
Contra el disciplinamiento, más feminismo
El disciplinamiento consiste en tratar de bajar el tono, de “bajar un cambio”. Se trata de hacernos creer que podemos trasvasar nuestra potencia a un armado electoral que pueda ganarle a la derecha de la Alianza Cambiemos pero poniendo en remojo nuestro deseo de ya no esperar más por el mundo que estamos construyendo ahora mismo. En nombre de enfrentar al gobierno, el discurso de la unidad nos vuelve a disciplinar, a poner bajo la jefatura de los varones más reaccionarios y misóginos. No podemos tolerar este retroceso. No en nuestro nombre. No en nombre del movimiento feminista.
Revisar su cuenta de twitter no es una sorpresa, es la constatación de que el mensaje es fuerte y claro y que emitirlo es tanto una responsabilidad como una provocación para quienes buscan dejar en...