En dos días, dos pibes que tenían cerca de veinte años fueron baleados por policías de civil. Mientras Facundo Castro sigue sin aparecer, en la Provincia de Buenos Aires las fuerzas a cargo de Sergio Berni continúan asesinando.
El lunes 13, en Burzaco, una policía mató a Ezequiel Gauto. Ezequiel, un pibe de 22 años, había ido a comprar al almacén, cuando se cruzó con la policía quien manejaba un Uber en lo que, según la versión policial, era una situación de robo. Su hermana lo esperaba de vuelta cuando escuchó los vecinos gritándole que Ezequiel estaba tirado en la calle, que hubo muchos disparos y que ni siquiera se había dado la voz de alto. Intentó correr adentro de una pizzería, pero ya tenía un balazo en el abdomen. Hoy, la familia se organizó, hizo la denuncia y exige justicia. La versión oficial, que intenta encubrir al policía, busca sostener que Ezequiel participaba del supuesto robo, cosa que es desmentida por la familia. Ezequiel, como tantos otros, fue víctima de la represión estatal.
El martes 14, en Gerli, una policía mató a Daniel Alejandro Montes. Ella había arreglado a través de las redes sociales para comprar dólares en una esquina. Llegó, vio mucha gente y eligió tirar. Como siempre, se lo hace pasar como un hecho aislado. En un intento por encubrir el hecho de que se trata de la sistemática represión policial, el caso quedó caratulado como homicidio en ocasión de robo, y se omite completamente el agravante de que se trata de las fuerzas del estado. Lo que sí sabemos que pasó es que una policía vestida de civil asesinó a balazos con el arma reglamentaria de la bonaerense a un pibe de 19 años. No puede decirse de otra manera.
Al momento en que publicamos esta nota, el ministro de seguridad de la provincia, en relación a la desaparición de Facundo Astudillo Castro, afirma en los medios “que no hay elementos para culpar a la policía bonaerense”. Es inadmisible que la voz oficial siga sosteniendo esta posición.
Ninguno de estos dos asesinatos puede pensarse como casos aislados. Y menos hoy, que todo está a la vista, que todavía nos estamos preguntando dónde está Facundo Castro y exigiendo su aparición con vida.
Exigimos justicia y hacemos responsable al ministro de seguridad Sergio Berni por estos hechos.
Fuera Berni
¡Basta de gatillo fácil!
¡Cárcel y castigo a los asesinos!
Cuidémonos del virus y de la represión
Contra la represión, unidad, organización y lucha
Fuente: http://www.correpi.org/2020/mas-gatillo-facil-a-manos-de-la-policia-bonaerense/