La empresa láctea envió una ola de telegramas a empleados de sus plantas en Gálvez, Sunchales, Carlota y Balnearia.
En medio de una crisis de larga data que se profundizó con la recesión creada por las políticas económicas del gobierno nacional, SanCor Cooperativas Unidas Limitada envió cientos de telegramas de despidos a partir del último jueves.
La empresa que supo ser emblema tanto de la industria láctea como del sector cooperativo, tiene una deuda financiera de u$s 400 millones y debe millones a proveedores y compañías de servicios, como la electricidad.
Estos últimos días cerca de 500 trabajadores de la firma distribuidos entre las plantas de Gálvez, Sunchales, Carlota y Balnearia recibieron sendas notificaciones de despido en las que la firma alegó “razones de fuerza mayor ajenas a la voluntad de la compañía, que son de público conocimiento”.
La cooperativa cuenta con un plantel de 1500 empleados. En los últimos tiempos distintos medios informaron que desde la empresa se estaba “fraccionando” el pago de salarios y que había muchos empleados bajo la modalidad de “jornada libre”, cobrando sólo el 70 por ciento del sueldo.
Los argumentos patronales
“Se están produciendo despidos, lo cual es significativo e importante. Los despidos se deben a que la empresa está procesando menos leche, lo que no permite la ocupación de todo el personal, y es imposible sostener la actividad y las estructuras cuando no hay razón productiva”, aseguró una fuente de la empresa, en declaraciones al periodista Patricio Eleisegui del portal iProfesional.
Según la misma, se añadió que “la empresa asume la decisión de desvincular a los empleados porque no hay trabajo disponible”, además de afirmar que la cúpula de SanCor dialoga con potenciales inversores.
SanCor llegó a procesar más de 3 millones de litros diarios pero luego ingresó en una prolongada crisis, con reestructuración incluida, de la que no terminó de salir nunca. De las 14 plantas industriales que tuvo, se quedó con seis. Y una de esas seis cerró definitivamente sus puertas a fines de 2023.
Durante el 2024 llegó a procesar unos 500.000 litros diarios, con infinitas interrupciones por varios parates en las líneas productivas.
El 2025 empezó aún peor. En lo que va de enero la productividad habría descendido aún más, procesando alrededor de 180.000 litros de leche diarios, informaron desde la empresa, donde también aseguran que la firma carece de “flujo en la caja”, por lo que siguen los incumplimientos de deudas salariales y el pago a proveedores.
“… de algo más de 300 mil litros, ahora la recepción estaría cercana a los 200 mil de leche cruda, intentando repartir el juego entre plantas y armando un ‘jenga’ de elaboración, mientras en estos días es la planta de La Carlota la que está paralizada. En sus buenos momentos, la cooperativa procesaba 4 millones de litros diarios. Es decir, recibe el 5% de la leche que supo procesar”, indicaron al respecto, también citando fuentes patronales, medios como Eco de Sunchales.
En ese marco, se especula que la directiva de la compañía evalúa tratar la opción de abandonar su funcionamiento como cooperativa para auspiciar la toma de control por parte de un privado.
La empresa “se debate entre dejar de ser cooperativa o cerrar sus plantas”, aseguró Eleisegui.
Con información de iProfesional, El Cronista Comercial, Es.edairynews, Eco de Sunchales y Mundo Gremial.