María Fernanda Boriotti, presidenta de la Federación Sindical de Profesionales de la Salud (Fesprosa), se expresó sobre las medidas anunciadas desde el Ministerio de Economía, particularmente las sumas fijas para trabajadores y trabajadoras.
Las y los trabajadores activos, estatales y privados, jubilados, precarizados, independientes y de la economía social han visto reducido el poder adquisitivo de su salario en los últimos años, hecho agravado por la crisis inflacionaria de 2022 y 2023.
Esta licuación del salario real empeoró luego de la devaluación anunciada por el ministro de Economía, que predice una inflación de hasta 25% en los meses de septiembre y octubre. “Las y los trabajadores de la salud hemos reclamado paritarias que tengan como meta fijar el salario de ingreso del trabajador de la salud en el valor de la canasta de consumos básicos de ATE Indec para el área metropolitana, hoy superior a los 400 mil pesos”, expresó María Fernanda Boriotti, presidenta de Fesprosa.
En esa línea, la dirigente gremial expresó que “frente a esta brutal pérdida de ingresos, el ministro de Economía anunció compensaciones parciales e insuficientes. En efecto, la suma fija anunciada impacta en los sectores de salario más bajo y en los jubilados que cobran la mínima, y deja de lado, o es prácticamente intrascendente, para millones de trabajadores y trabajadoras no comprendidas en estas categorías. A esto se agrega que estas sumas fijas serán absorbidas por las paritarias, por lo que constituyen un adelanto más que un bono”. Y agregó que “el ‘bono’ adelanto no alcanza a 3 millones de estatales de las provincias y los municipios, dependiendo de la voluntad y decisión de cada jurisdicción. En ese universo sin beneficio alguno trabaja el 95% de las y los trabajadores de la salud pública”.
Estas medidas compensatorias fueron acordadas previamente con el Fondo Monetario Internacional, para que el gasto fiscal no sobrepase el ajuste exigido por el organismo financiero internacional.
Para Fesprosa es indispensable la unidad de acción del conjunto de las y los trabajadores, sindicatos, centrales gremiales y organizaciones de jubilados, para romper el techo de las medidas y lograr una recomposición que, al menos, compense las pérdidas que ha sufrido el conjunto del mundo del trabajo con la aplicación de las medidas del FMI. “Comprometemos en esa dirección los esfuerzos de la Federación y de cada una de sus regionales”, concluyó Boriotti.