El delegado Germán Tonero de la planta de General Motors en General Alvear, provincia de Santa Fe, denunció que el año pasado hubo 350 “despidos encubiertos” y que “la empresa va apretando a los trabajadores para que arreglen”. Lo hizo al ser entrevistado por Gustavo Sylvestre en su programa matutino en Radio 10. Además, habló sobre el programa de suspensiones masivas que está implementando la empresa automotriz, y auguró despidos y recortes en la plantilla.
General Motors acordó con el gremio Smata un programa de suspensiones rotativas a lo largo de cinco meses, hasta el 31 de enero de 2019. Durante el período de suspensiones funcionará un turno en lugar de dos y los trabajadores cobrarán el 70 por ciento del salario. El argumento del sindicato para firmar el acuerdo fue el de preservar los puestos de trabajo.
En este marco, el delegado Germán Tonero detalló en declaraciones a Radio 10 la situación en la planta.
“La semana que viene vamos a estar un mes suspendidos y después una semana cada turno. La idea de la empresa es ir a un turno sobre los 2 que existen, es seguir reduciendo personal y es la situación que se viene dando desde hace años. Hay que luchar y defender cada puesto de trabajo”.
“Vamos a cobrar el 70% del sueldo neto en estos meses hasta fin de año sin saber qué va a a pasar después de enero. Va a haber 1500 empleados suspendidos, sobre un total hay poco más de 2000 trabajadores”, expresó.
“Ya tuvimos 350 despidos encubiertos, y a su vez la empresa va llamando y presionando para que arreglen para que no haya más despidos. Mientras con esta devaluación la empresa está ganando más, y va a producir más con menos empleados, y ahora el modelo Cruze vale más de $700.000”, apuntó.
“A las multinacionales esto le sale redondo pero los que sufrimos somos los trabajadores”, finalizó Tonero.