Jeanine Añez no logra maquillar el golpe de Estado en Bolivia
La nominación de Jorge Quiroga como “delegado ante la comunidad internacional” para “explicar la violación de los derechos humanos” demuestra el fracaso de la presidenta de facto de Bolivia, Jeanine Añez, en hacer creer al mundo que no hubo un golpe de Estado en Bolivia el pasado 10 de noviembre.
La autonombrada Añez cree que el simple hecho de colocarse una banda presidencial le otorga por arte de magia la inteligencia necesaria para gobernar democráticamente un país como Bolivia, cuando en los hechos actúa como el testaferro de una derecha golpista boliviana, apañada por Estados Unidos, que es la que le prepara la estrategia, los decretos y los discursos que ella difícilmente los lee al país.
Sin embargo, aunque su imagen puede ser conveniente dentro el espacio...