Las Asociaciones del Personal Aeronáutico (APA) y de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA) paralizaron sus tareas en demanda de un incremento salarial. Provocaron centenares de cancelaciones y reprogramaciones de vuelos. Patricia Bullrich se metió en el conflicto y Edgardo Llano la cruzó: “La mañana no es buena hora para comenzar con el Malbec”.
El Grupo LATAM suspendió todas las operaciones desde y hacia Argentina, en tanto Aerolíneas Argentinas canceló 331 vuelos, lo que afectó a casi 24 mil pasajeros, de los cuales 18 mil son de cabotaje, 3 mil de destinos regionales y otros 3 mil internacionales. JetSMART canceló la totalidad de los vuelos programados para 8.300 pasajeros.
Los secretarios general y de Prensa de APLA y UPSA, Pablo Biró y Marcelo Uhrich, respectivamente, señalaron “el éxito y acatamiento total de la medida de fuerza” y repudiaron declaraciones de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
La funcionaria había denunciado a través de su cuenta de X que “se intentó cortar las calles”, por lo que ordenó a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) mantener la “libre circulación en todos los aeropuertos” y afirmó que “la Argentina de los aprietes terminó” y que “los que se creen dueños de la calle intentaron bloquear el ingreso a Aeroparque”.
Biro y Uhrich repudiaron esas declaraciones y aseguraron que “ningún trabajador concurrió hoy al aeroparque Jorge Newbery y al aeropuerto internacional de Ezeiza a cumplir tareas” y rechazaron “los supuestos cortes de calles”.
Uhrich dijo a Télam que “no hubo trabajadores en los aeropuertos, nadie fue a cumplir tareas, no hubo manifestaciones ni cortes de calles, y hay videos al respecto”.
“Bullrich, como toda la vida, mintió una vez más. Nadie trabó nada, a excepción de la PSA, que bloqueó los accesos a las terminales para que no ingresaran los trabajadores. No dejó entrar a nadie. Bullrich sigue vendiendo humo para justificarse a sí misma y una supuesta represión. Pero la jugada le salió muy mal. Que siga esperando”, señaló.
Edgardo Llano, el titular de APA, fue más allá. En su cuenta en la red social X picanteó a la ministra: “Dejá de mentir e informate mejor. De qué bloqueos hablás? los aeronáuticos están todos en su casa en este día de paro, la mañana no es buena hora para comenzar con el malbec”.
Solamente la low cost Flybondi y la internacional American Airlines operaron desde el aeropuerto internacional de Ezeiza, debido a que cuentan con asistencia propia en pista.
Aerolíneas Argentinas estimó que el costo de la medida de fuerza en el resultado operativo de la compañía rondará los 2 millones de dólares.
“Lamentamos profundamente los inconvenientes que esta medida causa a nuestros pasajeros. Continuaremos trabajando para ofrecer un servicio de calidad, manteniendo a la seguridad operacional como principal prioridad”, indicó en un comunicado.
La empresa solicitó a los pasajeros “no concurrir a los aeropuertos o sucursales durante el día, ya que no habrá atención presencial de personal de la aerolínea”.
La ‘low cost’ JetSmart advirtió que debido a las medidas gremiales “la aerolínea se ha visto en la obligación de cancelar la totalidad de sus vuelos programados para hoy”.
El portavoz presidencial, Manuel Adorni, sostuvo que “dejaron a 35 mil personas sin poder viajar; 35 mil personas que tal vez perdieron una oportunidad de empleo, de vacacionar o una oportunidad de cualquier otra índole. Nos apena mucho”.
Uhrich adelantó a Télam que mañana los gremios evaluarán la jornada de paro y su impacto, a la vez que repudió que luego de realizar “un gran esfuerzo y de haber llegado a un acuerdo salarial, el ministro de Economía, Luis Caputo, decidió, no se sabe con qué fin, que se rompieran las actas y que todo fuese para atrás”.
“De forma previa a proseguir con las protestas hay que escuchar al Presidente (Javier Milei) en el Congreso. Habrá que prestar atención a su discurso de apertura de sesiones ordinarias el viernes, porque según para el lado que arranque continuará este juego de ajedrez. Pero continuará habiendo protestas y reclamos, porque el 12% de aumento ofrecido no existe. Hay gente que percibe 350 mil pesos y no le sirve para nada”, dijo.
Para Uhrich, el Gobierno no entiende que “no le sirve al trabajador, porque con ese ingreso lo echaron de donde alquilaba, tuvo que volver a vivir con sus padres, los matrimonios se separan a diario. La realidad económica genera situaciones sociales no deseadas y muy graves. Tenemos trabajadores por debajo de la línea de pobreza, lo que no puede ser convalidado desde lo sindical. Por lo que habrá más protestas”.
“No hablo de un plan de lucha, porque con gente impredecible como esta no es posible. Hoy es todo circunstancial, lo que obliga a decidir sobre la marcha. Todos están en la misma línea, por lo que se aproxima un nuevo paro general de la CGT, con movilización, porque esta situación decantará en un grave problema social que no se soporta”, dijo.
Biró también aseguró que “ningún trabajador cortó nada en las terminales aéreas porque sencillamente nadie fue a cumplir tareas”, y dijo a Télam que los sindicatos no fueron nuevamente convocados a negociar la paritaria.
“Lorenzo Miguel, líder de los metalúrgicos durante tres décadas, solía afirmar que ‘hasta los más duros a temperatura acorde aflojan’. El sabía mucho de herrería, y decía que ‘a temperatura acorde todo afloja, hasta el metal’. La conflictividad irá en ascenso y la movilidad social en descenso. Por lo que no parará el conflicto”, enfatizó.
El piloto dijo que “las actas-acuerdo salariales estaban firmadas” y fue Caputo quien ordenó “romper el acuerdo”, aunque sostuvo que ningún dirigente sindical conoce a ciencia cierta “el objetivo del Gobierno”.
“¿Qué hará ahora Milei? No puede anunciar el viernes próximo la privatización de Aerolíneas Argentinas. Ello estaba contenido en su proyecto de ley ‘Bases’ que rechazó el Congreso. Auguro una nueva lucha gremial muy extensa, que solo se detendrá cuando el poder político, a medida que avance el malhumor social, pare su atroz ofensiva contra la gente y los trabajadores, que sufren el plan económico”, dijo Biró.
Para ambos, “los funcionarios de Trabajo no entendían nada y aseguraban que por primera vez en sus vidas, luego de firmadas las actas-acuerdo, Caputo llamó alegando que no hay plata y ordenando que sus comisionados dijesen ‘acá no pasó ni se convino nada’, lo que fue realmente increíble”.
Los tres gremios -APLA, APA y UPSA- paralizaron las tareas en Aerolíneas Argentinas e Intercargo, lo que fue respaldado por la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) de Sergio Sasia y la Unión General de Asociaciones de Trabajadores del Transporte (Ugatt) de Omar Maturano.
“Las paritarias son una herramienta para mantener el poder adquisitivo de los salarios, que están deteriorados en varias actividades por la inflación”, explicó la CATT al apoyar la huelga, respaldada por la ITF mundial.
El acuerdo alcanzado el martes contemplaba una mejora del 16% para este mes y 12% para marzo, pero intervino Caputo y “todo quedó en la nada”, indicaron los dirigentes.
Los sindicalistas denunciaron “un desfase salarial de entre el 70 y 75%” y adelantaron que si son convocados al diálogo concurrirán, aunque Biró descree de esa posibilidad.
“En cabotaje se modificaron 305 vuelos, en lo regional 24 y en el plano internacional cambiaron dos. El costo total operativo rondará los 2 millones de dólares”, dijo AA.