Los trabajadores de la planta de la multinacional de origen estadounidense John Deere ubicada en Granadero Baigorria, en el cordón industrial de Rosario, manifestaron su preocupación: “No podemos permitir que siga desvinculando gente de esta manera”. La estrategia patronal de despidos por goteo es para evitar un conflicto mayor. La empresa justifica estas decisiones en la fuerte caída en la demanda de sus productos.
El Sindicato de Operarios y Empleados de la Industria del Tractor (Soeit) denunció que hace semanas, la empresa productora de maquinaria agrícola ejecuta despidos a cuenta gotas y de manera constante, con muchos obreros que se encuentran en la puerta de ingreso de la planta de Baigorria con la noticia del despido.
En este contexto, y con las negociaciones por aumento salarial estancadas, iniciaron medidas de fuerza que consisten en el retiro de las y los trabajadores dos horas y media antes de cada turno.
Jorge, uno de los empleados afectados, declaró que “los despidos nunca cesaron, cada día nos enterábamos de algo”. Esta situación generó un ambiente de constante inseguridad entre los empleados, quienes denunciaron la falta de transparencia y comunicación por parte de la empresa, reportó Radio Universidad de Rosario.
Las y los trabajadores se manifestaron en las puertas de la planta para expresar su malestar. Allí, la emisora universitaria recabó testimonios el lunes pasado. Ana, una operaria con más de diez años en la empresa, afirmó que “las condiciones laborales fueron empeorando con el tiempo, y los despidos eran la consecuencia de esa degradación”. Según Ana, la incertidumbre se convirtió en la norma, y los rumores de despidos corrieron como pólvora por los pasillos de la fábrica.
Otro empleado, Carlos, quien trabajó en el área de mantenimiento, comentó que “nos decían que no había despidos programados, pero al día siguiente veíamos compañeros que ya no estaban”. Esta falta de información oficial por parte de John Deere creó un ambiente de miedo y desconfianza, que afectó no solo a los despedidos, sino también a los que seguían trabajando.
María, quien era parte del personal administrativo, relató que “hubo compañeros que fueron despedidos sin previo aviso, y eso generó mucha angustia”. Ella añadió que, aunque se habían acercado a los directivos en varias ocasiones, nunca obtuvieron respuestas claras sobre el futuro de sus empleos.
Crisis económica y recesión
Este proceso de ajuste en la planta de John Deere en Granadero Baigorria empezó hace meses, incluyendo la reducción de la planta laboral. Aunque la empresa alegó que estos cambios eran necesarios para enfrentar las fluctuaciones del mercado, los empleados denunciaron una falta de diálogo y explicaciones sobre los despidos que se realizaban.
Según el portal Motor Económico, la multinacional justifica estas decisiones en la crisis económica que atraviesa el país y la pronunciada baja en la demanda de sus productos. Si bien hay mejores números que el año pasado, se debe a que con la sequía de 2023 habían caído profundamente. En concreto, aducen que el plan económico de Javier Milei ha resultado en la disminución de la rentabilidad de la actividad.
El goteo constante de despidos no solo afectó a los trabajadores de la planta, sino también a la comunidad de Granadero Baigorria. Muchas familias vieron reducidos sus ingresos de manera drástica, y comercios locales reportaron una disminución en sus ventas. “Es una cadena que nos golpeó a todos”, expresó un comerciante local.