Un áspero y brusco inicio de año padecieron 80 familias la madrugada del jueves 2 de enero en el barrio Río Luján del distrito de Pilar. Por el crudo relato de una vecina sabemos que sin ningún tipo de notificación fueron desalojadas de forma violenta e ilegal alrededor de 266 personas y quedaron en situación de calle en cercanías del predio que habitaban. Desde esa fecha, con organización y mediante asambleas, vecinas y vecinos lograron denunciar el hecho y movilizarse tanto al Municipio como a la Fiscalía Nº 2, sin tener aun una respuesta. Este martes 14 de enero, desde las 11, realizarán una nueva movilización a dicha Fiscalía, ubicada en Tucumán 501 de ese distrito al norte del conurbano bonaerense.
Todavía no se terminaba de acomodar el nuevo año cuando en el barrio Río Luján en Pilar, provincia de Buenos Aires, más de 600 efectivos de distintas fuerzas acometieron contra decenas de familias, en su mayoría mujeres, niñas y niños. Integrantes de la Policía bonaerense del GAD, Infantería, DDI Morón, UTOI, GEO, PDA, GAP, Policía Ecológica, Guardia Urbana, Policía Municipal, Caballería, Policía Digital, bomberos de Morón y San Isidro y guardia civil del barrio llevaron a cabo un “violento e ilegal” desalojo, según los testimonios, con el uso de topadoras para derrumbar las casillas.
Luna, una de las vecinas damnificadas en este hecho, nos relata cómo vivió esa tremenda situación. “El desalojo se produjo el día 2 de enero. Arrancó más o menos a las 5 de la mañana el operativo, a las 7 empezaron a llamar en las casas y empezar a desalojar a la gente. En mi caso, estaba con mis hijos durmiendo y me llamó la policía que teníamos que desalojar la casa. No entendía nada y bueno, le pedí la orden porque nunca había llegado la notificación. O sea, no me mostraron ni la orden del juez, ni me mostraban tampoco nada para ver que era legal. Igual que a todos los vecinos nunca nos mostraron la orden. Y tampoco nunca nos notificaron, como dice la ley que tiene que ser notificado. Bueno, la cuestión es que nos dejaron sacar muy pocas cosas rápidamente y con las topadoras, les decían que tenían que tirar todo abajo. Me tiraron la casa abajo a mí y a toda la gente. Tengo cuatro chicos, todos menores, y bueno, quedamos en la calle, 80 familias, alrededor de 266 personas, con menores todos. Y el municipio, ni Desarrollo Social, ni Niñez, nadie se hizo presente para ver cómo estábamos las familias desalojadas. Ni para darnos una explicación ni para darnos una solución de cómo íbamos a seguir.”
Desde la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) Zona Norte refieren que el predio donde ocurrió el desalojo se extiende por la calle Directorio del Barrio Río Luján, que delimita sectores reconocidos en el Registro Nacional de Barrios Populares (ReNaBaP) y los vecinos en su primer comunicado afirman que hay familias que están anotadas en ese Registro, además de que los terrenos “se encontraban desocupados” y ellos mismos “los limpiaron, los reacondicionaron, protegiendo los árboles y construyeron allí sus viviendas”.
Luego de la brutalidad sufrida, las y los vecinos se organizaron y recibieron el apoyo de activistas feministas, organizaciones sociales, partidos de izquierda y la APDH. Luna comenta las primeras acciones que llevaron adelante después de las asambleas. “Hicimos una manifestación en la Fiscalía N°2 y también fuimos al municipio pero no nos abrieron, nos cerraron todas las puertas y no nos dejaban ingresar. El intendente (Federico Achával) nunca salió, nunca se hizo presente, nunca se hizo cargo de nada. También habían dicho en los medios, se había viralizado que habían reubicado a las familias y es mentira porque estamos todos en la calle”.
Luna denuncia que para la difusión de las actividades, como la marcha realizada el lunes 6 de enero, “había muchas amenazas porque (el medio) Crónica iba a venir y después llamaron y dijeron que no podían venir porque no los dejaba la municipalidad, el intendente. Acá detrás de todo esto hay mucha plata, todo un negocio.”
Como continúan en la calle, justamente, es que también han organizado ollas populares y piden la solidaridad de la comunidad con cualquier tipo de donación como alimentos no perecederos, frutas, verduras, agua potable. También reciben carpas, colchones, sábanas, frazadas, repelentes para mosquitos, protector solar, insumos para higiene personal, limpieza y bolsas de residuos. Los contactos para las donaciones o transferencias están en las placas para redes sociales que difundimos.
En su lucha por recuperar un sitio donde vivir, este martes 14 de enero a partir de las 11 las familias se movilizarán nuevamente a la esquina de Tucumán e Ituzaingó, donde se encuentra la Fiscalía Nº 2, en búsqueda de respuestas por el derecho al acceso a la vivienda y a la tierra.