Se suspendió la sesión de ambas cámaras en la que se debía certificar la victoria presidencial de Joe Biden. Una mujer recibió impactos de bala en el pecho y hay otros heridos durante las protestas dentro del Congreso de seguidores del presidente estadounidense, Donald Trump, que sigue sin reconocer su derrota.
Con información de Prensa Latina, Agencia Télam, CNN y teleSUR.
Las autoridades del Congreso de Estados Unidos cerraron el edificio y suspendieron la sesión de ambas cámaras en las que se debía certificar la victoria presidencial de Joe Biden, luego de que miles de seguidores del saliente presidente Donald Trump, entre los cuales se cuentan miembros de grupos de la ultraderecha racista y supremacista de ese país, rompieran el cerco de seguridad, tomaran las escalinatas y la entrada del Capitolio e ingresaran a los recintos de las dos cámaras.
Minutos antes la alcaldesa de la ciudad de Washington, Muriel Elizabeth Bowser, del Partido Demócrata, había decretado un toque de queda para la capital a partir de las 18 de hoy (las 20 en la Argentina) en un intento por forzar la dispersión de la manifestación de ultraderecha.
Los medios norteamericanos mostraron imágenes del interior del recinto de la Cámara de Representantes con una ventana rota y un grupo de fuerzas de seguridad del Capitolio apuntando sus armas a un presunto manifestante que logró ingresar al edificio del Congreso.
La irrupción de los manifestantes sucedió mientras un grupo de legisladores republicanos aliados de Trump intentaban obstaculizar la certificación tradicional del voto del Colegio Electoral, que eligió al opositor Biden como el próximo presidente.
Este miércoles, el Congreso, en sesión conjunta del Senado y la Cámara de Representantes, tenía previsto contar los votos emitidos por el Colegio Electoral sobre los comicios presidenciales del pasado 3 de noviembre, que el mandatario republicano perdió ante el demócrata Joe Biden.
Integrado por 538 miembros, el Colegio Electoral determinó el 14 de diciembre la victoria en las urnas de Biden al otorgarle 306 votos frente a 232 de Trump, quien pretendía permanecer en la Casa Blanca hasta 2025.
Trump sigue sin reconocer su derrota y alentó las protestas en contra de la certificación del triunfo del candidato del Partido Demócrata.
Lo ocurrido en la jornada de hoy es el último de una larga serie de hechos impulsados por el aún presidente -como la apresurada desarticulación del sistema postal para limitar el voto por correo- que tuvieron primero como objetivo la manipulación de las elecciones presidenciales estadounidenses, y tras el fracaso, el desconocimiento del resultado.
Diversos analistas y actores políticos consideran que tras su derrota Trump puso en marcha un intento de autogolpe, que también fracasó, lo cual ha sido escasamente reflejado por los medios hegemónicos que insisten en presentar a Estados Unidos como un sistema modélico ante el resto del mundo.
Tras el asalto, fueron enviados al Congreso norteamericano miembros de la Guardia Nacional y de la Policía del estado de Virginia, próximo a la capital.
Si estas personas fueran negras esa barda estaría llena de sangre. Pero no, las instituciones estadounidenses y el establishment se lo piensan dos veces antes de disparar el gatillo en este show de supremacistas y de gente que vive el “American dream”. This is America: pic.twitter.com/tztwVJBjkD
— Alina Duarte (@AlinaDuarte_) January 6, 2021
En un video en la red social Twitter, Trump afirmó a sus seguidores que era hora de regresar a casa, después de que él mismo los instó al mediodía a marchar hacia el Congreso.
“Apoye a nuestra policía del Capitolio y a las fuerzas del orden. Realmente están del lado de nuestro país. Mantente en paz”, escribió Trump, intentando desligarse de las consecuencias de la acción por él convocada.
Manifestantes armados ingresaron al Capitolio de EE.UU. Los manifestantes se enfrentaron con la policía y rompieron ventanas para ingresar al edificio. El Congreso suspendió su sesión para contar y certificar los votos del Colegio Electoral para presidente y vicepresidente pic.twitter.com/OKW10v06zd
— CNN en Español (@CNNEE) January 6, 2021
Por su parte, el aún vicepresidente Mike Pence, quien debió ser llevado a un lugar seguro en el Congreso como varios legisladores, expresó en la plataforma de microblogging que la violencia y la destrucción deben detenerse.
“La protesta pacífica es un derecho de todos los estadounidenses, pero este ataque a nuestro Capitolio no será tolerado y los involucrados serán procesados con todo el peso de la ley”, recalcó Pence.
Previamente, en un comunicado a los congresistas, el vicemandatario afirmó que no bloquearía la certificación de la victoria de Biden, lo cual fue criticado por Trump.