El Encuentro internacional organizado desde la Red Quilla se realizó del 18 al 20 de agosto y fue una manera de mostrar apoyo a la resistencia jujeña a la reforma constitucional.
Por María Eugenia Ludueña. Fotos: Aimé Celeste. Edición: Ana Fornaro.
El 2do. Encuentro Internacional de Feminismos comunitarios, campesinos y populares del Abya Yala fue, a través de sus múltiples actividades, invitadas y participantes, una gran celebración de la Pachamama. También un modo de potenciar las redes feministas para la defensa de la madre tierra, los saberes ancestrales y los modos de organizar la resistencia en Jujuy y en tantos otros rincones de América Latina.
El Encuentro organizado por la Red Quilla, integrada por Casa Mama Quilla -un proyecto autogestivo de mujeres, lesbianas, travestis, trans, bisexuales y no binaries- y el Instituto Rodolfo Kush, con sede en Tilcara, se realizó del 18 al 20 de agosto y se extendió un día más de los previsto. Fue para poder acompañar a la permanencia que resiste a la vera de la ruta en Purmamarca, de donde fue desalojado con violencia y saña hace pocos días, con la presencia de la machi Betiana Colhuan -la mujer medicina mapuche que estuvo ocho meses privada de su libertad en Bariloche junto con otras hermanas. También para que la coordinadora del encuentro, Adriana González Burgos, entregara a Elvira, una de las abuelitas kollas que resisten allí como parte del Tercer Malón de la Paz, dos wiphalas tejidas y cosidas colectivamente por participantes del encuentro.
En repudio del gobierno de Morales
Uno de los temas que atravesó este encuentro de manera decisiva, y decidió a muchas a viajar hasta allí, fue acompañar de algún modo la lucha para pedir se derogue la reforma de la constitución provincial, aprobada a las apuradas y denunciada por la inconstitucionalidad de los procedimientos legislativos. Los mismos fueron explicados en una de las actividades, a cargo de las abogadas Alicia Chalabe y Sandra Ceballos. Fuera Morales, Abajo la Reforma, Arriba la Wipahla, irrumpieron en casi todas las actividades como consigas gritadas espontáneamente.
“Quienes estamos en la organización hemos manifestado abierta y públicamente el repudio a este gobierno provincial, represor, autoritario, dictador que ha avasallado los derechos de nuestros pueblos indigenas”, expresó Adriana González Burgos, coordinadora del Encuentro Internacional de Feminismos Comunitarios, Campesinos y Populares en Abya Yala.
“Los pueblos originarios somos sujetos políticos, tenemos un posicionamiento y vamos a defender nuestra Pachamama”, expresó en una de las charlas Natalia Cachaca, integrante del Tercer Malón. “No pude ir a Buenos Aires porque me pusieron una restricción y no puedo salir de la provincia. Morales no puede creer cómo nos pudimos organizar. El gobierno sabe que las mujeres nos hacemos escuchar y a veces en nuestras comunidades somos las que ponemos los puntos”, dijo.
Y reclamó: “los jueces de la Corte Suprema de Justicia de la Nación escuchen al Tercer Malón que permanece en Buenos Aires. Llevan más de 18 días sin atendernos. ¿Por qué no están trabajando esos jueces que pagamos entre todos?”, preguntó al auditorio colmado por mas de 300 personas en el Salón Municipal, frente a la plaza central. Natalia y muchas personas que resisten desde diferentes espacios en Jujuy repitieron a lo largo de estos dias una idea: “Nunca nos hemos sentido solos. Gracias a todos los que apoyan nuestro lucha y acompañan”. Y cerró su participación con una copla y una frase que hizo referencia a Rita Segato: “La colonialidad nos roba el espejo y nuestra memoria”.
“Cuando no somos organizadas somos presas para el imperio”
Con epicentro en Tilcara, las actividades se desplegaron en diferentes sedes, bajo el sol arrasador de la quebrada y con los cerros minerales abrazando la presencia de mujeres, lesbianas, travestis, trans, personas no binarias llegadas de países muy diversos, para compartir sus experiencias de activismo antipatriarcal desde la política, el arte, el activismo, la salud, el cuerpo, el trabajo con la tierra, entre otros campos.
Desde Bolivia llegó Flora Aguilar, ex ejecutiva de la Confederación Nacional de Mujeres Campesinas e Indígenas Originarias de Bolivia. Flora contó acerca de su experiencia desde la conformación de la organización política Bartolina Sisa. “Cuando no somos organizadas somos presas para el imperio”, destacó Flora.
“Quiero manifestar nuestra solidaridad con el pueblo de Jujuy, con los docentes y hermanos indígenas. Condenamos el odio racial y las mentiras de una autoridad que apoyó el Golpe de Estado en Bolivia”. Nosotras luchábamos y no conseguíamos nada. Un día dijimos:tenemos que tener nuestro brazo político y vamos a llegar al poder. Ese lema fue nuestro y ese brazo político salió de las organizaciones sociales. Bartolina Sisa es un instrumento político por la soberanía de los pueblos. En Bolivia somos antiracistas, anticapitalistas, antiimperialistas y también antipatriarcales”, dijo.
“Las mujeres, los pueblos indígenas y la juventud ahora somos parte de una nueva Constitución. Y gracias a la lucha de las mujeres de Bolivia tenemos legislación revolucionaria. Se ha declarado este año de despatriarcalización pero no se generan aún las políticas para eso. Pero cuando uno sabe sufrir, sabe responder”. Flora se solidarizó con Milagro Sala y pidió por su libertad, habló del racismo detrás de su persecución política, y también se pronunció contra el intento de magnicidio que sufrió Cristina Kirchner.
“El primer reto es no dejar a nadie afuera”
La activista muxe Amaranta Gómez Regalado llegó desde Oaxaca. “Vengo en un momento muy duro de Mexico con sus violencias, a una Argentina con las complejidades de una América Latina saqueada pero también con muchas resistencias en toda la región”, dijo. Amaranta planteó la necesidad de avanzar hacia una etnografía de las identidades de género diversas. De nuevas miradas y discursos que no favorecen los derechos. Del origen histórico de la diversidad sexual en el mundo. De interseccionalidad. De alianzas estratégicas de campesinas, indígenas, migrantes y sindicatos. “Se dice en muchos foros que nadie quede afuera. El primer reto es no dejar a nadie afuera para que no se nos siga negando y que la historia nos niegue”.
Tambien resaltó el rol de las mujeres zapatistas. “Fue en el movimiento zapatista donde las mujeres indígenas nos dieron rostro, a pesar de que iban con capuchas”, dijo. El rol de lo femenino ha sido aleccionador en América Latina y estos encuentros lo fortalecen”, cerró.
En el inicio del Encuentro se compartieron trabajos y ponencias. Agencia Presentes participó de esta instancia contando acerca de la comunicación de géneros, diversidad y derechos humanos.
El segundo día del Encuentro, hubo más de una docena de talleres antipatriarcales: desde Memoria de la Semilla, hasta ceremonia y danza del cacao, taller de preparaciones medicinales de la Quebrada con participación de la cooperativa campesina Cauqueva.
Gladys Tzul Tzul, maya K’iche’ (Guatemala) habló de la politica comuncal y la lucha de las mujeres por tierra. Y hubo cine debate con “El polvo ya no nubla nuestros ojos” del Colectivo Silencio (Perú) e “Historia del Agua de Mendoza” de Bernardo Blanco (Argentina), que analiza una de las grandes victorias en la lucha por el agua.
A lo largo de los tres días hubo espacios para la música y el arte. Marianella Saavedra hizo una performance de poesía gorda, ovacionada por las participantes y sobre la que reflexionó luego Amaranta. Lorena Calpanchay cantó sus coplas trans en el escenario y en la peña, donde compartió la noche con las cantantes Eugenia Mur y Añawita. Añawita dedicó la cueca La Caraqueña a Camila Muller, docente y artista hostigada por el gobierno de Morales. Jallalla Warmi, el grupo de sikuris fundado por lesbianas, llegó desde Perú y animó los espíritus feministas con vientos y bailes. El coro feminista de Córdoba compartió las canciones que denuncian la violencia machista y convocó al baile con sus versiones cumbieras. A lo largo del encuentro, hubo además feria feminista de productos artesanales, agroecológicos, intercambio de semillas y trueques.
Cierre celebración de la Pachamama
El domingo, tras la entrega de títulos a quienes cursan el Diplomado en Feminismos Comunitarios, Campesinos y Populares en Abya Yala. Estéticas Feministas, Cuerpos y Movimiento Campesino De Mujeres (Universidad Nacionalde jujuy), se realizó una ceremonia de la Pachamama en el Instituto Rodolfo Kusch.
La machi Betiana, por problemas de demora de su vuelo, llegó para la ceremonia de cierre, junto a su madre María y a su bebé. Después de la apertura, Natalia Machaca, integrante del Tercer Malón, y Betiana, se arrodillaron y abrazaron ante la Pacha para realizar sus ofrendas. Fue un momento conmovedor y de alto poder simbólico, con las luchas de los pueblos mapuche y kolla encarnada en dos mujeres que resisten en sus cuerpos-territorios. “No hay mejor manera de cerrar este encuentro que este abrazo amoroso junto a nuestra pacha”, expresó la coordinadora del Encuentro.
Al día siguiente Betiana, acompañada por su mamá, por Adriana Burgos y la comision organizadora del encuentro, visitó resistencia del Tercer Malon junto a la ruta en Purmamarca. Alrededor del fuego, en ese escenario de belleza y despojo, “Vengo a agradecerles su lucha” dijo la machi, que estuvo ocho meses presa en Bariloche junto a otras mujeres con sus hijos. “Todos somos hijos de la naturaleza y es necesario que todos luchemos por la tierra”.