Solidaridad con Gaza: “No es guerra, es un genocidio”

Este sábado se realizó en la Ciudad de Buenos Aires una nueva y masiva marcha en repudio al genocidio del Estado de Israel en Gaza, en una convocatoria global a un día de la salida desde Barcelona de la Sumud Flotilla Global. El Gobierno de la Ciudad envió efectivos policiales a provocar y reprimir manifestantes, con agresiones a periodistas y detenidos.

Fotos: Nicolas Solo ((i))

“Ya no hay más tiempo. No es guerra, es un genocidio” lanzaron desde el Comité Argentino de Solidaridad con el Pueblo Palestino en la convocatoria a una de las mayores manifestaciones por Gaza en el pasado reciente.

“Nos movilizamos contra el genocidio en Palestina. Exigimos ruptura de relaciones con Israel y sanciones YA. Acompañamos a la Global Sumud Flotilla rumbo a Gaza”, fueron algunas de las consignas.

La marcha partió desde Congreso por Callao hacia Corrientes para luego avanzar por Diagonal hacia Plaza de Mayo. En ese recorrido empezaron a sufrir el hostigamiento de la Policía de la Ciudad, que en un momento empezaron a golpear indiscriminadamente, dejando heridos a varios adultos mayores y a periodistas.

Video del momento en que la Policía reprime la marcha y se lleva detenido a Fernando Iglesias. Fuente. Corresponsal popular

Además, se llevaron detenido a Fernando Iglesias, hijo de Carmen Román, desaparecida durante la última dictadura. El hecho ocurrió muy cerca de donde fue secuestrada su madre bajo el Terrorismo de Estado. Por la noche, tras la gestión de organismos y asesores legales, recuperó la libertad.

Finalmente, la marcha continuó avanzando hasta llegar a Plaza de Mayo,donde se realizó un acto solidario con Palestina y repudio al gobierno por invitar al genocida Benjamín Netanyahu al país.

Hacia el cierre se dieron nuevas provocaciones de la Policía de la Ciudad, que no llegaron a constituirse en nuevos hechos represivos.

Como se verifica también en la política de hostigamiento hacia cartoneros y otros sectores, el Gobierno de la Ciudad de Jorge Macri, ahora abiertamente aliado al gobierno de ultraderecha de Javier Milei, a su vez alineado con el sionismo, sobreactúa sus rasgos más reaccionarios para satisfacer a su nuevo jefe político.

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