Este sábado 30 se conmemoraron 18 años de una de las tragedias más lamentables en la historia del trabajo en Argentina. La tarde del 30 de marzo de 2006, un problema eléctrico producto de la negligencia, desató un devastador incendio en el edificio ubicado en la calle Luis Viale 1269 de la Ciudad de Buenos Aires. Este lugar funcionaba como un taller clandestino de costura, donde 65 personas de nacionalidad boliviana, incluyendo 25 niños, trabajaban y vivían en condiciones precarias. Eran forzados a permanecer en el lugar ya que se les retenían los salarios, lo que les impedía alquilar viviendas fuera del establecimiento. El fuego se llevó las vidas de Juana Vilca (25 años y embarazada), Wifredo Quispe (15), Elías Carabajal (10), Rodrigo Carabajal (4), Luis Quispe (4), y Harry Rodríguez (3).
Buenos Aires – A las 15 horas del sábado, una gran cantidad de artistas, vecinos, organizaciones y personas se acercó para brindar su apoyo y solidaridad a la causa de Luis Viale. Lourdes Hidalgo, sobreviviente de la tragedia, tomó la palabra para agradecer el apoyo recibido y compartir sus sentimientos. Con voz firme, expresó: “Nuestro dolor se transformó en lucha y hoy en día seguimos aquí, de pie. A pesar de que la patronal quebró mi salud, mi fuerza de voluntad para seguir luchando en busca de justicia por mis compañeros y sus hijos no podrá ser quebrantada. Llevar esta lucha es dura, pero seguimos aquí”.
Hidalgo también señaló la responsabilidad que recae sobre las autoridades gubernamentales, al afirmar: “Todos los funcionarios del gobierno de la ciudad sabían lo que sucedía aquí”.
La declaración de los sobrevivientes se basa en la frecuente presencia de inspectores y policías en el taller, donde también se observaba la carga de mercadería en los baúles de los patrulleros.
Ellos podrían haber evitado estas muertes: “Debemos ser claros: aquí hubo mucha discriminación y mucho racismo hacia nosotros, porque estas muertes eran evitables; acá perdieron la vida trabajadores junto a sus hijos cosiendo la ropa para el Estado Argentino”.
La Comisión por la Memoria y Justicia de los Obreros Textiles de Luis Viale está llevando a cabo una iniciativa para honrar la memoria de las víctimas y sobrevivientes de la tragedia. En este sentido, están impulsando y solicitando formalmente la expropiación y patrimonialización del establecimiento.
La propuesta de la Comisión va más allá de simplemente conservar el lugar como un sitio histórico. Su visión es transformar el taller en un centro de memoria dedicado a las víctimas y sobrevivientes. Este espacio no solo servirá como un recordatorio tangible de la tragedia, sino que también buscará ser un lugar activo y significativo que promueva la conciencia sobre la importancia de proteger los derechos laborales y combatir la explotación en todas sus formas.
El acto concluyó con un llamado a mantener viva la memoria de las víctimas y a continuar la lucha por la verdad y la justicia. A 18 años de la masacre de Luis Viale, la comunidad sigue unida en su reclamo y compromiso con una causa que busca no solo recordar a las víctimas, sino también prevenir futuros episodios de explotación y negligencia.
Fuente: https://www.redeco.com.ar/nacional/trabajadorxs/40202