Este informe del Observatorio del Derecho Social de la CTAA analiza los datos sobre empleo registrado en el sector privado recientemente publicados por el Ministerio de Trabajo correspondientes a febrero de 2021.
En este documento se cuantifica el impacto de la pandemia en la ocupación y, en particular, como a partir de agosto la cantidad total comenzó a crecer levemente, aunque en niveles muy marginales.
También incluye una referencia al mediano plazo, donde se observa el estancamiento relativo del mercado de fuerza de trabajo entre los años 2011 y 2017, el impacto de la crisis a partir de 2018 y con mayor fuerza en 2020, para llegar a un nuevo estancamiento en los últimos meses, en niveles muy bajos en términos históricos.
Evolución
El Ministerio de Trabajo publicó los datos del empleo registrado del sector privado en febrero (SIPA). Buen momento para hacer una primera evaluación del impacto de la pandemia y para agregar una mirada de mediano plazo.
En febrero volvió a crecer el empleo registrado por séptimo mes consecutivo. Si bien gran parte de este movimiento es estaciónal, no deja de ser una buena noticia en este contexto. En comparación con julio último hay 105.992 trabajadores más.
En comparación con el momento pre pandemia (febrero de 2020), el empleo registrado cayó un 2,6% (154.888) trabajadores menos. Construcción, comercio y hoteles y restaurantes explican el 75% de este retroceso.
Por el contrario, el empleo en la industria está por encima de los niveles pre pandemia. En comparación con un año atrás se sumaron 097 trabajadores. Algo de aire para un sector que retrocedió ininterrumpidamente entre septiembre de 2015 y mayo de 2020.
Ampliando un poco el foco, el escenario sigue siendo preocupante. El rebote de los meses previos a la segunda ola fue muy leve. En todo caso servía para decir que parecíamos haber tocado un piso, pero ello en el marco de un contexto más que difícil.
El mercado formal de fuerza de trabajo estuvo relativamente estancado entre 2011 y 2017, entró en franco retroceso en 2018 y se derrumbó con la pandemia. A partir del segundo semestre de 2020 se ve una curva plana: dejamos de caer, pero el incremento es marginal.
La debilidad del mercado formal de fuerza de trabajo en la última década fue compensada por un crecimiento del empleo público entre 2011 y 2015, y por un aumento de los trabajadores no registrados y los cuentapropistas entre 2016 y 2019.
Pandemia mediante es imposible caracterizar la política laboral a partir de 2020, más allá de las respuestas a las que sin embargo no está de más recordar que algo viene funcionando muy mal desde hace mucho tiempo, y que difícilmente se supere con más gradualismo.