Al menos dos ataques homoodiantes en una semana, en un contexto de escalada de violencias

A la brutal golpiza a Juan Sabín en el barrio porteño de Palermo se le sumó la vandalización de la casa de Lucas Nocito en Tigre, provincia de Buenos Aires. Estos ataques se dan en un contexto de un aumento del 70% de los crímenes de odio en un año.

Por Agustina Ramos. Edición: Ana Fornaro.

“Dejamelo a mí, siempre quise pegarle a uno de estos”, dijo el agresor de Juan Sabín, antes de tirarlo al piso y patearlo a la salida de un boliche.

“Te pasa por puto”, le escribieron a Lucas Nocito en su cabaña en Tigre, luego de vandalizarla.

En la última semana salieron a la luz dos ataques homo-odiantes, en un año marcado por el aumento de crímenes de odio en Argentina: 70% más que en el 2024.

Juan Sabín tiene 24 años y vive en la localidad bonaerense de Malvinas Argentinas. Su deseo es ser modelo. Hace dos semanas hizo un book de fotos para empezar a promocionarse. “Me encanta la pasarela, quiero meterme en todo ese mundo”, contó a Presentes.

El viernes 15 de agosto pasado salió a bailar con un amigo que vive en Estados Unidos y estaba de visita. Fueron a Rheo, una fiesta aliada al colectivo LGBTIQ+, en el boliche Crobar, ubicado en la zona de Costanera Norte del barrio porteño de Palermo. Durante la madrugada le llegó una mala noticia a su amigo: había fallecido su abuela. Decidieron salir del boliche antes de que terminara la fiesta para despejarse, alrededor de las 5 y media. Caminaron por el Paseo de la Infanta hasta avenida del Libertador y pidieron un auto. Su amigo lloraba.

Juan Sabín tiene 24 años y quiere ser modelo

“Pasaron dos chicos y empezaron a sollozar como él, le hacían burla. Yo les dije que no pintaba lo que estaban haciendo, no me quedé con los brazos cruzados. Se dieron vuelta, vinieron corriendo y se me tiraron encima. El flaco le dijo al amigo: ‘Dejámelo a mí, yo siempre quise pegarle a uno de estos’”, narró Juan a distintos medios de comunicación sobre el ataque. Luego cayó al piso y el desconocido le pegó patadas en la cara.

“Quiero que se haga justicia”

El auto que habían pedido los llevó al hospital odontológico José Dueñas, desde donde lo derivaron al Hospital Piñero. Por la agresión, Juan terminó con la mandíbula fracturada. El lunes pasado le realizaron una cirugía maxilofacial y actualmente se recupera en su casa con su madre y abuelos. Deberá hacerse ortodoncia porque por los golpes se le movieron los dientes. Le preocupa no poder continuar con su proceso para ser modelo durante este tiempo, pero asegura: “Voy a estar regio, solo que en unos meses”.

Juan Sabín publicó su descargo en redes sociales

El sábado posterior al ataque realizó la denuncia en la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas N° 13, especializada en discriminación, a cargo de Andrea Verónica Scanga.

“Quiero que se haga justicia por esto que me hicieron y quiero que pongan que fue un intento de homicidio”, dijo Sabín a esta agencia. Durante estos días distintas organizaciones como la Federación Argentina LGBT (FALGBT), se pusieron en contacto con él y desde el municipio le brindarán asistencia psicológica. También a través de redes sociales se contactaron muchos chicos, incluso de distintos países, que vivieron situaciones similares a la que padeció.

“Esto habla de odio”

Lucas Nocito tiene 43 años, un hijo y nació en Tigre. Es tercera generación: su padre y sus abuelos también son de esta localidad, 18 kilómetros al norte de la Ciudad de Buenos Aires. Hace 24 años adquirió una casa en el Delta, un lugar que históricamente fue un refugio para personas de la diversidad sexual, en particular durante el Terrorismo de Estado.

El miércoles de la semana pasada presintió algo. Las cámaras que le muestran lo que sucede en su casa del Delta no funcionaban. Le pidió a un vecino que se acercara a ver si estaba todo bien. “Che Luqui, todo mal, no sé qué te hicieron… Mirá, te quemaron acá la puerta, te quemaron la cerradura… te la rompieron. Tenías razón… algo sobre vandalizar, mirá”, le respondió su vecino a través de un video donde le mostró los destrozos. Además de quemar la cerradura, cortaron con machetes los cables, rompieron las cámaras de seguridad y dejaron mensajes escritos en aerosol en la fachada: “Te pasa por puto”.

“Estoy shockeado. Esto habla de odio. En otro momento lo hubiese dejado pasar por miedo, pero hoy ya no lo permito. Desde tiempos inmemoriales el Delta es un lugar de abrazo. Muchas maricas, trolos, lesbianas habitaban y habitan estos lugares en busca de amor y paz. Que pase esto te hace pensar que estamos retrocediendo. Pudo haber terminado en una tragedia”, compartió Lucas, en una conversación con Presentes.

Hizo la denuncia en el destacamento policial de Paraná de las Palmas y Río Carapachay y aguarda ser notificado por la Fiscalía. “Tuve que ir desde mi casa hasta allá en lancha. No todo el mundo puede hacer eso”, contó.

“El gobierno eligió a la comunidad LGBT como su enemiga”

A través de las cámaras de un vecino que registraron otro ataque a una vivienda el mismo día y con la misma modalidad, Lucas y otros habitantes de las islas llegaron a la conclusión de que los atacantes fueron jóvenes de la zona. “Cuando me enteré que eran menores de edad y actuaban con este odio me di cuenta que había que hacer algo. No los puedo culpar, muchos tienen 16 años. Pero necesitaba que esto se sepa porque el odio se va acrecentando. Acá hay políticas totalmente ausentes. Estaría bueno que se llegue a una investigación y tratar de reparar esto, que haya una política de enseñanza en las escuelas”, expresó Nocito.

Los ataques se dan en el marco de un aumento de las violencias y discursos de odio hacia la diversidad sexual. Según el Observatorio Nacional de Crímenes de Odio LGBTIQ+, en los primeros seis meses de 2025 se registraron 102 ataques violentos motivados por odio hacia la orientación sexual, identidad o expresión de género. Esto representa un 70% más de lo  registrado durante todo 2024.

“Los casos de agresiones tanto verbales, físicas, psíquicas y de todo tipo están aumentando exponencialmente en los últimos meses y esto sin lugar a dudas tiene que ver con los discursos de odio que emanan desde lugares de poder. Lamentablemente el gobierno nacional eligió a la comunidad LGBT como su enemiga. Ese odio hacia nuestra comunidad se encuentra legitimado y se traduce en hechos de violencia y discriminación hacia las personas LGBT en nuestro país”, expresó a Presentes María Rachid, parte de la comisión directiva de la FALGBT y titular del Instituto contra la Discriminación de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires.

En lo que va del gobierno de Javier Milei, los feminismos, las diversidades y las mujeres sufrieron un ataque sistemático. El propio presidente de la Nación leyó un discurso frente a la comunidad internacional en el Foro Económico Davos en el que desinformó sobre la comunidad LGBTIQ, y asoció a las personas homosexuales con la pedofilia.


Fuente: https://agenciapresentes.org/2025/08/28/argentina-al-menos-dos-ataques-homoodiantes-en-una-semana-en-un-contexto-de-escalada-de-violencias/

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *