Los representantes de pueblos originarios nucleados en el Tercer Malón de la Paz realizaron este miércoles 23 de agosto una movilización, acto y festival frente al Congreso de la Nación, en el marco del 211° aniversario del Éxodo Jujeño. Los “maloneros” reivindicaron la histórica gesta, a poco de cumplirse dos meses de su permanencia pacífica frente a la Suprema Corte de Justicia, en reclamo de la derogación de la reforma constitucional de la provincia de Jujuy, la intervención federal de la provincia, y la asignación efectiva de la propiedad comunitaria indígena.
Texto e imágenes: Lisandro Amado, para ANRed.
Oradores y oradoras de distintas comunidades jujeñas tomaron la voz para exigir que quienes disputan cargos políticos en las elecciones al asumir “gobiernen para el pueblo, no para aquellas empresas mineras, multinacionales, extractivistas”. Como vienen haciendo desde su salida de la Quiaca el pasado 25 de Julio, denunciaron que la nueva constitución provincial debe ser invalidada, ya que el gobernador Gerardo Morales incurrió en la contradicción legal de ser constituyente a la vez que ejercía su cargo ejecutivo, se realizó la reforma en tiempos menores a los debidos y sin consultar a las comunidades en los puntos relacionados a ellas y su territorio, y se incurre en contradicciones con la constitución nacional y acuerdos internacionales. “En esa reforma que hizo Morales, no estamos nosotros, los pueblos indígenas, los pueblos preexistentes”, resumió en el escenario Erika Cayari, de la comunidad Salinas Grandes. “Quieren venir a ‘pecharnos’ de nuestros territorios. Deben saber que han cometido un grave error con nosotros: elegirnos como enemigos, sabiendo que nosotros descendemos de aquella estirpe, aquel linaje, que ha fundado este país”, aseguró Desidero Olmos, de la comunidad Pucará.
En apoyo a los indígenas, tomaron la palabra referentes de la UTEP, las CTA, así como diputados y diputadas de Unión por la Patria y el Frente de Izquierda y los Trabajadores. Esteban “Gringo” Castro, Secretario General de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular, remarcó la necesidad de “construir una organización común, con todos nuestros matices” para alcanzar objetivos comunes frente a “un enemigo poderoso que tiene que fragmentar y dividir al pueblo”. Hugo Yaski, Secretario General de la Central de Trabajadores de la Argentina y diputado de Unión por la Patria reafirmó las contradicciones de la reforma con la constitución nacional y planteó que el Malón es “una manera de enseñarle a muchos argentinos y argentinas que ven esto como algo muy lejano, que no tiene que ver con su vida cotidiana, que forma parte de la misma lucha que tenemos los trabajadores, las trabajadoras, los maestros y maestras.” Jorge Angulo, integrante de las comunidades, habló en nombre de la CTA Autónoma en representación del secretario general Ricardo Peidro para decir que el Malón plantea una nueva forma de cambiar la realidad, de una forma colectiva y comunitaria. Agregó que el poder del pueblo debe ser construido en conjunto entre las naciones preexistentes, las organizaciones sociales, los sindicatos. “El malón viene construyendo política, y eso es lo que no quieren reconocer, por eso nos ningunean” afirmó Angulo.
En la misma línea, la diputada de Unión por la Patria Mónica Macha se refirió a la importancia de “articular los distintos procesos políticos colectivos que permitan prepararnos para momentos de resistencia”. “Nos debemos el reconocimiento de lo que fue el primer genocidio, el de los pueblos indígenas”, agregó. Al pedir la multitud qué dice de todo esto el presidente Alberto Fernández, la legisladora respondió “Habría que preguntárselo a él”. Juan Marino, legislador correligionario de Macha y Yasky, presentó una declaración por escrito a favor del Malón de la Paz, firmada por 52 de los diputados de Unión Por la Patria, y comentó que su bloque presentó en el mismo día el proyecto de ley para que el convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo, que consagra los derechos de los pueblos originarios a nivel internacional, adquiera jerarquía constitucional.
Por su parte, el diputado de izquierda e integrante de los pueblos originarios jujeños Alejandro Vilca, tildó de “lacayos de Morales y de Larreta” a los diputados que exigieron su expulsión junto a sus compañeros de banca Nicolás del Caño y Myriam Bregman bajo el argumento de que habían participado de las movilizaciones contra la reforma constitucional en Jujuy. “Estuvimos en cada corte, en cada movilización de los trabajadores de Jujuy. Porque creemos que no es sólo un gobierno. La pobreza que vive Jujuy es la pobreza que viven todos los argentinos. La pelea de los pueblos originarios de Jujuy es la misma de los mapuches en la Patagonia” dijo Vilca, y agregó que “no es sólamente por nuestro territorio, es por el derecho al agua, el derecho a la vida”. El diputado se mostró orgulloso de ver a sus hermanos jujeños repitiendo la gesta del Éxodo y llamó a la CGT y la CTA a convocar a un paro general para ganar la disputa en las calles.
El acto concluyó con un festival de música jujeña, con la presencia de Pacha Runa, Maryta de Humahuaca, Pura Vida, Copleras del Malón, Mariana Carrizo, Peteco Carabajal y Bruno Arias.
