El miércoles por la noche en la cancha de Lanús se disputó el partido entre River Plate y Godoy Cruz, por la Copa Argentina. Durante el ingreso al estadio, la Policía Bonaerense reprimió a los hinchas de River. Debido a la enorme cantidad de público que tenía entradas para ingresar a la cancha, los efectivos permitían pasar a los hinchas a cuentagotas, lo que generó malestar, reclamos y empujones. La respuesta policial fue reprimir. Gases, palos y balas de goma, que dejaron decenas de personas heridas. Una postal que se repite en las canchas argentinas.
El miércoles por la noche en la cancha de Lanús se disputó el partido entre River Plate y Godoy Cruz, por la Copa Argentina. Cuando el público de River ingresaba al estadio la Policía Bonaerense los reprimió. Debido a la enorme cantidad de público que tenía entradas para ingresar a la cancha, los efectivos permitían el paso a cuentagotas, lo que generó malestar, reclamos y empujones. Enseguida la policía comenzó a reprimir, utilizando gases, palos y balas de goma. Algunos hinchas comentaban que la policía montada les tiraba los caballos encima. En las imágenes televisivas se mostró una avalancha de hinchas que cayó al piso y un padre sacando en hombros a su pequeño hijo que lloraba, en medio de la violencia desatada por las fuerzas represivas.
La represión injustificada, de la Policía Bonaerense dirigida por la APREVIDE (siglas de “Agencia de Prevención de la Violencia”) que comanda Juan Manuel Lugones, dejó como resultado 51 hinchas detenidos y varios heridos. Debido a las agresiones sufridas, algunos hinchas debieron ser hospitalizados, como fue el caso de Gonzalo Maidana, primo del ex defensor de River Jonatan Maidana, que recibió un disparo de bala de goma en una rodilla.
«La represión fue una locura. Tiraron balazos de goma para todos lados y no estábamos haciendo nada«, expresó Emiliano Fernández hincha de River, quien tenía en la mano su entrada. «Soy un hincha común, no tengo nada que ver con la barra de River. Pagué 550 pesos la popular y solo quería alentar a River como siempre, junto a mis amigos«, agregó.
«Repudiamos la represión policial durante el ingreso de les hinchas de River a la cancha de Lanús. La violencia y la desidia por parte de las fuerzas y los funcionarios demuestra, una vez más, que no están para garantizar nuestra seguridad, si no para afirmar su abuso de poder», expresó la agrupación River Feminista, luego de los incidentes.
Por su parte, la agrupación Boca Antifascista expresó su solidaridad con los hinchas de River y publicó en redes sociales: «necesitamos clubes que defiendan a sus hinchas del abuso policial, que no promuevan ni creen las condiciones para la reventa, que corten de raíz con el negociado de las barras bravas y de los ‘operativos de seguridad’. Necesitamos luchar por clubes de lxs trabajadorxs.»
Así es que bajo la supervisión directa de la policía sucede la reventa de entradas, la coima a puesteros y vendedores ambulantes, la venta de droga y alcohol, las zonas liberadas y fundamentalmente la represión. pic.twitter.com/amEP8VVVBL
— Boca Antifascista (@BocaAntifa) September 19, 2019
La represión policial del miércoles en la cancha de Lanús no es más que otra postal repetida en las canchas de fútbol argentinas, donde la violencia policial y la rapiña empresaria insisten en opacar un pasión de todos y todas.
Fuente: https://www.anred.org/2019/09/20/policia-represion-y-futbol/