Una Cumbre más, en nombre de la libertad y la democracia
Es un acto de soberbia que en nombre de la sacrosanta democracia, un casi octogenario presidente decida qué países pueden asistir –y quienes no- a una cumbre regional. La decisión sólo llama la atención a aquellos que realmente creían que Joe Biden iba a cambiar radicalmente los exabruptos de Donald Trump que, en definitiva, eran una representación –quizá más brutal- de la consuetudinaria política de “amistad” estadounidense.
Por Álvaro Verzi Rangel.
La novena Cumbre de las Américas, prevista para el 6 de junio en Los Ángeles, puede convertirse en un duro traspié diplomático y político para Estados Unidos y su presidente, un golpe a su hegemonía, por la decisión de varios mandatarios de América Latina y el Caribe de no concurrir a la cita, de persistir...