Deuda: no hay pandemia que valga
En tiempo de definiciones: si algo no ha podido afectar la pandemia es la deuda externa, que sigue su curso inexorable con oferta, rechazos, nuevas negociaciones y pagos. En el horizonte cercano se perfilan tres escenarios: arreglo con los bonistas, default parcial o nuevo plazo.
Los tiempos han comenzado a correr aceleradamente. Los tenedores de bonos bajo legislación extranjera han rechazado la oferta del gobierno. ¿En qué consistía esta oferta? En un plazo de gracia de tres años para capital e intereses, una quita de capital simbólica de 5,24% y una de intereses de 62%, mayor a la esperada. A partir de los tres años los intereses comenzarían con una tasa muy baja pero en ascenso, promediando en todo el período de vigencia de los bonos un 2,33%. Tasa nada despreciable cuando...