“No hay circunstancias excepcionales que justifiquen el dictado del DNU, por lo que hay una inconstitucionalidad flagrante”, agregó el abogado laboralista y docente universitario Luis Roa.
El abogado laboralista, docente universitario y asesor de organizaciones gremiales Luis “Lucho” Roa analizó el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70/2023 al cual calificó como “inconstitucional” y como un “esperpento jurídico innecesario“. También elogió el amparo dictado por el Tribunal de la Cámara Nacional de Apelaciones de Trabajo por el cual dijo que “se ajusta a derecho”.
El mega DNU de Javier Milei modifica y elimina 366 artículos con cambios profundos para la economía y muchos otros aspecto de la vida social sin pasar por el Congreso de la Nación. “Hay una sustitución lisa y llana del Parlamento sin que haya nada que impida su funcionamiento. La Constitución dice que el Poder Ejecutivo participa en la elaboración de leyes, no que las debe hacer”, afirmó Roa.
“No hay circunstancias excepcionales que justifiquen el dictado del DNU, por lo que hay una inconstitucionalidad flagrante. Es un DNU de 366 artículos que atraviesa todo tipo de normas. Por ejemplo, ¿qué hay de urgente y necesario de rediscutir la ley de Alquileres que se discutió hace dos meses y medio? ¿Qué hay de urgente de modificar el estatuto de los viajantes de comercio que existe desde la década del ´50? Buscan sustituir la voluntad del pueblo expresada a través de sus diputados y senadores“, agregó.
“El DNU es inconstitucional no solo por las formas, lo es al llevarse puesto al sistema representativo, republicano y federal. Vulnera, además, la libertad de circulación, de expresión y de consciencia del artículo 14 y 33 de la Constitución Nacional. Violenta el artículo 16 de la Constitución Nacional cuando promueve la discriminación y dualiza la fuerza de trabajo en una clase obrera con derechos y una clase obrera bis con derechos de monotributistas. Es inconstitucional porque destroza las indemnizaciones“, puntualiza sobre un DNU que contiene una reforma laboral regresiva.
“Se lleva puesta la defensa del juicio, permite el pago de Indemnizaciones en 12 cuotas, promueve la industria del juicio en clave patronal. Hoy un patrón le conviene echar a un trabajador porque la inflación se come el capital que tenía un laburante. El DNU pone tasas de actualización de los créditos laborales por debajo de la inflación“, alertó Roa.
“Atenta contra el 14 bis de la Constitución donde dice que el trabajo contará con la protección de las leyes, no de la desprotección como establece el DNU. Además atenta contra la libertad sindical, desfinancia a las organizaciones sindicales y afecta el derecho de huelga que está totalmente barrido“, concluyó.
Acerca de la extensión del período de pruena de tres a ocho meses parafraseó reconocido abogado laboralista, Héctor Recalde: “si un patrón necesita ocho meses para ver si un trabajador le sirve hay que echar al patrón. Con ocho meses te están diciendo bienvenido a la joda”.
Volviendo a una mirada más amplia sobre el DNU subrayó: “Cada norma tiene su dueño con beneficios para todo el espectro del establishment y el poder concentrado”.
La ley ómnibus y el riesgo de fujimorazo. La cautelar de la CGT
El pasado 28 de diciembre el Gobierno nacional finalmente presentó la ley Ómnibus compuesta por 644 artículos que complementa el DNU mencionado líneas arriba en la desregulación de la economía, de reforma del Estado, avanza con el proceso de privatizaciones y declara la Emergencia en muchos temas lo que le permitiría a Javier Milei gobernar sin necesidad del Congreso por los cuatro años de su mandato de votarse favorablemente.
“Con la ley Ómnibus se establece la suma del poder público. Está la sombra del fujimorazo“, expresó Roa haciendo un paralelismo con el accionar del presidente peruano Alberto Fujimori que en 1992 decidió cerrar el Congreso de su país.
“Yo veo adormecido al Congreso de la Nación, no sé si es una táctica o parte del cimbronazo del resultado 18 de noviembre”, alertó Roa.
Por último, se refirió al fallo del Tribunal de la Cámara de Apelaciones del Trabajo por el cual suspendió el Título IV del mega DNU en donde se establecían las modificaciones a la legislación laboral mientras se define la cuestión de fondo. Roa valoró el fallo al que calificó como “ajustado a derecho”.
“Gana tiempo hasta que se expida la Comisión Bicameral del Congreso sobre si el DNU reune los requisitos constitucionalmente necesarios para ver si es viable o no“, agregó recordando que este mismo fallo puede ser revocable o enviarse e expediente al Tribunal Contencioso Administratitvo tal cual es la voluntad del Gobierno nacional.
“La estrategia de la CGT fue inteligente, no fue contra todo el DNU, fue contra el capítulo IV que habla sobre las cuestiones laborales. Está discutiendo temas específicos del trabajo y eso hace que se afiance la competencia de la Justicia Nacional del Trabajo“, concluyó.
Vale decir que posterior a la entrevista, la CTA obtuvo un fallo de similares características por parte de los mismos jueces que habían dictaminado favorablemente a la presentación realizada por la CGT.