Un fascista del siglo XXI
El poder constituyente de la excepción.
1. El camino democrático al fascismo
Se ha vuelto un lugar común la afirmación de que todo poder es un “poder de excepción”. Sin embargo, dicha afirmación no explica la diferencia entre un régimen fascista y un régimen constitucional. “No hay ninguna diferencia”, replica quien cree en la normalidad de la “excepción”. Que vaya a decírselo a los ciudadanos brasileños, ante la inminencia de la asunción de Bolsonaro, y escuchará la respuesta: “¡Estás loco!”.
En la tradición del marxismo revolucionario, se rechaza la analogía entre el régimen democrático y el régimen fascista. La Tercera Internacional impuso, en los años ’20, esa semejanza (que rápidamente se convirtió en una identidad), y sabemos cómo terminó....