Lo estimó el Observatorio de Sismicidad Inducida en base al análisis de imágenes satelitales del derrame de hidrocarburos que partió de la monoboya de Oiltanking en cercanías de Puerto Rosales. Este jueves se difundió la foto de un lobo marino empetrolado en las playas de Sauce Grande.
El geógrafo de la Universidad del Comahue, Javier Groso, explicó que el Observatorio monitorea los efectos de la explotación de hidrocarburos en Añelo, Rincón de los Sauces, Sauzal Bonito y zonas aledañas y “como estamos pendiente de lo que ocurre en todo el territorio vinculado a Vaca Muerta nos llega esta información del derrame en Bahía Blanca e inmediatamente nos ponemos a procesar imágenes”.
“Son imágenes de radar, no la de Google Earth o Maps que son imágen del óptico. Esta imagen de radar frente a la respuesta a la onda emitida por el satélite, según la superficie que se encuentra responde en forma distinta. De esa manera es fácil identificar hidrocarburos en una superficie de agua ya que flotan”.
Al ser advertidos de lo ocurrido en el estuario relevaron las imágenes generadas por el Sentinel I de la Agencia Espacial Europea e identificaron “la mancha cerca de Punta Ancla donde está la monoboya”.
“En los días siguientes empezamos a ver hacia dónde distribuyó ese derrame. Eso fue muy bien monitoreado desde Bahía Blanca por el biólogo Pablo Petracci, incluso con vuelos y yendo al territorio para cotejar que efectivamente la mancha estaba localizada en esa superficie”.
El especialista destacó que el mapa compartido por el Observatorio ubica el origen del derrame en la monoboya de Punta Ancla y “a partir de ahí el frente de vertido es, en la imagen que tomamos ese día y que luego le fuimos dando continuidad, la imagen ya se va diluyendo, el frente de vertido es donde estaba ese día la superficie que estaba siendo empujada y arrastrada hacia el canal del embudo”.
Groso comentó que la primera imágen correponde al miércoles 27 a la mañana y coincide con el momento en que el pescador artesanal Natalio Huerta registró los videos que difundieron la noticia.
“El pescador es el que da a conocer la situación y eso es un punto importante de analizar. Es decir, la empresa ha especulado con que para ellos fue un derrame menor, que no se difundiera, no se supiera nada y finalmente se disolviera en el agua o fuera trasladandose mar adentro. Como este pescador registra el episodio eso pone en alerta, sobre todo a sectores que les preocupa este tema, y es esa la red que nos pone a trabajar a nosotros. Insisto con algo, yo vivo en Gral. Roca, en Fiske Menuco, cerca de donde se produce el petróleo y dimensionamos que el petróleo que se produce aquí es cada vez más y cada vez depende más de Puerto Rosales”, dijo el geógrafo.
Agregó que “en la imagen satelital de hoy hay dos barcos en Rosales. Las implicancias de lo que se produce acá también las tiene en otros lugares y es algo muy similar a lo que ocurre acá: muchas veces estos derrames las empresas los informan luego de mucho tiempo, cuando ya -entre comillas- los han saneado, no se informan en tiempo real y a veces ni siquiera logramos saber qué pasó en el ecosistema”.
Groso destacó que “cualquiera que viaje hoy de Bahía Blanca al Alto Valle de Rio Negro por la Ruta 22, ve cómo ya están enterrando por Algarrobo el oleoducto de Oldelval porque el anterior ya quedó chico para el volumen que están moviendo. Y ya están hablando de triplicar, todo eso va a salir por Rosales y a Bahía Blanca porque va a salir por la que por ahora es la única vía exportadora por el Atlántico”.
“Toda conciencia que podamos llegar a tener sobre el control social más allá de los organismos de control oficiales, nos va a poner en alerta de estas situación, en algún momento vamos a llegar a tener, si amplían el muelle de Rosales, dos o tres barcos por día cargando, entonces, los volúmenes son gigantescos”.
Fuente: https://delacalle.org/derrame-de-petroleo-en-la-ria-al-menos-21-kilometros-cuadrados-de-mancha/