El referente mapuche tiene un tumor en un riñón, que se suma a las ya delicada consecuencias de la huelga de hambre que comenzó hace 18 días. “Puede complicar la situación porque él está vomitando sangre, hoy a la mañana. debido a la úlcera (estomacal) y a que no está comiendo y no está tomado líquidos”, contó hace algunas horas a La Retaguardia su mamá María Isabel Huala. (Por Fernando Tebele y Nicolás Rosales para La Retaguardia)
Foto: el Lonko Facundo Jones Huala durante el juicio de extradición (Archivo La Retaguardia/Agustina Salinas)
Facundo Jones Huala se encuentra detenido en la Unidad 14 de Esquel a la espera de la resolución de su extradición o no a Chile, en manos de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
Hace 18 días inició una huelga de hambre. Fue después de que el juez Gustavo Villanueva (el mismo que falló a favor de su extradición a Chile), le negó la posibilidad de realizar la ceremonia del Wiñoy Tripantu junto a su comunidad.
En el 2016, ante el mismo pedido, le habían dado la autorización. La Cámara de Apelaciones de General Roca ratificó el rechazo, con el argumento de que podría “existir riesgo de afectación del orden público o lo derechos de terceros”. En las fotos que publicamos en esta nota puede apreciarse el alto grado de peligrosidad del ritual, una suerte de festejo de año nuevo mapuche.
Esta decisión en contra se sumó a su propia situación judicial y al pedido de la Cámara de Apelaciones para que se revierta la libertad de su hermano, Fausto Jones Huala, y de otro joven mapuche, Lautaro González, que fueron quienes bajaron de la montaña el cuerpo de Rafael Nahuel, asesinado por un disparo de la Prefectura Naval en un operativo represivo contra una recuperación territorial en Mascardi.
También su abogada, Sonia Ivanoff, mostró preocupación esta mañana en diálogo con La Retaguardia: “Hoy el estado de salud no es bueno, bajó mucho de peso al no ingerir ni líquidos ni sólidos”. Los detalles que dio su madre, Isabel Huala, preocupan aún más, ya que reveló que Facundo Jones Huala tiene un pequeño tumor en uno de sus riñones que es está tratando con la Machi de la comunidad.
Todas las dolencias que pueda tener Facundo se agravan ante la huelga de hambre y a las consecuencias de huelgas anteriores: “Mari Mari, el tumor es pequeño pero está -dijo hoy Huala a La Retaguardia-. Y puede complicar la situación porque él está vomitando sangre, hoy a la mañana. Debido a la úlcera (estomacal) no está comiendo y no está tomado líquidos. Y empezó a vomitar sangre. Está como muy mareado, está bastante mal, así que toda esta situación preocupa mucho. La úlcera, la espalda, tiene varias cuestiones que vienen de arrastre de las huelgas pasadas. De la que hizo en Chile, cuando perdió muchos electrolitos porque al no consumir alimentos se van los electrolitos de la cabeza y se empieza a perder un poco la memoria o a no coordinar. La úlcera que preocupa, y la otra es el tumor en los riñones que puede empezar a orinar sangre en cualquier momento; más allá de que él se atiende con la Machi, en este momento no está tomando nada. Nada de nada, entonces eso me preocupa más a mí como mamá y a todos como el pueblo Mapuche y como los pueblos oprimidos”. Nunca la escuchamos tan preocupada.
Al cierre de esta nota se agregó otro testimonio en el mismo sentido. Es el de una joven mapuche que viene oficiando de vocera de la huelga: “Bueno, no son nada alentadoras las noticias hoy. El lonko está con vómitos desde que se levantó, y bueno ayer a la tarde lo volvieron a pesar y pesó 72,700 kg, y ahora a la mañana cuando lo pesaron pesó 71,700 kg. Nos manda mucho newen, yo también le mandé newen. Pero bueno, baja rápidamente de peso. Tendremos que seguir agitando algunas acciones para que los jueces despierten y nuestros propios hermanos para lograr que todos juntos con mucho newen podamos torcer la decisión de los jueces”, expresó.
La justicia que los tiene de hijos
El juez Gustavo Villanueva fue sutil al rechazar el Wiñoy: no le prohibió la realización de la ceremonia, sino que le dijo que podía realizarla en soledad, sin que ingresaran los hermanos y hermanas que integran la comunidad. Para Jones Huala es inaceptable, ya que el rito es justamente en comunidad. Ante ese fallo, se realizó una apelación ante la Cámara Federal de General Roca, que esta semana reafirmó el rechazo. En el voto del juez Barreiro puede leerse: “En esa dirección la aseveración de que la judicatura, al denegar el requerimiento, desconoce los derechos que allí con reforzado énfasis se enumeran resulta una demasía y para nada pueden convencer, puesto que ningún argentino o extranjero, sea de la etnia que fuere y cualquiera sea la religión a la que adhiera, ostenta el derecho de forzar a la autoridad estatal a conceder venia para alterar las normas que rigen la vida intramuros, so pretexto del ejercicio de una libertad religiosa. De no entenderse así debería admitirse entonces que todo pastor, sacerdote o líder de cualquier credo tiene el mismo derecho para, invocando la libertad de cultos que garantiza nuestra Constitución Nacional, organizar y celebrar actos religiosos multitudinarios dentro de las cárceles, subvirtiendo así el orden administrativo de las cosas: en lugar de que los internos se ciñan a las normas generales que regulan la vida carcelaria sería la autoridad del Estado -que dentro de un penal no es cualquier poder administrativo sino uno de singular intensidad, acaso el más riguroso que autorizan las leyes- la que quedaría sometida a la voluntad de un sujeto privado de la libertad por el solo hecho de postular que es un líder, guía o dirigente espiritual de cualquier jerarquía o calidad”. Se ve que en el 2016 no existían tales peligros. Ivanoff está segura de las razones de la negativa actual a algo que fue un sí hace tan poco tiempo: “La decisión es política realmente. Ahora, digo yo: esa misma ceremonia la hicieron con permiso en 2016, si esto no es de sesgo racial y religioso, ¿qué es?.. Sacá tus conclusiones””, por eso presentaron un hábeas corpus. “La petición de un hábeas corpus correctivo es porque la negación de un funcionario a reconocer y dar un derecho a estas alturas ya que es mapuche y que es una autoridad mapuche, la negación al reconocimiento de sus prácticas culturales y religiosa hace a la vulneración de esos derechos. La condición carcelaria ya es un agravio pero agravar la situación constituye la mayor expresión de vulneración de derechos humanos., dijo esta mañana Ivanoff a La Retaguardia. Este recurso lo tiene que aceptar o rechazar el juez Gustavo Lleral, que está a cargo de la investigación de la desaparición seguida de muerte de Santiago Maldonado.
La ceremonia debería realizarse el 29 de junio entre las 6:30 y las 14:30 en el patio del penal. A pesar de varios pedidos que le hicieron, Facundo Jones Huala continúa la huelga de hambre y su salud agrega más preocupación a su ya complicada situación.
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