Así calificó el fallo Viviana Losada, una de las integrantes de la Comisión Vesubio y Puente 12. Bronca, tristeza y angustia fueron los sentimientos predominantes tras el fallo del viernes que condenó a 2 genocidas pero absolvió a otros 3 en un juicio que se realizó a los tropiezos. Todas las voces e imágenes de una jornada cargada de ansiedades, 50 años después de los hechos. Luces y sombras de un fallo polémico.
Redacción: Carlos Rodríguez. Fotos: Natalia Bernades. Cobertura en juicio: Eugenia Otero, Julián Bouvier, Mónica Mexicano, Camila Cataneo, Pedro Ramírez Otero, Lucrecia Raimondi, Agustina Alú Svagelj, Malena Lucero y Fernando Tebele.
“Nos vamos con el sabor amargo de la impunidad y la justicia cómplice”. María Eva y Sofía Arroyo, hijas de Juan Carlos “El Negro” Arroyo, expresaron a La Retaguardia el sentimiento generalizado de sobrevivientes y víctimas del Terrorismo de Estado, luego del veredicto en la causa Puente 12 III. Como si todo hubiera sido el resultado de un análisis previo, el Tribunal Oral Federal en lo Criminal N°6 comenzó la lectura del fallo con la cadena perpetua para el policía Néstor Alberto Ciaramella —el único autorizado a presenciar la audiencia de manera virtual, desde Esquel— y siguió con la pena a 25 años de prisión para Enrique Del Pino, jerarca del Batallón 601 de Inteligencia del Ejército.
Al juicio se llegó con 185 casos de crímenes de lesa humanidad ocurridos entre 1974 y 1977. En la primera parte, al anunciar las condenas, se leyeron los nombres de las víctimas.
Los jueces optaron primero por la parte dulce del fallo, después llegó el trago amargo, con las absoluciones del oficial de Inteligencia del Batallón 601, Walter Roque Minod; y de los policías Carlos Alberto Tarantino y Angel Salerno. Además de las torturas y los homicidios, también se probaron casos de abuso sexual.
El premio consuelo fue dar por probados los casos de privación de la libertad, torturas y homicidios adjudicado al también policía Enrique Gauna, quien falleció antes de que llegara la sentencia, y que abarcó 14 casos de 1974 y 1975. Se les reconoció el Derecho a la Verdad y se dio por probados los hechos, aunque sin condenas, porque Gauna era el único imputado por ellos y la acción penal se extingue con la muerte.
Antes, durante y después del fallo, las dos bandejas llenas de familiares y sobrevivientes, en la Sala AMIA de los tribunales de Comodoro Py estallaron con un canto emblemático: “Como a los nazis les va a pasar, adónde vayan los iremos a buscar”.
El estallido era más que justo, por los casi 50 años de espera de justicia, por los años que pasaron hasta llegar al juicio, y por las horas de espera para que leyeran una sentencia que sabe a poco, que sabe a impunidad. Luego de la absolución que habían logrado en Puente 12 I, Tarantino y Salerno recibieron el rechazo de la Cámara de Casación, que los halló culpables de los delitos cometidos y ordenó que se les fijara la pena que les correspondía.
El guante lo recibieron los jueces del Tribunal 6, Daniel Obligado, Ignacio Fornari y Sabrina Namer. “Como no se leyeron los fundamentos del fallo, no sabemos si la absolución es por los casos de Puente 12 III o si lo es también por Puente 12 I en los que Casación revirtió la absolución”, dijo el abogado querellante Pablo Llonto.
En el mismo sentido se pronunció la fiscal general Angeles Ramos, quien puntualizó: “La lectura de las absoluciones fue muy rápida y nos queda la duda sobre el alcance de esas decisiones, ahora tenemos que esperar hasta que se den a conocer los fundamentos” de la sentencia, el 26 de noviembre próximo.
Recién a partir de allí, la Fiscalía y las querellas estarán en condiciones de presentar su apelación ante la Cámara de Casación.
Verónica Bogliano, querellante por la subsecretaría de Derechos Humanos, dijo que había “mucha expectativa” por la sentencia y por eso “hay enojo e indignación porque después de tantos años de juntar pruebas hay tres absoluciones y recién vamos a saber el motivo el 26 de noviembre”.
Además del dolor por una sentencia polémica, también generó críticas la forma elegida por el presidente del Tribunal, Daniel Obligado, a la hora de leer el veredicto. Antes de empezar, ante los cánticos de quienes esperaron horas el momento culminante, el juez Obligado llamó a los presentes a estar “lo más tranquilos posible porque de lo contrario me van a poner en la situación de desalojo y eso es mucho peor”.
Sostuvo que los jueces hicieron “mucho esfuerzo para poder concretar el juicio”. Cerró su intervención con un “señores, han tenido ustedes el juicio”, como si eso fuera suficiente tras la larga espera y la poca justicia lograda.
Viviana Losada, quien dio su testimonio en el juicio por el secuestro de quien era entonces su pareja, Rodolfo “El Negrito” Ortíz, consideró que fue un juicio “donde quedó demostrado que hay una justicia cómplice”. Cargó contra el tribunal y también con la instrucción a cargo del juez Daniel Rafecas.
“Son cómplices de la impunidad, porque se te va la vida y se cagaron en nosotros, en todos nosotros”. Sostuvo que “esta es la justicia de la burguesía, una justicia de mierda que no nos da ni siquiera una reparación”.
Viviana Losada dijo que esperaba que la lucha por la verdad y la justicia “al menos sirva como ejemplo para las nuevas generaciones, porque pasaron casi 50 años y seguimos acá reclamando justicia, a pesar de todo”.
La sobreviviente Margarita Sánchez Hernández sobreviviente afirmó que “después de luchar 50 años, después de haber dado testimonio por los que ya no están, es muy triste la absolución de policías que fueron participantes activos del genocidio”.
Los policías fueron participantes activos del genocidio y por eso es una vergüenza la absolución”.
En el cierre, el abogado Pablo Llonto describió como “un mazazo la absolución de Salerno y Tarantino, porque este fallo es un mamarracho”. Está probado que los policías absueltos “estuvieron en Puente 12, que siempre funcionó como un centro clandestino de detención”.
Fuente: https://laretaguardia.com.ar/2024/09/decepcion-por-las-3-absoluciones-en-puente-12.html