Organizada por el Consejo del sitio de memoria ex CCD Pozo de Quilmes, la actividad se realizó este lunes 26 de octubre y contó con la participación del presidente de la CPM Adolfo Pérez Esquivel, la intendenta de Quilmes Mayra Mendoza, el subsecretario de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires Matías Moreno, y el pastor evangélico e integrante del Colectivo Quilmes, Arturo Blatezky, además de Viviana Buscaglia, Rubén “el polaco” Schell y otros referentes del espacio de derechos humanos que promovió y logró en 2016 la creación del Sitio de Memoria exCCD Pozo de Quilmes. “Ese lugar, que fue un sitio del terror, ahora le damos un sentido de vida. Los desaparecidos no son muertos, son semillas de vida porque están dando sus frutos en la conciencia de los pueblos”, afirmó Pérez Esquivel.
“Era impensado, en 2016 cuando empezamos a redactar el boceto de ley de desafectación del Pozo de Quilmes, que llegaríamos a esta instancia, haberlo logrado con los consensos necesarios para que el pozo se reconvirtiera en un sitio de memoria y que todos y todas las que estamos acá fueramos cogestores de este espacio”, abrió la jornada Viviana Buscaglia, una de las referentes del Colectivo Quilmes, Memoria, Verdad y Justicia.
El encuentro se realizó ante el inminente inicio del juicio por los crímenes de lesa humanidad cometidos en los pozos de Quilmes y Banfield, y en El Infierno, de Avellaneda, que juzgará a 18 imputados a instancias del TOF 1 de La Plata.
Antes de la mesa debate, la CPM firmó un convenio de cooperación con el Municipio de Quilmes para trabajar en la formación de un centro de documentación con las historias locales relacionadas al pasado reciente y las violaciones a los derechos humanos, tanto en dictadura como en democracia, en el marco del programa de la CPM “Memoria y Archivos locales”, que ya fue suscripto por otros 11 municipios de la provincia de Buenos Aires. Mediante la firma del convenio, se facilitará el acceso a la documentación de inteligencia de la DIPPBA sobre establecimientos y organizaciones de Quilmes y se capacitará a referentes municipales en la gestión de archivos.
Por su parte, el presidente de la CPM, Adolfo Pérez Esquivel, agregó que “en nuestro programa de Jóvenes y Memoria se pone de manifiesto sobre cómo bucear en la memoria y cómo eso genera otro tipo de conciencia social, política, espiritual, para los cambios que necesita nuestra sociedad. Es muy bueno esto de unir fuerzas y voluntades para continuar el camino. Las generaciones que nos siguen lo van a recoger y profundizar. Estas huellas son las de la esperanza de cambio”.
Con la presencia de la mayoría de integrantes de la Comisión Provincial por la Memoria -Dora Barrancos, Ernesto Alonso, Víctor Mendibil, Ana Barletta, Yamila Zavala Rodríguez, María Sonderéguer, Víctor de Gennaro-, el director distrital de Derechos Humanos y miembro del Colectivo Quilmes, Hugo Colaone, y referentes de organizaciones de la región, el encuentro se planteó, entre otros ejes, como un balance preliminar de la justicia en torno a crímenes de lesa humanidad en el marco del inicio del juicio por los pozos de Quilmes y Banfield, y el CCD El infierno, de Avellaneda.
“Como militantes nos importa la verdad. Cuando discutimos sobre la verdad, es porque queremos una justicia verdaderamente justa, y que mañana por fin pueda empezar el juicio que tantísimos años hemos estado esperando. Lo agradecemos muchísimo, y nos estaremos encontrando de una u otra manera. Nos queremos como militantes, como amigas y amigos y por la justicia y por la vida, sobre todo la de nuestros hermanos y hermanas más pobres”, afirmó el pastor evangélico e integrante del Colectivo Quilmes, Arturo Blatezky.
Por su parte, Pérez Esquivel recordó los años del origen de las organizaciones por los derechos humanos, desde 1975 con la Asamblea Permanente por los DDHH y el Movimiento Ecuménico, cuando “todavía era muy difícil encontrarnos y organizarnos, más que en las plazas y los parques.
“Estábamos en la resistencia. No sólo que nos cerraban las puertas de instituciones, sino también aquellas que considerábamos amigos y amigas. Éramos como leprosos. Sin perder nunca la esperanza, fuimos luchando y hoy estamos aquí. Tenemos el presente, y nos tiene que iluminar la conciencia para la resistencia”, enfatizó el Premio Nobel de la Paz y presidente de la CPM.
Mayra Mendoza celebró que finalmente comience el juicio y “que 18 genocidas del Pozo de Quilmes sean juzgados por el Estado Argentino, porque no es rencor ni odio lo que nos guía, sino justicia contra la impunidad. El Pozo de Quilmes es la representación de aquellos tiempos de oscuridad: sí sabemos qué pasó, porque conocemos y respetamos la historia de quienes lucharon. Sabemos que nuestro rol debe ser generar las condiciones para que nunca más vuelvan a ocurrir atentados contra el sistema democrático y la vigencia de los derechos humanos”.
Por último, el subsecretario de Derechos Humanos de la Provincia, Matías Moreno, describió como esperanzador el comienzo del tan postergado debate oral y público y destacó que “como militantes debemos tomarnos el trabajo de construir el Nunca Más frente al neoliberalismo, que va en total contradicción cultural, social y económica con la perspectiva de los derechos humanos y de una sociedad realmente democrática. Seguramente cuando llegue la sentencia de este nuevo juicio nos encontraremos, ojalá presencialmente, pero sabemos que la verdadera reivindicación para nuestros 30 mil compañeros y compañeras es seguir poniendo de pie a la Argentina y a nuestra querida provincia”.