Mediante un recurso de amparo presentado por la CTA Autónoma, las trabajadoras y trabajadores de la empresa textil Sport Tech ganaron una batalla importante en el conflicto. El juez Mariano Grammatico Mazzari rechazó el desalojo y el pedido de quiebra, dando además curso para que se confeccionen inventarios de las máquinas embargadas a favor de los trabajadores.
Tras la multitudinaria movilización del día de ayer de Sindicato Unido de Costureros y Empleados del Vestido (SUCEV-CTA A) con la solidaridad de la CTA Autónoma Nacional, Bonaerense, Capital, lxs estatales de ATE y numerosas organizaciones sociales como MAR; se consiguieron dos reuniones en el Ministerio de Trabajo; una será mañana jueves 17 de enero, y la segunda el día martes 22 de enero.
Hipólito Duarte, Secretario de Organización de la Regional San Martín comentó que “representantes de Adidas y Nike informaron que reconocerán una porcentaje de la deuda en salarios, y harían una propuesta el día martes 22. La empresa Puma no se presentó a la reunión del día de ayer, pero se estima que lo hará el día martes. Además se logró que los compañeros que están adentro. Desde la Regional, tanto como desde ATE y las organizaciones solidarias que acompañan la lucha de lxs trabajadorxs, daremos todo el apoyo necesario y seguiremos convocando a rodear de solidaridad el conflicto”
En tanto Tomás Devoto, Secretario de Salud Laboral de la Mesa Provincial de la CTA Autónoma Bonaerense valoró el triunfo parcial diciendo que “durante el plazo de un mes al menos, regirá la cautelar planteada por la CTA Autónoma. Al no hacer lugar al pedido de desalojo, la empresa tiene que abrir las puertas de la fábrica a las 6.30 de la mañana para que lxs trabajadorxs puedan ingresar. La permanencia pacífica en el marco de la lucha por el pago de salarios adeudados y en defensa de la fuente laboral sigue en pie”
“Ante la inminencia de una posible estafa laboral y el vaciamiento de la fábrica, decidimos realizar un paro y asamblea las 24 horas del día, sin movernos de nuestros puestos de trabajo”. Y aclaró que “esta decisión no fue solamente por los sueldos adeudados, que alcanzan los 40 mil pesos por cabeza, también tiene que ver con una construcción a futuro, por la continuidad laboral. Hay vidas que dependen de estas fuentes de trabajo, hay una compañera que le agarró un paro cardiorrespiratorio a raíz de lo sucedido, otra compañera que tiene cáncer de mamas dejó de recibir el tratamiento oncológico porque hace un año no le pagan la obra social, el hijo de un compañero que tiene cirrosis dejó de recibir el tratamiento; y compañeros que han recibido órdenes de desalojo de sus viviendas”, había expresado ayer desde adentro de la fábrica Fernando Castillo, trabajador y secretario General del Sindicato Unido de Costureros y Empleados del Vestido (SUCEV-CTA A).