
Deuda externa: no se puede en diez años. ¿En veinte sí?
Las obligaciones a las que comprometería el país, sin tener en cuenta los condicionamientos que impondrían, son excesivas para una economía tan maltrecha.
En medio del fárrago de informaciones de estos días interesa destacar aquélla que nos anoticia que las negociaciones con el FMI están en un virtual estancamiento. Se debaten nuevos plazos, menores tasas, postergación del pago de intereses que vencen en septiembre y llevar la firma del acuerdo para fin de año.
En su discurso del 24 de marzo pasado la vicepresidenta de la Nación blanqueó lo que era un secreto a voces. Aún estirando a diez años el vencimiento de la deuda con el FMI no se puede pagar, por lo que pidió plazos más extensos y a menores tasas. Algo que ya fuera adelantado por la carta que el bloque de senadores...