En otra jornada conmovedora, con un Paro Plurinacional e Internacional en el Día de la Mujer Trabajadora, el movimiento de mujeres y disidencias mostró ser nuevamente uno de los más convocantes de esta etapa histórica. Se estimó la participación de 50 mil personas en la marcha que en Rosario recorrió desde Plaza San Martín al Monumento a la Bandera. Con recital y proclama con un centenar de reivindicaciones leída a coro, la jornada contó un pañuelazo multitudinario por el derecho a decidir.
Las miradas circulaban entre desconocides y las sonrisas y los abrazos se multiplicaban. No importaba si era la primera vez que dos personas se veían. La alegría y empatía masiva vista (y vivida) en la marcha del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, hizo de la multitud un espacio de encuentros.
El trapo principal de la marcha rosarina daba cuenta del crecimiento cualitativo del multisectorial, diverso, heterogéneo, movimiento de mujeres. “8M Paro Plurinacional e Internacional de Mujeres y Disidencias”. La conducción del acto estuvo integrado por un dúo que contó con una integrante de la comunidad LGTBIQ, mostrando a nivel local un consenso general sobre la concepción de la lucha antipatriarcal.
Las columnas bajaron por horas por el lateral del Monumento Nacional a la Bandera y se las esperó con un recital, para pasar luego a la lectura colectiva de la proclama que incluía casi un centenar de reivindicaciones que abordaban una integridad de temáticas, problemáticas, reinvindicaciones, exigencias, que reflejaron un fuerte nivel de participación y debate (Leer Documento 8M Rosario). Es que esta movida en la ciudad viene organizándose desde enero con la concurrencia de cientos de mujeres y disidencias.
Hubo cánticos a favor del derecho al aborto, la educación sexual integral, contra el ajuste macrista, repudiando el rol de las iglesias, exigiendo mayores presupuestos estatales contra las violencias, convocando a sumarse a la lucha colectiva. También de la banda Alto Guiso hubo un pogo gigante y colorido donde sin dudas el color verde predominó.
Un año más, el feminismo demostó su potencia transformadora de las estructuras heteropatriarcales. La marea avanza contra el capitalismo, y trae a cuenta miles de luchas que se dan cada día en nuestras tierras. Una vez más, las mujeres movilizaron contra este modelo de explotación y violencia. Una vez más, la sujeta colectiva donde todes tienen su voz, mostró ser la actriz más dinámica y convocante de esta etapa histórica.
Fotos: Sofía Alberti – Indymedia Rosario