El hospital Larcade tiene un altísimo porcentaje de los trabajadores, cercano al 90%, en situación de precarización, con más del 60 % del sueldo en negro. Las enfermeras y enfermeros (esenciales, primera línea del combate contra el Covid19), ganan 8.000 $ mensuales (OCHO MIL) y un plus por presentismo de 17.000.
No hay personal de planta permanente, ni con carrera médica o profesional. Hace más de 15 años que no hay pases a planta. Con la Pandemia hubo una migración de personal a clínicas privadas por la obvia diferencia de sueldos tanto de planta médica como de enfermería, faltante que es cubierta con horas extras llevando a turnos interminables para poder redondear un salario medianamente digno.
Para que se den una idea de lo irregular y precarizado, los aportes jubilatorios se liquidan al final, cuando el agente se jubila y si no llega a jubilarse.
¿Qué pasa con esos aportes? ¿A dónde van?
El conflicto estalló por la falta de respuesta que teníamos cada uno de manera independiente cuando reclamábamos por estos inconvenientes pero uno de los detonantes fue que corrieron de carrera médica a los pocos profesionales de planta permanente (unos 9 médicos, si leyeron bien de más de 400 sólo 9 en carrera)
El sindicato de trabajadores municipales de San Miguel en los primeros días nos apoyó, apoyó a los autoconvocados ,pero enseguida mostró su parcialidad hacia el Ejecutivo municipal
El mejor ejemplo de esto lo vivimos cuando a nuestras espaldas, arregló un irrisorio 5% de aumento. (Ellos lo publicaron como un 10% pero 5 % ya estaba pactado desde antes).
Ante la falta de representación gremial los profesionales decidimos reflotar la filial de CICOP ATHUL (Asociación de Trabajadores Unidos del Hospital Larcade).que durante muchos años funcionó en el Hospital y que por razones políticas debilitaron hasta hacerla desaparecer.
Para esto se reliazaron elecciones para comisión directiva, el 4 de marzo. Al rato de haber comenzado el acto eleccionario un grupo de policía municipal y seguridad privada del municipio interrumpió las elecciones, fajando las puertas y queriendo llevarse las urnas, El gravisimo acto de amedrentamiento policial, contra un derecho elemental de las y los trabajadorxs a votar en una organización sindical, es parte del largo ataque que viene desplegando el intendente Jaime Mendez contra el hospital local y en particular contra sus trabajadorxs.
¡Quisieron suspender las elecciones y secuestrar las urnas!, la resistencia de las y los trabajadores del hospital rechazó este intento y las elecciones continuaron.
Esto terminó con el poco e improductivo diálogo que había.
Estamos organizando una marcha para el martes 30 de marzo a las 15:00 hs.
¡Pase a planta de todo el personal contratado!
¡Por la provincialización del hospital ¡
¡LA SALUD PÚBLICA LA RECUPERAMOS ENTRE TODOS!