Siete disparos impactaron en el cuerpo del joven la madrugada del 5 de julio pasado. El fiscal Alejandro Pellegrinelli a partir del testimonio de Arcángel Bogado, el policía implicado, consideró que se trataba de un caso de legítima defensa. Ahora la Fiscalía General apoyó su pedido de sobreseimiento, eso deja sola a la querella que llegaría sola al juicio si se aprueba la elevación.
La familia se movilizó desde el primer momento y pidió una investigación imparcial. La querella integrada por Cesar Sivo y Romina Merino pidió otras medidas de prueba para llegar a juicio por homicidio agravado. Al volverse un caso sensible el fiscal Alejandro Pellegrinelli solicitó otros dos fiscales para analizar la causa, Fernando Berlingeri y David Bruna, que apoyaron su convicción: la actuación por legítima defensa. Esa hipótesis es la que ahora apoya el dictamen firmado por el fiscal general adjunto.
“Es una valoración absolutamente apresurada, en primer lugar porque faltaban hacer medidas que hubieran permitido determinar claramente la dinámica de los hechos. En segundo lugar es absurda, un absurdo valorativo por donde quieras, porque es evidente que fue una ejecución, que fue una emboscada que le hizo Bogado a los pibes, más allá de que pueda haber sufrido al inicio una situación de un robo, o un posible robo”, analiza Sivo.
Esa noche Bogado se cruzó con dos motos. Una con tres ocupantes y otra con dos, en la que iba Brandon con otro joven. El dictamen la Fiscalía General describe esa escena retomando el testimonio del policía y afirma que esa madrugada el agente fue abordado por otra moto con el “inequívoco fin” de un robo. “Entendemos que bajo las circunstancias que se demostraron sucedió el hecho, no se le puede exigir al encartado mayores comportamientos heróicos”, concluye el dictamen firmado por Marcos Pagella.
“Más allá de eso luego él los emboscó y lo ejecutó al chico, y es evidente, surge de toda la prueba, entonces me parece que debe mirarse de esa manera. Lo más grave es que la fiscalía no tiene en cuenta que es una muerte violenta, siete disparos que impactan contra una persona efectuada por un policía en funciones. Con la muerte debe ser muy exahustiva la investigación, con una muerte a manos de un funcionario policial muchísimo más”, responde SIvo.
Ahora está en manos del juez de garantías Saúl Errandonea evaluar el pedido de sobreseimiento para Bogado y el requerimiento de elevación a juicio de la familia Romero como particular damnificado. “Seguimos solos”, resume el abogado querellante que de llegar al juicio lo haría sin acompañamiento de la fiscalía, como en el caso de Omar Cigarán.