En su último informe, el Mirador de la Actualidad, el Trabajo y la Economía (Mate) analizó la evolución del salario real en el primer año de Milei.
Por Alvaro Torriglia.
En su primer año, la política económica de Javier Milei generó una transferencia directa de $ 19,2 billones desde el bolsillo de los asalariados al capital. Así lo calculó el Mirador de la Actualidad, el Trabajo y la Economía (Mate) en su informe de cierre de 2024. Un período en el que, lejos de ser incomodada, “la casta” vivió una fiesta a costa de la caída promedio del 12% en el poder de compra de los trabajadores registrados y del 25% en el caso de los jubilados.
“La alianza corporativa que hoy gobierna el país tiene un objetivo común: profundizar y consolidar una matriz distributiva lo más regresiva que se pueda”, destacó el equipo de economistas de Mate en un documento adjunto a su último reporte de coyuntura. A su juicio, en esta clave deben leerse “la devaluación de diciembre, el ajuste fiscal, el incremento de tarifas, la reforma laboral y la reforma jubilatoria”.
El informe recordó que, aunque la inflación está en descenso como consecuencia “del año completo que ya transcurrió con el dólar planchado y la caída de los precios internacionales de los alimentos”, la fuerte devaluación y disparada inflacionaria del principio del mandato sostiene el aumento interanual del IPC en el 166%. Es “el peor registro para cualquier año de mandato de cualquier presidencia post hiperinflación”.
Cuánto cayó el salario
Por eso, a pesar de la parcial recuperación del salario en el segundo trimestre, los trabajadores registrados perdieron en promedio 12% de su poder de compra en once meses. La caída fue mayor para los estatales (-22%) que para los privados (-7%). Expresado de otra manera, cada empleado privado dejó en el camino un promedio de $ 1.099.769 y, cada estatal, $ 3.314.736.
“La evolución del salario en lo que va del mandato de Milei generó una transferencia de $ 27,3 billones, de los cuales $ 19,2 billones salieron del bolsillo de los asalariados de forma directa, mientras que el Estado dejó de percibir $ 6 billones por aportes y contribuciones, las obras sociales perdieron $ 1,7 billones y los sindicatos, $ 377.000 millones”, detallaron los economistas del grupo que coordina Sergio Arelovich.
Uno de los mecanismos utilizados para inducir esta rebaja fue esmerilar el salario mínimo, vital y móvil. Este piso de ingresos está en su punto mínimo en más de 20 años. “En 2015, dos salarios mínimos permitían a una familia no ser pobre ya que la cobertura era del 50% de la Canasta Básica Total (CBT) pero actualmente esta cobertura a 22%”, subrayaron.
Jubilaciones en baja
No les fue mejor a las jubilaciones. El ajuste consolidó un nuevo nivel para los haberes entre un 20% y un 25% menor al de 2023. En promedio, cada jubilado perdió casi $ 2 millones en el primer año de Milei. En esta evolución incide el congelamiento del bono percibido por las jubilaciones mínimas.
El ajuste sobre los jubilados, de hecho, es el principal componente del ahorro fiscal, aportando $ 7,9 billones al total. “Como debía esperarse, el recorte del gasto recayó principalmente, en forma directa, sobre jubilados y jubiladas y sobre las personas que trabajan prestando cualquier tipo de servicio bajo la responsabilidad estatal, sea educación, administración, salud o seguridad”, analizó Mate.
La casta no paga
Y aclaró que, más allá del show electoral, no era esperable que fuera distinto. “El ajuste del gasto no podría nunca haberse concentrado en la supuesta casta a la que Milei dice despreciar; en primer lugar, porque esa casta integra el proyecto real de poder del presidente, pero, además, porque el gasto político del fisco es insignificante en relación con el conjunto de obligaciones sociales que tiene cualquier Estado”, señaló en su reporte.
Si en el plano fiscal predominó la ortodoxia, en materia financiera y cambiaria el “manual del buen libertario” permaneció cerrado. “El Banco Central no ardió en llamas y siguió funcionando y cumpliendo un rol muy activo en la gestión de la economía, también continuó vigente el régimen de control de cambios”, señalaron los economistas, para quienes “esta fragmentación entre el Milei personaje y el político, producto más de su instinto de supervivencia y de la intervención de terceros que de su experiencia personal o de su propia inteligencia, fue un factor relevante que permitió cursar un primer año de gestión sin problemas muy serios”.
Tensiones acumuladas
Sin embargo, las tensiones acumuladas en el frente cambiario, “atenúan el balance positivo” y permiten identificar a la actual estabilidad como “provisoria”. Es que el efecto de la devaluación de diciembre se agotó. “El BCRA se involucró en el mercado cambiario y destinó una gran cantidad de dólares para evitar el aumento de la cotización de los tipos de cambio paralelos, pero, a pesar del blanqueo, terminó el año con menos reservas que ocho meses atrás”, señaló el informe de Mate, en el que se destaca que “entraron más dólares por el blanqueo y por artilugios como el atraso en el pago de importaciones, que por los que se generaron por el saldo del comercio exterior”.
En cuanto a la actividad, luego de una fuerte caída, siguió el ritmo de la parcial recuperación salarial. Pero, concluye Mate, “la tendencia de mediano plazo es clara: la economía está en crisis a medida que la regresividad distributiva se profundiza”.