Serra, “quienes dicen haber comprado esas tierras cercanas a las lagunas Larga y Martillo”. La familia Samame tiene estrechos vínculos con la Justicia de Chubut y la Sociedad Rural de Esquel, de la cual Alejandro es su vicepresidente.

Según consta en el Boletín Oficial de la provincia de Chubut, Serra y Samame, quienes en abril de 2019 conformaron la empresa Los Tercos SRL, recibieron una habilitación para la explotación agrícola ganadera, forestal y minera en todas sus etapas por un lapso de 99 años.

Como quedó nuevamente en evidencia, hace unos días con el ataque a la comunidad Buenuleo, la pandemia del Covid-19 no detiene el avance de proyectos empresariales extractivistas sobre las comunidades mapuche en la Patagonia, muchas de las cuales se mantienen aisladas, sin acceso a medicina y comida. Y, como casi siempre, también sin derechos ni justicia.

Fuente: Revista Cítrica

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