Al participar de la nueva edición de la Marcha de la Resistencia, el secretario de Derechos Humanos del Sindicato de Prensa de Buenos Aires, Tomás Eliaschev, denunció que la noción de la profesión “ha sido usurpada por una camarilla que nada tiene que ver con la misión que tiene que tener el periodismo”.
Eliaschev afirmó que “es un honor estar acá representando al Sindicato de Prensa de Buenos Aires en esta Marcha de la Resistencia, tan importante”.
Añadió que “hoy se está discutiendo mucho cuál es el rol de los medios porque cuando crece la represión y cuando hay un gobierno que siembra el odio y quiere que haya impunidad, el papel de los medios cobra una importancia muy relevante, ya sea como meros propagandistas y encubridores o denunciando y dando voz a las víctimas de estas políticas de ajuste y de represión”. Y consideró que “hoy tenemos el deber histórico de recuperar el periodismo para el pueblo”.
Al respecto, denunció que “la noción misma de los medios y del periodismo ha sido usurpada por una camarilla de lobistas, de empresarios y de entretenedores que nada tiene que ver con la misión que tiene que tener, que es tratar de dar cuenta de los eventos de nuestro tiempo, tratar de no generar encubrimientos, sino siempre preguntarnos”.
El dirigente graficó que “cuando tenemos un gobierno que festeja que se cierre una causa en la cual no hay ningún culpable, como si eso fuese un logro de la Justicia, y donde hay supuestos periodistas que propagan esas mentiras como si fuesen la verdad, como en el Caso Maldonado, en estos momentos es que tenemos que recuperar la noción de periodismo”. Señaló que “quienes hacen eso y quienes son premiados por las asociaciones de empresarios y por los dueños de medios como supuestos periodistas, no lo son”, sino que “son meros trolls, son propagadores de mentiras y no están buscando la verdad ni reparar una injusticia. La misión de las y los periodistas y trabajadores de prensa es recuperar el periodismo”, agregó.
Indicó que “el SiPreBA viene de dar una batalla desde antes de que asumiera este gobierno, pero desde que asumió la alianza Cambiemos hay, al menos, 3.300 puestos de trabajo que se perdieron en todo el país, cierre de medios, acallamiento de voces opositoras, censura, persecución y discriminación de los medios comunitarios, intento por liquidar los medios públicos, sobre todo su carácter federal. Esto es una política de conjunto.”
Eliaschev rememoró que “el jefe de Gabinete de este gobierno, Marcos Peña, dijo cuando asumieron, que iban a terminar la guerra contra los medios, contra el periodismo. Pero lo que comenzaron es una guerra contra los trabajadores en general y contra las y los trabajadores de prensa en particular, porque lo que quieren es que se silencien voces”, precisó.
En tal sentido estimó que “tenemos una tarea que es ligar y vincular a través de una misma lucha a todos los trabajadores, los que están en grandes empresas, con las cuales la mayoría no comparte la línea editorial.”
El dirigente ejemplificó que “cuando Santiago Maldonado estaba desaparecido, los compañeros de la Comisión Interna del diario Clarín, de Todo Noticias, Canal Trece, de La Nación, de Perfil y de los medios públicos hicieron asambleas reclamando su aparición con vida y el rostro de Santiago estuvo presente en las redacciones”.
“Es decir que los mismos trabajadores de prensa no creemos en las patrañas que pretenden instalar los dueños de los medios. Y esa lucha la podemos dar porque desde hace mucho tiempo nos acompañan los medios comunitarios, que son quienes nos dan voz cuando -oh vaya paradoja- los trabajadores de prensa, los trabajadores de la comunicación, estamos incomunicados”, aclaró.
“Tenemos que recuperar el periodismo para el Pueblo”, reiteró.
Analizó que “cuando se habla en contra de los medios o en contra del periodismo sucede algo parecido a cuando se hablaba en contra de la política: la antipolítica. Por supuesto que hay que criticar a la dirigencia política y a los que se usan la política para enriquecerse o para servir a intereses que nada tienen que ver con el pueblo”.
En tal sentido evaluó que “los periodistas no son Magnetto, Lanata ni Majul. Periodistas y trabajadores de prensa son quienes garantizan que salgan adelante los medios, que se escuche la información, que se sepa lo que está pasando”. Y para eso es fundamental organizarse y dar “una lucha de conjunto en las empresas periodísticas tradicionales y en conjunto con los medios comunitarios, alternativos y populares”.
Respecto de los Derechos Humanos, el responsable de esa área en el SiPreBA afirmó que “la historia de nuestro país está íntimamente ligada con la historia del gremio de prensa. Porque en este país, para cometer el genocidio, se apropiaron de papel prensa, censuraron a mansalva, la música, el arte, la literatura, la literatura infantil y por supuesto los medios de comunicación.”
Al recorrer la historia reciente de la Argentina, aseveró que “el gremio de prensa es uno de los más castigados por la dictadura cívico militar, eclesiástica, genocida que asoló a nuestro país. Entre 1966 -dictadura de Onganía-, durante la Triple A, y con la dictadura de las juntas militares nosotros hemos tenido 172 trabajadores y trabajadoras de prensa asesinados por el terrorismo de Estado, detenidos desaparecidos, compañeras y compañeros que pagaron con su vida su compromiso.” “Muchos de ellos eran militantes gremiales; eran, por ejemplo, la comisión Interna del diario La Nación, quienes en 1975 tomaron la redacción y dieron vuelta el retrato de Mitre en una alianza con los obreros gráficos, dando una lucha de conjunto contra una patronal que se cree no solamente dueña de nuestras vidas sino también dueña de la verdad”, alertó.
Y reivindicó que “esas luchas han sido calladas. Y no fue en vano que trataron de silenciar al gremio de prensa. Asesinaron a tantos compañeros, tantos se tuvieron que exiliar, se tuvieron que ir del país amenazados, censurados, acallados, porque la represión necesita silencio”.
El dirigente del SiPreBA sostuvo que “esto no es una dictadura, pero cómo se le parecen sus beneficiarios, sus métodos, su forma de mentir y de manipular a la prensa. Ellos quieren el control de la prensa, quieren que se silencien las voces y se cansaron durante el gobierno anterior de denunciar que había una sola voz. Pero eran críticas hipócritas porque ahora realmente están queriendo que haya una sola voz y que esa voz sea una voz mentirosa, en donde no se escuchen los sufrimientos del pueblo y no se conozca el expolio que estamos sufriendo”.
Anticipó que “el año que viene se van a cumplir 50 años del asesinato del primer mártir del gremio de prensa, Emilio Jáuregui, secretario general de la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa, la FATPREN, uno de los mejores cuadros gremiales que tuvo nuestro sindicato.
Nosotros sabemos que no fue casualidad que se hayan ensañado contra los mejores cuadros sindicales, contra las mejores plumas del periodismo. Y esas mejores plumas, como Rodolfo Walsh, tenían un firme compromiso y un entendimiento de que la organización sindical en la clase trabajadora, en las redacciones, era estratégica. Por eso Walsh dedica la reedición de “El caso Satanosky” a las comisiones internas, a las agrupaciones de base, a su agrupación sindical que era el Bloque Peronista de Prensa y a todos aquellos que combaten, desde adentro, a esta raza de envenenadores de la verdad”.
Eliaschev recordó además que este año el SiPreBA denunció ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en Colombia que el Estado argentino disparó con balas de goma contra, al menos, 45 reporteros gráficos, trabajadores de prensa, camarógrafos que fueron reprimidos con saña por parte de la policía, que no solamente le dispara a los manifestantes y transeúntes sino también a periodistas. Y cuando hacemos este reclamo decimos ‘No se olviden de Cabezas’, un compañero asesinado por ejercer el maravilloso oficio periodístico. Y levantando esa bandera, es que estamos dando la lucha en las redacciones por las condiciones de vida de las y los trabajadores. Destacó que mientras se desarrollaba la marcha de la resistencia, en Télam había un ruidazo contra la paritaria cero “porque no vamos a aceptar el hambre como destino”. Como en Página 12 y el resto de las redacciones de los principales medios nacionales donde nos hemos unido y hemos salido a dar una lucha de conjunto por nuestras condiciones de vida. Porque nos han enseñado las Madres, la única lucha que se pierde es la que se abandona, y no nos vamos a resignar a que nuestros salarios caigan, a perder nuestros trabajos y las condiciones laborales. Vamos a seguir peleando en defensa del trabajo porque eso es pelear en defensa de la libertad de expresión”.
Evocó que en Télam, “luego de 119 días de paro y de una permanencia pacífica luego de haber conseguido el apoyo de distintos sectores de la sociedad consiguieron torcerle el brazo al gobierno de Cambiemos, al ajuste y obtener un triunfo en la justicia pero sobre todo un triunfo en las calles, con la movilización, rompiendo el terror, rompiendo el cerco, y haciéndoles saber al país que Télam se defiende, que los medios públicos son del pueblo, y que acá hay un gremio, una sociedad, unas organizaciones, un pueblo que está dispuesto a defender el derechos a la información. Porque, ¿saben qué compañeros? No nos callan nunca más”.
Para finalizar, Eliaschev explicó que en Página 12 “las notas salen sin firmas porque las compañeras y los compañeros están en lucha con la patronal que encabeza Víctor Santa María que tiene el tupé de hablar de justicia social y se niega a pagar una paritaria que ya de por sí es mísera dejando a los trabajadores sin poder pagar el alquiler y sin poder dar de comer a sus hijos. Si bien fueron los propios trabajadores los que defendieron el diario cuando el gobierno macrista quiso clausurarlo y meter presas a las autoridades porque había sacado una nota sobre el blanqueo de capitales, eso no quiere decir que se acepte la miseria y que se les mienta en la cara. Porque es mentira que no tiene plata.”
La intervención del secretario de Derechos Humanos del SiPreBA concluyó con el recuerdo a los 172 trabajadores y trabajadoras detenidos y desaparecidos por el terrorismo de Estado. Presentes. Ahora y siempre. “Y como dice Norita (Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora), venceremos”, cerró.