La geoingeniería y los riesgos de las pseudosoluciones tecnológicas - Indymedia Argentina Centro de Medios Independientes (( i ))

17 agosto, 2024 por Publicación Abierta

La geoingeniería y los riesgos de las pseudosoluciones tecnológicas para el clima

Pluriversum -15.08.24- Alemania

“Pluriverso” es una serie de aportes extraídos del libro del mismo nombre (en alemán), dedicados a todos aquellos que luchan por el pluriverso, resistiendo las injusticias y buscando formas de vivir en armonía con la naturaleza. El mundo que queremos es un mundo donde convivan muchos mundos.

por Silvia Ribeiro

La tecnología podría desempeñar un papel positivo a la hora de abordar el empeoramiento de las crisis ambientales, climáticas, sociales, sanitarias y económicas. Para lograrlo, las tecnologías deben ser ecológicamente sostenibles, cultural y localmente apropiadas y socialmente justas, teniendo también en cuenta la perspectiva de género. En las sociedades industrializadas, sin embargo, la tecnología se ha convertido sobre todo en una herramienta para aumentar los beneficios de las grandes empresas y de los poderosos grupos económicos.

Esto es ciertamente cierto para las tecnologías que están impulsando la llamada cuarta revolución industrial (biotecnología, genómica, nanotecnología, tecnología de la información, inteligencia artificial y robótica). [1] La convergencia de estas tecnologías tiene efectos y consecuencias de gran alcance en nuestra sociedad.

Pero presentar la tecnología como la solución a todas las crisis sólo sirve a quienes controlan la tecnología misma. El mito de la tecnología como panacea se basa en el supuesto incorrecto de que no es necesario cuestionar las causas de las crisis, ya que para cada problema existe una solución tecnológica. Por ejemplo, los gobiernos y las empresas han respondido a la crisis alimentaria con una agricultura de precisión de alta tecnología , incluido el uso de pesticidas, semillas y animales genéticamente modificados, con una agricultura “respetuosa con el clima”, con semillas estériles con “terminador” y “impulsión genética”. ” tecnología [2] para exterminar especies enteras consideradas “plagas”.

Ante la crisis energética y climática, en lugar de cuestionar sistemas de producción y consumo insostenibles basados en combustibles fósiles, se favorecen nuevas tecnologías que permitan un uso más intensivo de la biomasa a través de la biología sintética y las nanotecnologías, favoreciendo así la expansión de gigantescos monocultivos compuestos genéticamente Plantas y cultivos modificados.

La industria destaca constantemente los beneficios potenciales de estas tecnologías, restando importancia a los riesgos o describiéndolos como improbables o cuestionables. En respuesta, han surgido redes de organizaciones, movimientos sociales y científicos críticos, con el objetivo de comprender y monitorear el complejo panorama tecnológico creado por la industria, al tiempo que instan a la precaución. [3]

Una de las soluciones tecnológicas más falsas y extremistas es la geoingeniería, también conocida como manipulación climática . La geoingeniería es un conjunto de propuestas de intervenciones y modificaciones a ecosistemas a gran escala, definidas como “soluciones tecnológicas” al cambio climático. Incluye dos conceptos principales, cada uno con un tipo de intervención específico: Gestión de la Radiación Solar (SRM) y Eliminación de Dioxinas de Carbono (CDR), también conocida como Eliminación de Gases de Efecto Invernadero (GGR). Estas propuestas podrán incluir intervenciones en el suelo, en el agua o en la atmósfera. Ninguno de ellos busca abordar las causas del cambio climático, sino que sólo se centran en gestionar algunos de sus síntomas.

Hay una variedad de propuestas de geoingeniería, entre ellas: inyectar sulfatos u otros químicos en la estratosfera para bloquear la luz solar y crear un efecto de oscurecimiento, dispositivos para absorber dióxido de carbono de la atmósfera e inyectarlo en reservorios marinos o fenómenos geológicos, la fertilización de los océanos. con hierro o urea para estimular la formación de plancton con la esperanza de que absorba mayores cantidades de dióxido de carbono y modifique la química marina, y megaplantaciones de plantas transgénicas diseñadas para reflejar la luz solar. Todas estas propuestas conllevan enormes riesgos, pueden tener efectos sinérgicos negativos impredecibles y tener implicaciones geográficamente ilimitadas. [4]

Cada proyecto de bioingeniería propuesto conlleva riesgos específicos y consecuencias potenciales; en cualquier caso, todos ellos tienen una serie de aspectos negativos, como por ejemplo:

La manipulación del clima, un ecosistema global dinámico esencial para la vida en el planeta, con el riesgo de crear desequilibrios aún más graves que el propio cambio climático.
Para tener un impacto en el clima global, inevitablemente deben implementarse a escala gigantesca y, por lo tanto, podrían tener efectos aún más severos.
La geoingeniería surgió de intentos militares de utilizar el clima como arma de guerra; El riesgo de armamento siempre está presente.
Los proyectos también pueden implementarse individualmente: un grupo de países o actores económicos podrían utilizarlos para intereses hostiles o comerciales.
Los efectos se distribuirán de manera desigual a nivel regional y afectarán duramente a muchos países del Sur Global, que han contribuido menos al cambio climático.
Los períodos de prueba no son posibles. Dada la escala y el tiempo necesarios para conocer el impacto de los fenómenos climáticos actuales, las pruebas equivaldrían a la implementación misma.
Muchos sistemas están diseñados para fines lucrativos y comerciales, en particular para obtener créditos de carbono, lo que aumentaría la mercantilización de las crisis climáticas.
Por último, pero no menos importante, las soluciones tecnológicas proporcionan una excusa para seguir emitiendo gases de efecto invernadero.
Además de los gobiernos del Norte Global, las empresas energéticas y otras industrias que se encuentran entre las principales causas del cambio climático están particularmente interesadas en la geoingeniería. Para ellos, la geoingeniería es una buena opción porque les permite seguir emitiendo gases de efecto invernadero y cobrar por el supuesto enfriamiento del planeta .

Entre los partidarios más activos de la geoingeniería se encuentra un pequeño número de científicos, principalmente en Estados Unidos y el Reino Unido, que han logrado convencer a sus respectivas instituciones científicas para que publiquen informes sobre geoingeniería. También están ejerciendo cierta influencia sobre el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC), incluso con una propuesta de geoingeniería en su Quinto Informe de Evaluación: Bioenergía con Captura y Almacenamiento de Carbono (BECCS) como parte de la mayoría de los escenarios para la estabilización de la temperatura de la Tierra.

Sin embargo, la esperanza de que BECCS forme la base para “emisiones netas cero de carbono” o “emisiones negativas” es muy incierta y da la ilusión de que las emisiones de gases de efecto invernadero pueden aumentar porque podrían ser compensadas por BECCS u otros remedios tecnológicos. No existen pruebas o estudios científicos independientes que demuestren su viabilidad energética, económica o tecnológica. Además, el impacto de BECCS sobre la biodiversidad, el uso de la tierra y el agua podría ser enorme. Además, competiría con las tierras agrícolas, constituyendo una amenaza para las zonas indígenas y rurales.

En ausencia de un proceso científico global transparente y eficaz para abordar estas tecnologías, en 2010 se impuso una moratoria de facto a la geoingeniería en virtud del Convenio sobre la Diversidad Biológica , basada en el principio de prudencia y teniendo en cuenta los posibles impactos de la geoingeniería en la biodiversidad. y las culturas que lo sustentan. Dada la gravedad de las consecuencias y su naturaleza inherentemente inequitativa, desde 2010 más de 100 organizaciones y movimientos sociales en todo el mundo han pedido la prohibición de las tecnologías de geoingeniería.

Pressenza publica una serie de extractos de “Pluriversum: A Lexicon of the Good Life for All” cortesía de los editores y bajo licencia Creative Commons: CC-BY-NC-ND. El libro está disponible de forma gratuita (en alemán) como archivo PDF en agspak.de/pluriversum/

Los aportes dentro de Pluriverso se pueden consultar qui (en alemán)

Notas
[1] Desde el año 2000, el Grupo ETC se refiere a esta Convergencia como BANG (Bits, Átomos, Neuronas, Genes). En 2016, el Foro Económico Mundial comenzó a referirse a esta Convergencia como la “cuarta revolución industrial”.

[2] La tecnología de manipulación genética permite introducir una modificación genética en una población natural y propagarla a todos los individuos. Las manipulaciones genéticas también están asociadas con importantes desafíos en términos de seguridad, impacto ambiental y cuestiones éticas y sociales. (ver https://scienzenaturali.ch/synthetic-biology-explained/applications/gene_drive – consultado el 07/06/2023 )

[3] Red de Evaluación Social de Tecnologías en América Latina , RED TECLA, por ejemplo ver https://www.redtecla.org/ (consultado el 20.05.2023)

[4] ver http://www.geoengineeringmonitor.org (consultado el 20.05.2023)

Fuentes
Anderson, Kevin y Glen Peters (2016), El problema de las emisiones negativas, Ciencia. 354 (6309): 182–3, http://science. sciencemag.org/content/354/6309/182

Biofuelwatch (2016), ¿Última opción climática o ilusión? Bioenergía con captura y almacenamiento de carbono, https://www.biofuelwatch.org.uk/wp-content/uploads/BECCS-report-web.pdf

Grupo ETC (2010), Geopiratería: El caso contra la geoingeniería, http://www.etcgroup.org/content/geopiracy-case-against-geoengineering

Grupo ETC y Fundación Heinrich Böll (2017), Cambio climático, humo y espejos. Una sesión informativa de la sociedad civil sobre geoingeniería, https://www.etcgroup.org/content/geopiracy-case-against-geoengineering

Monitor de geoingeniería, http://www.geoengineeringmonitor.org/

SynbioWatch, https://www.geoengineeringmonitor.org/

Silvia Ribeiro , originaria de Uruguay, trabaja en México como Directora para América Latina del Grupo de Acción sobre Erosión, Tecnología y Concentración (Grupo ETC) de la Organización Internacional de la Sociedad Civil, con sede tanto en Canadá como en Filipinas.

fuente: https://www.pressenza.com/it/2024/08/pluriverso-la-geo-ingegneria-e-i-rischi-di-pseudosoluzioni-tecnologiche-per-il-clima/

otro enlace relacionado: https://avispa.org/la-geoingenieria-climatica-sin-control-pone-en-riesgo-la-vida-en-la-tierra/