Conversamos con Eduardo Soares, de la Gremial de Abogados y Abogadas de Argentina, sobre los dichos de Patricia Bullrich, Ministra de Seguridad, respecto al retiro del estatus de refugiados a miembros del Ejército del Pueblo Paraguayo.
(Red Eco) Argentina – Eduardo Soares, de la Gremial de abogados y abogadas de Argentina, es uno de los abogados de la familia Villalba en Argentina y también de los abogados que están gestionando y denunciando al Estado paraguayo ante los organismos internacionales.
Desde RedEco Alternativo le consultamos por los dichos de la Ministra de Seguridad de la Nación Patricia Bullrich en su viaje a la República del Paraguay, donde participa del “51° Reunión de ministros del Interior y Seguridad del Mercosur y Estados Asociados”, que afirmó: “el Gobierno argentino, a través de la Comisión patoNacional de Refugiados, ha decidido retirar el estatus de refugiados a aquellas personas que no están aquí por cuestiones políticas, sino que han cometido actos criminales en sus países. En este caso, estamos hablando de los miembros del EPP que han generado dolor y muerte, y han utilizado a Argentina como un lugar de refugio.”
Sin embargo, Soares afirma que esto es mentira porque “aunque les saquen el refugio, no pueden enviarlas a Paraguay. La ley no lo permite, incluso el propio juez en su resolución explica claramente que aún quitándole el refugio tienen que permitirle la posibilidad de ir a un tercer país”
Para entender las implicancias y lo dicho por la Ministra, es necesario entender el origen del conflicto, que Soares resume para RedEco. “La situación del conflicto de Paraguay es la tierra y es un conflicto que lleva 150 años entre los grandes latifundistas y los campesinos”. Ese conflicto en los últimos años escaló y desde hace 20 o 30 años la violencia fue creciendo.
Hace alrededor de 20 años, de la juventud de un partido de izquierda que se llamó Partido Patria Libre (que fue duramente castigado con sus dirigentes presos muertos, desaparecidos) nació el Ejército del Pueblo Paraguayo, que se instaló en el norte del país y entabló un enfrentamiento armado con los grandes latifundistas y sus sicarios (o, como afirma Soares: “ellos les dicen sicarios pero son parapoliciales de la Policía y el Ejército paraguayo”).
Ese enfrentamiento está estrechamente vinculado a la aparición de los cultivos transgénicos, que provocó la ampliación de la frontera agropecuaria, generando desmontes de selvas y montes enteros y provocando la resistencia del campesinado. Las consecuencias de ese enfrentamiento son muertos.
Hace alrededor de 15 años se establece la ley antiterrorista y posteriormente interviene en ese enfrentamiento el Estado paraguayo que dicta el estado de sitio y militariza la región.
A partir de esa militarización empiezan, también, a realizar operaciones que “son de manual”, es decir, empiezan a golpear a los niños, a Carmen Villalba le matan a su hijito de 12 años, lo que los ejércitos hacen en las guerras contra “terroristas” o contra insurgentes.
Eso hace que muchas mujeres embarazadas, algunas de guerrilleros del Ejército del Pueblo Paraguayo, vengan a la Argentina. Algunas vienen, además, con susdondeestalichita hijos, en el caso de Lichita y Anita, las dos mellizas de Carmen Villalba, y varios niños de presos y de muertos que se instalan en Misiones.
Posteriormente el Estado paraguayo insiste en la represión, algunos niños que ya son adolescentes cruzan el río para ir a ver a sus padres. Se trataba de un grupo no beligerante, sin armas, todos niños acompañados por una mayor que se llama Laura Villalba y lo que sucede también es de manual.
El ejército paraguayo atacó el campamento, secuestró vivas a Lilian y María Carmen, de 11 años, nacidas en Argentina, las torturó y las mató. Relata Soares que el Ejército “dice que son guerrilleras de 25 a 30 años, pero todas las pericias dijeron que eran quienes se acreditó, no solamente la identidad, sino la nacionalidad de las niñas, no hay ni una sola hoja de expediente en relación a la muerte de esas niñas, y hacen desaparecer a Lichita.”
Se dispersa ese campamento, después la detienen a Laura Villalba y finalmente la Gremial de Abogados y abogadas rescata vivas a Tania, que tenía en ese momento 18 años y la melliza de Lichita, Anita. “Logramos traer después a toda la familia a Buenos Aires, 13, 14 niños con su abuela Mariana Villalba de 82 años, Miriam Villalba, María Rosa Villalba, que son hermanas de Carmen y de Laura, que están presas allá. Y tramitamos el refugio, el refugio se lo da el Estado paraguayo, la Conare, no se los da el Gobierno paraguayo, como dice Patricia Bullrich y como dice este gobierno.”
Y a partir del refugio, los chicos empiezan su vida acá y son escolarizados. Pero las mujeres fueron detenidas. La Cancillería argentina permitió que pasara una orden de detención, “cuando no debió haber permitido porque hay un refugio. El juez también ordenó la detención cuando no debió haberla permitido. A la Gremial de abogados le costó 5 horas lograr la libertad de todos, pero hoy están resguardadas Mariana, de 82 años, María Rosa, Miriam y Tania. Ellas salieron de sus lugares y están resguardadas y nosotros la Gremial de abogados tenemos a cargo judicialmente la tenencia y la guarda de 12 niños. Por supuesto que los niños van a la escuela, por supuesto que están bien alimentados, la responsable de eso es la Gremial de abogados y abogadas de Argentina. Nosotros tenemos a cargo esa guarda y todo esto que dice Patricia Bullrich es mentira, porque además tienen refugio. Aunque le saquen el refugio, no pueden enviarlas a Paraguay. La ley no lo permite, incluso el propio juez en su resolución, nosotros enviamos la resolución del juez a todo el mundo, explica claramente que aún quitándole el refugio tienen que permitirle la posibilidad de ir a un tercer país, así que esa es la situación en este momento”.