La empresa Nestlé anunció la paralización de su planta en Villa Nueva, Córdoba, debido a un exceso de stock y la baja en las ventas. La medida afectará a 200 trabajadores que tienen vacaciones forzadas y no saben si podrán reincorporarse al terminar. Desde el gremio de alimentación remarcaron que si la crisis llegó a una industria de artículos de subsistencia, es grave y que hoy unos 200 trabajadores temen por su futuro laboral y el 80% votó por la motosierra: “Durante la campaña hicimos hasta videos institucionales para mostrarle a la gente qué es lo que se venía”.
La empresa alimenticia Nestlé anunció el cierre temporal de su planta en Villa Nueva, Córdoba, durante el mes de marzo debido a un sobrestock de productos y una disminución en el consumo. Así lo confirmó Martín Páez, secretario general del gremio de la Alimentación seccional Villa María, en una entrevista con Radio 10.
“La gerencia nos avisó que la planta va a estar paralizada durante todo el mes de marzo porque están sobrestockeados de alimentos y no los pueden vender”, explicó Páez, detallando que la planta se dedica a la producción de leche en polvo en grandes cantidades. Además, el sindicalista señaló que el contexto económico afecta la competitividad de la empresa, que produce para exportación. “Hoy, con el tipo de cambio que hay, por ahí no les conviene exportar”, agregó.
La planta de Nestlé en Villa Nueva emplea a unos 200 trabajadores en una ciudad de aproximadamente 35.000 habitantes, lo que representa un impacto significativo en la economía local. Páez manifestó su preocupación por la situación: “Nosotros lo charlamos con la empresa, entendemos la situación por el contexto económico y social que está atravesando el país, pero parece que la variable de ajuste siempre son los trabajadores”.
En cuanto a la crisis económica general, el dirigente destacó que las dificultades ya están alcanzando a las industrias alimenticias, un sector que suele ser menos vulnerable a las crisis. “Dentro de la cadena, el ser humano necesita consumir alimentos para subsistir, a lo último que le puede llegar el impacto de esta crisis es a las empresas alimenticias, y ya les está llegando. Imaginate el resto de los rubros”, advirtió.
Por otro lado, al ser consultado sobre el apoyo político dentro de la planta, Páez reveló que “el 80% de los trabajadores votó a Milei” en las últimas elecciones presidenciales. En este sentido, el gremio había intentado en 2023 concienciar a los empleados sobre las posibles consecuencias de las políticas económicas en discusión. “Durante la campaña hicimos hasta videos institucionales para mostrarle a la gente qué es lo que se venía”, recordó.
El cierre temporal de la planta de Nestlé es un reflejo del complejo panorama económico que atraviesa el país, con un descenso en el consumo y dificultades para la exportación que afectan incluso a sectores históricamente resilientes como el alimenticio.