El ENRE dio a conocer las resoluciones con los nuevos cuadros tarifarios para Edenor y Edesur. Detalla los incrementos mensuales promedio para cada nivel de segmentación. De cuánto será el aumento para ingresos altos, medios y bajos.
Por Marcelo Batiz.
Los aumentos de los servicios de energía eléctrica para los usuarios del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) serán en febrero superiores a la inflación para los usuarios de ingresos medios y bajos, debido al nuevo esquema de reducción de subsidios para esos segmentos.
Así se dispuso en las resoluciones 119/2025 y 120/2025 del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE), ambas publicadas este martes en el Boletín Oficial, días después de haber oficializado una suba general del 1,6% que, en los hechos, no se reflejará en ese porcentaje en las facturas de ninguno de los segmentos por la quita parcial de los subsidios.
Para esta situación particular, conviene tener presente la diferencia entre “tarifa” y “factura”, precisamente por la incidencia de la disminución de los subsidios.
Los aumentos, por nivel de ingresos
“En febrero de 2025, la factura promedio antes de impuestos de los usuarios R-Nivel 1 altos ingresos, aumentará en promedio, con respecto al cuadro vigente a enero 2025, un 2,1%. En el caso de los usuarios R-Nivel 2 ingresos bajos y R-Nivel 3 ingresos medios aumentará en promedio un 12,3% y un 8,4%, respectivamente”, indica la primera resolución, referida a Edenor.
En el caso de Edesur, los incrementos son similares, con una pequeña diferencia para los usuarios de altos ingresos, cuyos aumentos serán del 2%.
Las subas para los usuarios de ingresos bajos llegarían a un porcentaje que podría quintuplicar la inflación del mes, a pesar de la política aplicada en los últimos meses de ajustar las variaciones tarifarias de los servicios públicos al nivel general de precios minoristas.
Las diferencias en perjuicio de los sectores de menos recursos obedecen a que los subsidios que quedan por recortar se concentran en ese segmento y en los de ingresos medios, ya que para los ingresos altos se fueron recortando desde mediados de 2022.
Rebaja de subsidios
Al respecto, la norma publicada hoy remite a la resolución 24/2025 de la Secretaría de Energía, en la que se modificaron las “bonificaciones a aplicar al Precio estacional de la Electricidad (PEST)”, es decir, los subsidios al sector de generación que se refleja en las facturas pagadas por los usuarios.
Para el caso de los usuarios N2 (ingresos bajos), la bonificación pasó a ser del 65% sobre el precio definido para los N1 (altos), en vez del 72% vigente hasta enero, siempre respetando el consumo base de 350 kwh por mes, ya que los consumos que excedan ese umbral no tendrán bonificación.
Para los usuarios N3 (ingresos medios), la bonificación se redujo del 55% al 50%, con un tope que se mantiene en este segmento en los 250 kwh mensuales.
El contexto
La decisión se toma en un contexto marcado por tres factores: es previa a las audiencias públicas del 25, 26 y 27 de febrero en la que se escucharán las propuestas de las transportadoras y distribuidoras en el marco de la futura Revisión Quinquenal Tarifaria (RQT); se aplican en un mes caracterizado por el aumento estacional del consumo de energía eléctrica, en particular en medio de una ola de calor y, por último, se da a conocer luego de los cortes de suministro que hubo en varios puntos del interior del país.
En los considerandos de la resolución se detalla que los usuarios N3 que de los segmentos R1 y R2 que consuman hasta 400 kWh/mes abonarán en promedio un 38% menos que los usuarios de los mismos segmentos del N1, brecha que en el caso de los usuarios N2 será del 49%.
En los segmentos R1 y R2 del R-Nivel 2 ingresos bajos se ubican 815.000 usuarios, que representan el 35% de los clientes de Edesur y 900.000 en el área de Edenor (34% del total de usuarios de esa compañía).
Más de veinte años de revisiones
A partir de enero de 2002, con la caída del régimen de Convertibilidad, se procedió a la renegociación de los contratos con las concesionarias, ya que las tarifas estaban dolarizadas.
Para evitar el traslado total de los costos a los usuarios finales, comenzó a aplicarse una política de subsidios generalizados que, con sus variantes, acumuló a lo largo de 23 años un gasto que superó los US$ 200.000 millones.
Si bien el presidente Javier Milei anunció desde su asunción su propósito de terminar con los subsidios a la generación de energía y de gas, esa tarea aún no fue completada y a pesar de ello las tarifas de esos rubros tuvieron aumentos superiores a la inflación general, a diferencia de lo ocurrido en años anteriores, con la excepción de lo actuado entre 2016 y principios de 2019, durante la Presidencia de Mauricio Macri.