El primero de septiembre a las 19.00 se inaugura la Muestra itinerante “Fuera Mekorot” en la Casona de Humahuaca en la Ciudad de Buenos Aires. La misma estará disponible hasta el 15 de septiembre en Humahuaca 3508. Mekorot, empresa estatal israelí que se instaló en Argentina para afianzar los planes de expansión mundial, está acusada de violar el derecho al acceso al agua de la comunidad palestina en lo que se ha dado en llamar “apartheid del agua”.
Por Claudia Castro T.-Red Eco.
En declaraciones a la coordinadora Basta de Falsas Soluciones, Maren Mantovani, integrante del Comité Nacional Palestino de BDS, señaló: “La Mekorot, que fundamentalmente está robando todo el agua al pueblo palestino, es una herramienta fundamental de todo este proyecto colonial racista israelí. En Argentina ya se tuvo una experiencia en 2009. (…) No es justo que el dinero público argentino vaya a financiar una empresa que en Palestina está involucrada en los crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad que Israel comete contra el pueblo Palestino”.
Mekorot ha sido denunciada por la ONU, el Comité Nacional Palestino BDS, partidos políticos, grupos parlamentarios, organizaciones sociales, y por diversas asociaciones ecologistas y de cuidado del medioambiente, tanto fuera como dentro de Argentina.
La asamblea Pucará (Pueblos Catamarqueños en Resistencia y Autodeterminación), que articula acciones que defienden la vida, el agua y el territorio de esa provincia argentina, hacen hincapié no solo en la falta de información sobre los convenios firmados, sino sobre lo que supone una mercantilización y privatización del agua, y una profundización de un modelo extractivista que, en un contexto de cambio climático y sequía extrema como el actual, no hace más que empeorar las condiciones de vida.
En febrero de este año, cinco provincias argentinas firmaron convenios de gestión del agua con Mekorot, y se sumaron a las dos que ya lo habían hecho en septiembre de 2022. El objetivo es la implementación de un Plan Maestro del Sector Hídrico, el cual supone el control de este recurso escaso por parte de la empresa.
Distintas movilizaciones y campañas de presión internacional lograron que empresas de agua pública de Brasil, Holanda y Portugal suspendieran contratos firmados con Mekorot, mientras que en 2013, la empresa israelí debió dar marcha atrás con un contrato previsto para construir una planta potabilizadora en Argentina, donde ahora afianza su presencia.
Por iniciativa del Ministro del Interior Wado de Pedro, a través del Consejo Federal de Inversiones, las provincias de Mendoza, San Juan, Catamarca, La Rioja, Formosa, Río Negro y Santa Cruz firmaron convenios con Mekorot, para el diseño de planes maestros de agua y la modificación de la normativa para favorecer la privatización y mercantilización, entre otros objetivos.
Según Amnistía Internacional, en línea con lo que manifiesta la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU, Israel controla incluso la acumulación del agua de lluvia en la mayor parte de Cisjordania, y es frecuente que el ejército israelí destruya las cisternas que poseen las comunidades palestinas para ese fin.
Asimismo, Mekorot vende parte del agua a empresas de suministro de agua palestinas, pero el gobierno israelí decide las cantidades. Las restricciones obligan a muchas comunidades palestinas de Cisjordania a comprar agua que se transporta en camiones a precios muy elevados, lo cual, en las comunidades más pobres, puede significar la mitad de los ingresos mensuales de una familia. Por su parte, los colonos israelíes, que viven junto a los palestinos —en algunos casos solo los separan unos cientos de metros—,h no sufren estas restricciones, ni la escasez de agua.
Mientras tanto, en Gaza, entre el 90% y el 95% del suministro de agua está contaminado y no es apto para el consumo humano. Israel no permite el traslado de agua de Cisjordania a Gaza. Y el único recurso de agua dulce, el acuífero costero, es insuficiente para satisfacer las necesidades de la población, se está agotando gradualmente debido a la extracción excesiva y está contaminado por aguas residuales y por la infiltración de agua del mar.
Debido a que Israel es un poder de ocupación en Cisjordania, la Franja de Gaza y Jerusalén, la compañía está acusada de saquear los recursos naturales en los territorios ocupados, ya que gran parte del agua que se utiliza en esas zonas proviene de territorios palestinos. El 85% de la población indígena palestina accede sólo a 40 litros diarios de agua, mientras que la OMS recomienda 100 litros. Lo que Mekorot vende como «milagro del desierto» en Israel, es saqueo, ocupación y colonialismo.
MEKOROT: la fuente
Mekorot fue fundada en 1937 y significa “fuente” en hebreo. Es la compañía nacional de agua de Israel y la principal responsable de la planificación y gestión de los recursos hídricos en este país. En 1982, Israel asumió la administración de la infraestructura de suministro de agua en los territorios palestinos ocupados ilegalmente desde 1967, en la orilla occidental del río Jordán.
En noviembre de 1967, Israel promulgó la Orden Militar 158, que estableció la prohibición para la población palestina de construir nuevas instalaciones para el abastecimiento de agua sin obtener previamente el permiso de las fuerzas armadas israelíes.
A partir de ese momento, la extracción de agua de cualquier nueva fuente o el desarrollo de cualquier nueva infraestructura hídrica requiere el permiso de Israel, algo prácticamente imposible.
Los palestinos tienen prohibido perforar nuevos pozos, ahondar los ya existentes o instalar bombas. Además Israel les niega el acceso al río Jordán y a las fuentes de agua dulce.