El pueblo de Bielorrusia votó a favor de la paz al elegir el pasado 26 de enero, con el 86 % de los votos a Alexander Lukashenko para un nuevo mandato presidencial.
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Por Mario Hernandez.
El Gobierno de Minsk había sido sometido desde meses antes a una fuerte y constante campaña de difamación, falsas noticias, presiones económicas y políticas por parte de los gobiernos y medios hegemónicos de comunicación occidentales dirigidos desde Estados Unidos y de la Unión Europea para tratar de desestabilizar a esa nación de Europa Oriental.
Ya en agosto de 2020 Lukashenko ganó las elecciones generales con el 80 % de los votos mientras su contrincante la derechista Svetlana Tijanóvskaya obtenía solo el 10 % e inmediatamente los opositores salieron a las calles a destruir instituciones estatales, lugares públicos alentados por llamados de insurrección a través de las redes sociales.
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Días antes de las elecciones del 26 de enero, la ya acostumbrada injerencia de la Unión Europea no se hizo esperar y aprobó en el Parlamento Europeo una resolución que llamaba a no reconocer los comicios en Bielorrusia y pedía a los integrantes del bloque y a sus socios internacionales ampliar sanciones contra funcionarios y entidades bielorrusas.
Esas directrices a la UE se las enviaban desde Washington mediante declaraciones públicas como la del portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller que afirmó: «las presidenciales de 2025 no pueden reflejar la voluntad del pueblo bielorruso». Mientras, el saliente secretario de Estado, Antony Blinken, señalaba: «los comicios no pueden ser libres ni justos en el país eslavo».
Por informaciones filtradas, se conocía que Estados Unidos y la Unión Europea estaban preparando una operación contra Minsk parecida a la del Maidán en Ucrania que dio al traste con el Gobierno legítimo de esa nación y ha provocado una sangrienta guerra contra Rusia apoyada y financiada por la OTAN para tratar de desestabilizar a Moscú.
En 2019 y principios de 2020 Estados Unidos gastó más de 20 millones para fomentar las protestas a través de varias ONGs. Ese dinero se usó en crear una red de blogueros independientes además de cuentas de información en las redes sociales, y las personas más prometedoras recibieron formación en el extranjero sobre todo en Polonia, Lituania y Ucrania donde los instruyeron expertos estadounidenses.
En los años siguientes, la candidata derrotada en 2019, Svetlana, continuó sus proyectos para desestabilizar el Gobierno bielorruso, participó en los Foros Económicos de Davos, en el Foro Internacional para la Democracia en Estrasburgo donde discutieron sobre el futuro de Biolorrusia sin invitar a las autoridades de esa nación.
Ella estuvo en un encuentro organizado en Vilma por el Departamento de Estado norteamericano donde hablaron de la supuesta democracia, de qué hacer con ese país cuya dirigencia no sigue las políticas de Estados Unidos.
Fueron las mismas acciones que realizaron las fuerzas de derecha contra Ucrania en 2014, conocidas como el Maidán las que concluyeron con el derrocamiento del Gobierno de Víktor Yanukovich.
También en Georgia hubo cuatro intentos fallidos de desestabilizar al Gobierno en los últimos tres años; en Serbia entregaron 436 millones de dólares con los mismos objetivos y en Eslovenia han atentado contra el presidente Robert Fico para eliminarlo del poder.
En esta ocasión la guerra estaba avisada y tanto el Gobierno como el pueblo bielorruso, casi en pleno, supieron defender la soberanía, independencia y la paz de las amenazas y provocaciones de Occidente.
La afluencia a las urnas en presidenciales bielorrusas constituyó el 85,70 %
La afluencia a las urnas en las elecciones del presidente de Belarús constituyó el 85,70 %. Tales datos los anunció en el Centro de Información el presidente de la CEC, Ígor Karpenko, informa BelTA.
En la provincia de Brest votó el 90,56 % de los ciudadanos, en la provincia de Vítebsk el 86,39 %, en la provincia de Gómel el 91,54 %, en la de Grodno el 89,28 %, en la provincia de Minsk el 86,71 %, en la provincia de Moguiliov el 92,64 %, en la ciudad de Minsk el 69,72 %.
Denuncias opositoras
Los opositores más importantes han huido al extranjero o han sido encarcelados. El país tiene casi 1.300 prisioneros políticos, incluido el ganador del Nobel de la Paz, Ales Bialiatski, fundador del Centro de Derechos Humanos Viasna.
Desde julio, Lukashenko ha indultado a más de 250 personas descritas como prisioneros políticos por activistas. Al mismo tiempo, sin embargo, las autoridades han intentado erradicar la disidencia arrestando a cientos de personas en redadas contra familiares y amigos de prisioneros políticos y cualquier persona que participe en actividades en línea organizadas por bloques de apartamentos en varias ciudades.
Las autoridades detuvieron a 188 personas sólo el mes pasado, dijo Viasna. Activistas y quienes donaron dinero a grupos de oposición han sido citados por la policía y obligados a firmar papeles diciendo que se les había advertido que no participaran en manifestaciones no autorizadas, dijeron defensores de derechos.
Los cuatro rivales de Lukashenko en las urnas son leales a él y han elogiado su gobierno.
“Entro en la carrera no contra, sino junto con Lukashenko, y estoy listo para servir como su vanguardia”, dijo el candidato del Partido Comunista, Sergei Syrankov, partidario de penalizar las actividades LGBTQ+ y reconstruir monumentos al líder soviético Josef Stalin.
El candidato Alexander Khizhnyak, jefe del Partido Republicano del Trabajo y la Justicia, fue el más votado en un distrito electoral en Minsk en 2020 y juró prevenir “una repetición de los disturbios”.
Oleg Gaidukevich, jefe del Partido Liberal Democrático, apoyó a Lukashenko en 2020 e instó a los otros candidatos a “hacer que los enemigos de Lukashenko sientan náuseas”.
La cuarta candidata, Hanna Kanapatskaya, en realidad obtuvo el 1,7% de los votos en 2020 y dice que es la “única alternativa democrática a Lukashenko”. Ha prometido abogar por la liberación de prisioneros políticos, pero advierte a sus seguidores contra “iniciativas excesivas”.
La líder de la oposición en el exilio, Svetlana Tijanóvskaya, quien huyó de Bielorrusia bajo presión gubernamental después de desafiar al presidente en 2020, dijo a The Associated Press que la elección del domingo fue “una farsa sin sentido, un ritual de Lukashenko”.
Los votantes deberían tachar todos los nombres en la boleta, dijo, y los líderes mundiales no deberían reconocer el resultado de un país “donde todos los medios de comunicación independientes y los partidos de oposición han sido destruidos y las cárceles están llenas de prisioneros políticos”.
“Las represiones se han vuelto aún más brutales a medida que se acercaba esta votación sin elección, pero Lukashenko actúa como si cientos de miles de personas aún estuvieran de pie ante su palacio”, dijo.
La organización de defensa de la libertad de prensa Reporteros Sin Fronteras presentó una denuncia contra Lukashenko ante la Corte Penal Internacional por su represión de la libertad de expresión, que ha supuesto la detención de 397 periodistas desde 2020. Dijo que 43 están en prisión.
Según la Comisión Electoral Central, hay 6,8 millones de posibles votantes. Sin embargo, aproximadamente 500.000 personas han dejado Bielorrusia y no pueden votar.
En casa, la votación anticipada ha creado un terreno fértil para irregularidades, ya que las urnas estarán desprotegidas hasta el último día de la elección, dijo la oposición. Más del 27% de los votantes emitieron su voto en tres días de votación anticipada, dijeron funcionarios.
Los puestos de votación han eliminado las cortinas que cubren las urnas y se prohíbe a los votantes fotografiar sus boletas, en respuesta a la iniciativa opositora de 2020 de que los votantes tomaran esas fotos para dificultar que las autoridades manipulasen la votación.
La policía ha realizado grandes simulacros antes de la elección. Un video del ministerio del Interior mostró a policías antidisturbios con cascos golpeando sus escudos con porras como forma de prepararse para dispersar una protesta. Otro mostró a un agente arrestando a un hombre en el papel de votante, torciéndole el brazo junto a una urna.
En un principio, Bielorrusia se negó a permitir observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, que había monitoreado elecciones anteriores. Cambió de opinión este mes e invitó a la OSCE, cuando ya era demasiado tarde para organizar una misión de observadores.
La dependencia de Rusia
El apoyo de Lukashenko a la guerra en Ucrania ha roto los lazos de Bielorrusia con Estados Unidos y la Unión Europea, poniendo fin a su juego de utilizar a Occidente para tratar de obtener más subsidios del Kremlin.
“Hasta 2020, Lukashenko podía maniobrar y jugar a Rusia contra Occidente, pero ahora, cuando la situación de Bielorrusia se acerca a la de un satélite de Rusia, esta elección al estilo de Corea del Norte ata al líder bielorruso al Kremlin aún más fuerte, acortando la correa”, dijo Artyom Shraybman, un experto en Bielorrusia del Centro Carnegie para Rusia y Eurasia.
Después de la votación, Lukashenko podría tratar de aliviar su dependencia total de Rusia buscando un nuevo acercamiento a Occidente, predijo.
“El objetivo intermedio de Lukashenko es utilizar la votación para confirmar su legitimidad y tratar de superar su aislamiento para al menos iniciar una conversación con Occidente sobre aliviar las sanciones”, dijo Shraybman.
Nines Maestro: “Una UE fascistizada se atreve a poner en cuestión las elecciones bielorrusas”
CONRADO UGARTE / ÁNGELES MAESTRO*
El domingo 26 de enero se llevaron adelante las elecciones presidenciales en Bielorrusia, donde alrededor de 6,9 millones de ciudadanos bielorrusos ejercieron su derecho a voto en más de 5.300 colegios electorales. Los candidatos presidenciales, donde venció el actual presidente Aleksánder Lukashenko con el 86,82%.
Las elecciones se han dado en un clima de tensión provocado, entre otros actores, por la Unión Europea. Que señaló desde Bruselas, que no reconocería dichas elecciones si las ganaba quien las ha ganado: Lukashenko. En este sentido, el presidente electo y actual presidente de Bielorrusia, fue tajante en su contestación a los funcionales a EE UU de la UE.
“A Minsk no le preocupa si Occidente no reconoce los resultados de las elecciones, Bielorrusia celebra el sufragio para su pueblo. La resolución del Parlamento Europeo sobre los comicios en Bielorrusia fue un “garabateo apresurado” y una manifestación de “humillación servil” ante Washington de la que los autores del documento deberían avergonzarse, enfatizó Lukashenko.
Bielorrusia está dispuesta a entablar un diálogo con la UE, incluso con aquellos países que han adoptado políticas agresivas contra Minsk. En este sentido, el presidente bielorruso agregó, que la llegada de Donald Trump al poder en EE UU presagia problemas no para Bielorrusia, sino para Europa.
En este contexto injerencista y desestabilizador por parte de los cipayos del imperialismo yanky, un nutrido grupo de veedores internacionales recorrieron los 5.300 colegios electorales para corroborar y dar cuenta del buen curso que tuvieron las elecciones bielorrusas. Entre ellos se encontraba la veedora independiente española Ángeles “Nines” Maestro. Que en un encuentro con la prensa internacional dijo sentirse avergonzada de la Resolución del Parlamento Europeo que llamó a no reconocer los resultados de las elecciones presidenciales en Bielorrusia
“Me avergüenzo de esta decisión del Parlamento Europeo. Evidencia una actitud parcial hacia las elecciones en Bielorrusia. Es evidente que para la Unión Europea sólo son correctos los candidatos que les convienen. Los ejemplos de ello son Moldavia, Rumanía, Georgia, Eslovaquia. Esta política es una farsa y no una democracia”.
Desde el medio alternativo Red de Comunicación Popular – REDCOM hemos querido tener la palabra de “Nines” Maestro para que nos profundice, más allá de las elecciones, sobre el contexto geopolítico, estratégico, social y económico en que se han dado dichas elecciones. Pero, además, bucear en la historia del Pueblo bielorruso.
En cuanto a las elecciones en sí, Maestro, luego de visitar los colegios electorales de Minsk, vio que “todo estuvo bien, todo ha sido muy tranquilo”. En diálogo con REDCOM destacó que muchos jóvenes han ido a votar, “la juventud es muy activa”. Esto es una gran diferencia con respecto a España, donde casi el 40% de los votantes no participan en la votación. Sobre todo, nuestros jóvenes, muy poca gente vota, señaló “Nines” Maestro.
Muchos políticos en España tienen las mismas opiniones sobre la crisis de Ucrania y la posición del país en la OTAN. Grandes sumas del presupuesto estatal se destinan a financiar el sector de armas, no el social. El resultado es una crisis energética, un aumento de los precios de los alimentos y de la vivienda, añadió Ángeles Maestro.
Entrevista
Conrado Ugarte: – Si bien se han llevado adelante las elecciones presidenciales en Bielorrusia donde ha vuelto a ganar Lukashenko, ¿cuál es el contexto en el cual se han dado estas elecciones? ¿Cuál es tu análisis desde un punto de vista histórico, geopolítico, geoestratégico o social? ¿Cómo es tratada Bielorrusia, teniendo en cuenta la agresividad de la Unión Europea, que no reconocerá las elecciones?
Nines Maestro: – Bielorrusia es un país de casi 11 millones de habitantes, está al Occidente de Rusia y era la República más occidental de la URSS. Por allí entró Hitler, es decir, la Alemania nazi comenzó el ataque a la URSS por la ciudad de Brest. Esto es muy importante tenerlo en cuenta. Bielorrusia, dentro del plan de exterminio nazi, debía ser el espacio vital para Alemania. Su plan era exterminar a la mayor parte de la población y a la otra dejarla para el trabajo esclavo, y repoblarla con alemanes. Las matanzas han sido terribles, hay una película rusa que recomiendo ver, relativamente reciente, que trata precisamente sobre Bielorrusia en la época de la Unión Soviética, y se llama “Ven y mira”. Relata cómo un pueblo detrás de otro, una ciudad tras otra, los nazis agrupaban a la población en el edificio más grande del pueblo o de la ciudad y le prendían fuego. Es decir, mataban, asesinaban a sangre fría un día tras otro y tras otro a, sobre todo, población civil. Así, Bielorrusia perdió a más de un tercio de su población. Es decir, más de tres millones de personas, que en aquel tiempo tenía unos 9 millones de habitantes, cayeron asesinados por los nazis. Claro, los bielorrusos se defendieron y la población más joven, que estaban en mejores condiciones, organizó una poderosísima resistencia que agrupó al mayor contingente de milicias de toda Europa. 370.000 personas se organizaron en los bosques. Por cierto, perfectamente coordinado con el Ejército Rojo, esto es muy importante subrayarlo. Había una coordinación en Moscú que hacía que las acciones de unos y otros se complementarán de tal forma que, con sabotajes sobre todo a las vías férreas para obstaculizar el envío de armas y logística, lograron contener a las fuerzas nazis. Fíjate, Bielorrusia fue totalmente ocupada por los nazis en 1941 y en 1943 la Resistencia controlaba más de la mitad del territorio. Un símbolo de ello es que en Minsk la guerrilla urbana logró eliminar al jefe nazi de toda Bielorrusia que estaba asentado en la capital.
Memoria histórica
Es decir, el bielorruso es un pueblo que tiene clarísima la memoria histórica. Porque claro, no solamente eran alemanes, eran los nazis ucranianos, los nazis bielorrusos, los que apoyaban y guiaban a los alemanes para exterminar a su pueblo. Así que, la memoria antifascista de Bielorrusia está a flor de piel, está viva en cada familia y por eso han sido capaces de entender tan perfectamente lo que está sucediendo en Ucrania. Porque los que están siendo utilizados por el brazo que arma la OTAN contra Rusia desde Ucrania es la carne del pueblo ucranianos, está dirigido fundamentalmente por organizaciones fascistas directas herederas de los fascistas ucranianos, que fueron colaboradores importantísimos y necesarios para el Régimen nazi de Hitler.
Las políticas del FMI
Esta situación, bueno, pasaron los años y cuando el hundimiento de la Unión Soviética, Lukashenko había sido elegido recién presidente, tras un escándalo de corrupción muy importante del presidente anterior, Stanislav Shushkévich. Y cuando pudo comprobar cómo la sociedad rusa colapsaba por el cierre, las privatizaciones de Fábricas, con las Fábricas, se hundían las pensiones, las escuelas, en torno a cada fábrica se hundía todo el espacio social que sostenía la población. El desastre fue total. Se disparó el número de suicidios, de la mortalidad en general.
Tendencias de las tasas de mortalidad por tuberculosis en los países europeos pos URSS | Programas del Fondo Monetario Internacional | La gráfica representa las consecuencias de las políticas del FMI sobre la mortalidad por tuberculosis en los países de la ex URSS.
Hay una gráfica donde se demuestra cómo la mortalidad por tuberculosis se dispara en Rusia y en el resto de los países de la ex Unión Soviética que siguen las políticas del Fondo Monetario Internacional (FMI) y, en Bielorrusia, Lukashenko y su pueblo, decidieron que a ellos no les iba a pasar lo de Rusia. Entonces, paralizaron las privatizaciones, revirtieron las privatizaciones que ya se habían realizado, y la gráfica muestra también, que la baja en los índices de tuberculosis corresponde a aquellos que NO SIGUEN las directrices del FMI. El único país que no siguió las políticas del FMI es Bielorusia.
En manos Públicas
Bielorrusia tiene los medios de producción en manos públicas, es el mayor fabricante, por ejemplo, de tractores de Europa, fabrica automóviles, tiene energía atómica, gas y petróleo ruso que recibe a bajo precio, tiene una industria agrícola y ganadera muy importante, tiene industria textil, etc. Pero lo que quería señalar es que están en manos públicas las fábricas, la energía, los medios de comunicación, el transporte, la educación, la cultura, la sanidad, es decir, los recursos fundamentales. Hay bares privados, hay pequeñas tiendas privadas, hay algún centro comercial, pero lo que son los recursos fundamentales del país están en manos públicas.
Relaciones sociales
Y claro, no es solamente la economía, el comercio, son las relaciones sociales. Es un pueblo generoso, Solidario, tranquilo, inteligente, por ejemplo, los bielorrusos son una de las poblaciones más destacadas en informática. Es decir, hay un cúmulo de inteligencia en física, en química. La población Bielorrusia es una población con una formación académica muy alta y muy inteligente como pueblo.
Intento de chantaje del FMI
Finalmente quería señalar otro contexto que me parece importante, y es cuando ocurrió la pandemia del Covid. En aquel momento, el FMI vino aquí, a Minsk, con una delegación a ofrecer un préstamo en muy buenas condiciones. Una cantidad importante, a cambio de que Bielorrusia hiciera lo que no había hecho. Y era, declarar la pandemia como todos los países europeos, Latinoamericanos, etc. Declarar pandemia quería decir cerrar la producción, cerrar las actividades sociales, la educación, la Universidad, las escuelas, confinar a la población, imponer vacuna científica obligatoria, imponer mascarillas, etc. Nada de eso se había hecho en Bielorrusia. Evidentemente todo era un chantaje. Porque en la pandemia el objetivo era que nadie se saliera del orden impuesto por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y por los centros de poder económicos de la industria Farmacéutica. Lukashenko dijo que no, que muchas gracias, que ese préstamo no era necesario para Bielorrusia y que no había a hacer ninguna de esas cosas. Bielorrusia continuó su vida normal, se puso la vacuna Sputnik a aquellos que quisieron ponérsela. Se pusieron mascarillas los que querían, y la vida continuó. Los cines, los teatros, los conciertos, todo. La producción, el trabajo, la Universidad, y el resultado fue -claro nadie habla de eso-, que Bielorrusia tuvo el exceso de mortalidad que tienen los países con una epidemia de gripe, o elevada mortalidad entre personas muy mayores, y las personas más vulnerables. Es decir, tuvo una epidemia de gripe normal y corriente y, lo que es importantísimo, su economía de ninguna manera se vio afectada. No disminuyó.
Entonces, bueno, esto es para poner un poco en contexto qué tipo de país, qué tipo de independencia, de soberanía y de conciencia tiene el Pueblo bielorruso con respecto a sí mismo y con respecto a lo que está sucediendo en los alrededores.
C.U.: – Los medios concentrados del Occidente colectivo han salido a decir en coro que las elecciones en Bielorrusia son una farsa y la Unión Europea no reconocerá las elecciones en Bielorrusia si gana Lukashenko. ¿Qué tienes para decir de estas posiciones para nada Democráticas? ¿Cuál es tu análisis al respecto?
N.M.: – Con respecto a la Unión Europea (UE) hay que decir que es una VERGÜENZA. Hace mucho que el Parlamento Europeo, que las élites europeas representan lo que es un camino del capitalismo en crisis hacia el fascismo. Eso es lo que están representando. Un robo desmesurado de los recursos públicos después de haber aceptado, como buenos vasallos de EE UU, el hundimiento de su economía, la voladura de los gasoductos Nord Stream, las sanciones contra Bielorrusia, Rusia y China, que han repercutido como un bumerán en los propios países de la UE, unas políticas verdes que lo único que tenían por objetivo es dejar a la Pequeña y Mediana empresa fuera de juego porque la llamada transición ecológica se financia con los Fondos europeos que han llegado, finalmente, a las Multinacionales. Entonces, esa UE, que además está quitándose la máscara de democracia a velocidades de vértigo, que monta revoluciones de colores o maidanes cuando ganan en las elecciones de cada país los candidatos que no corresponden a sus intereses, como ha sucedido en Moldavia, en Georgia, en Rumanía, y han llegado a su mayor expresión en Eslovaquia con el intento de magnicidio del Primer Ministro Robert Fico. Un Primer Ministro que ya había sido detenido y encarcelado cuando era Diputado y no había ganado las elecciones, porque había denunciado la farsa de la pandemia del Covid y el crimen de las vacunas, fue metido en la cárcel. Y ahora, el intento de asesinato estaba relacionado con su voluntad de investigar la pandemia y con su decisión de no enviar armas ni apoyar en la UE el envío de armas a Ucrania.
Es decir, una Unión Europea con tintes más subidos de fascismo, es la que se atreve a poner en cuestión unas elecciones que yo ratificó porque he visitado un montón de colegios electorales y que han sido unas elecciones en las cuales los 5 candidatos lo son, porque han conseguido reunir más de 100.000 firmas, que para una población de once millones de habitantes es bastante. Que la gente es muy consciente de lo que se juegan en estas elecciones con una guerra de la OTAN en sus fronteras, y que, independientemente de a quién han votado, la unidad del Pueblo bielorruso en torno a su soberanía y a su independencia es muy fuerte y estuvo presentes en las conversaciones que he podido tener con la gente más diversa.
Finalmente, quiero señalar la participación de la juventud. Esto sí que es un dato, que al menos en el estado español, circula exactamente en dirección contraria. Bueno, la juventud y el resto. Porque la decepción cada vez es más grande, porque la gente comprueba que independientemente que sean hombres o mujeres, rubios o morenos, jóvenes o viejos, obedecen a las mismas políticas con respecto a la OTAN, con respecto al envío de armas a los fascistas de Ucrania. Y con respecto a lo que es otra dimensión de la fascistización de la Unión Europea y es el desmesurado y creciente gasto público en la industria armamentística. Entonces, que la UE decadente y corrupta arrodillada ante el imperialismo de EE UU se atreva a poner en cuestión la democracia de un país que obviamente no va a tolerar que le monten un Maidán, y hace muy bien. Hace muy bien en defender su independencia con respecto a quienes, hayan nacido donde hayan nacido, representan los intereses de potencias imperialistas extranjeras.
C.U.: – En toda tu exposición hay un hilo conductor: el fascismo, el nazismo, y lo quería destacar, porque ha venido a trastocar a toda la UE y a muchos de los países que se auto etiquetaban como “revolucionarios” o al menos “socialistas”. ¿Cuál es el motivo de este espacio ganado por organizaciones o partidos políticos nazi-fascistas? En este sentido, ¿cuál ha sido el rol de las izquierdas mientras se fue dando esta instalación del extremismo de derecha tanto sea en España, Francia, Italia, Austria o Alemania? ¿Qué ocurre con las juventudes, fundamentalmente la española, en este contexto fascistizado de las sociedades?
N.M.: – Buen señalamiento. Lo del Fascismo es muy importante. Mira, en la película “Novecento” Olmo decía: “Los fascistas no salen como las setas en otoño”. A los fascistas los planta el capital, los organiza, los arma. Es decir, el Fascismo es “la solución” de la burguesía en tiempos de crisis, donde las máscaras se caen. Lo que más teme el capital en el mundo es una Revolución. Las revoluciones no se las inventan los revolucionarios. Las Revoluciones surgen cuando la gente no puede vivir. Claro, porque la crisis viene también con la guerra. Es decir, el capital en crisis busca ocupar países, las materias primas, busca la economía de guerra, la financiación con dinero público de la industria armamentística como está pasando en España. Es decir, el Fascismo también llega cuando la social democracia lo engendra, lo pare, crea las condiciones para que surja. La social democracia alemana asesino a Rosa Luxemburgo. La social democracia en Europa está generando expectativas de solución, que luego son falsas. Es la que hace posible que los pueblos vayan engañados, por supuesto, detrás de la palabrería de Milei, de los fascistas, que aparentemente son muy radicales, aparentemente van en contra del capital -no olvidemos que el Fascismo es el nacionalsocialismo, es decir, una bandera que la clase obrera cree que les va a solucionar los problemas.
Efectivamente la social democracia actúa como una especie de espejismo, de anzuelo falso para los pueblos. La única solución es la Revolución. Más que nunca, más que nunca. Porque, efectivamente, los pueblos hacen la Revolución.
Pero, es muy importante, que cuando surge de manera espontánea o no, haya una dirección política que conduzca esa revuelta hacia la victoria. Es la experiencia de la Comuna de París. Efectivamente una revuelta tiene que tomar decisiones con respecto al aparato del Estado, con respecto a la victoria, a la victoria militar sobre la burguesía. Es decir, esto no es un juego, no es un juego de salón, esta es una situación a vida o muerte entre unos y otros. Es, ellos o nosotros.
En situaciones de crisis de un capitalismo terminal, como es este, hay que prepararse para ser más fuerte que el enemigo. No hay otra solución. Entonces, la tarea ahora es preparar a la clase trabajadora no para una manifestación, preparar al conjunto del pueblo para la victoria y la victoria es la destrucción del capitalismo. Por eso la palabra socialismo o barbarie, ahora, tiene toda la dimensión de lo que decía Rosa Luxemburgo, la podemos entender ahora.
*Ángeles “Nines” Maestro, es médica, técnico superior de Salud Pública, licenciada en Medicina y Cirugía por la UAM. Fue diputada en el Congreso de los Diputados y candidata al Parlamento Europeo en la lista de Iniciativa Internacionalista. Fue miembro de Tribunales de Conciencia para juzgar al imperialismo y al sionismo por Crímenes contra la Humanidad en Yugoslavia, Iraq y Líbano. Militante del Partido Comunista de España (PCE), fue una de las fundadoras de IU. Actualmente es militante de la Coordinación de Núcleos Comunistas.
Fuentes: Rebelión, BelTA, La Haine