Los trabajadores y trabajadoras de la Ex Sport Tech recibieron el viernes por la mañana por parte del juez Robledo las llaves de la planta de la localidad de San Martín. Con las llaves en sus manos y con todas las máquinas adentro, este lunes comienza la producción autogestiva desde la Cooperativa 8 de Enero.
En la audiencia del viernes, el Juez entregó las llaves con todo lo que hay en la fábrica, desde materia prima, hasta las maquinarias y vehículos. “A la vez, llegamos a un acuerdo con los dueños del inmueble donde firmamos para que nos alquilan el predio”, explicaron a ACTA los trabajadores de la ex Sport Tech.
“Empezaremos a trabajar el lunes”, gritó Fernando Castillo, Secretario General del Sindicato del Vestido ante una multitud que lo esperaba en las puertas del juzgado de San Martín. “Es histórico cómo conseguimos esto, hay cosas que ocurrieron acá y que nunca habían pasado en ningún lado”, explicó Castillo, mientras se aplaudieron.
“Pensábamos que no iba a salir, pero siempre tuvimos la convicción, las fuerzas y las ganas de volver a trabajar”, dijo Mirta Franco y agradeció especialmente a la CTA Autónoma por el acompañamiento en la conformación del SUCEV, pieza clave en esta lucha: “Hoy somos una cooperativa, una fábrica recuperada y ponerla en marcha es nuestra responsabilidad”.
Este logro es resultado de la pelea que iniciaron sus trabajadores organizados en el Sindicato del Vestido, tras el vaciamiento que la empresa sufrió este verano producto de la gestión fraudulenta en manos del empresario Pablo Enrique.
El conflicto comenzó con una ocupación pacífica para evitar el cierre de la planta, en principio en defensa de sus puestos de trabajo, pero luego comenzaron a soñar con el trabajo autogestivo, que derivó en la conformación de la Cooperativa 8 de Enero.
Largo fue el camino de lucha que vienen sosteniendo los y las trabajadoras para que los dueños del galpón les alquilen directamente a ellos. Además de las negociaciones con el juez Robledo, desde hace dos meses mantienen un “Maquinazo” en las puertas de la planta que la empresa tiene en la localidad bonaerense de San Martín, para mantener en agenda su demanda.
“Vamos a seguir produciendo y vendiéndole a las marcas con las que veníamos trabajando, aunque ya no esté Pablo Enrique. Quienes siempre produjimos y pusimos en funcionamiento esa fábrica fuimos nosotros, con una mano de obra muy calificada, que es muy difícil de conseguir, y así vamos a seguir trabajando.”, indicaron a ACTA.
Desde el SUCEV, agradecen además el acompañamiento de la conducción de la CTA Autónoma, de los abogados Verónica Quintero y Nicolás Tauber, y a toda la militancia de la Central que de una manera u otra acompañó.