Los trabajadores de la educación llevamos durante el 2018 más de 16 jornadas de paros y otras tantas jornadas de lucha en búsqueda de recomposición salarial frente al abrumante robo que lleva adelante la burguesía nacional, via Macri, para satisfacer la entrega al Imperialismo Americano a través de la inflación, la devaluación y el “sinceramiento” de las tarifas. Pero nos hemos plantado no sólo frente al gobierno nacional, sino frente al provincial de Bordet- en defensa de las condiciones salariales, las escuelas, los institutos y las universidades públicas, en las cuales se han eliminado cursos, no construido edificios, subsidiando la privatización confesional, etc., todo esto confirmado con el presupuesto 2018 y ratificado para el 2019.
La reducción de los salarios estatales es parte del ajuste de caja requerido por el FMI. Porque, aunque digan lo contrario -se lo ha escuchado muy compungido al señor gobernador cuando habla de “ningún trabajador por debajo del salario mínimo”-, asimilan la política de ajuste nacional, la sostienen y el resultado de ello que podemos tener los trabajadores es sino “una situación mucho más ajustada que en el año anterior”. De eso se trata, del ajuste de los Gobernadores, sin cuya participación Macri y su banda no podría cumplir con las órdenes del FMI.
Hemos sufrido un año más de retroceso en los salarios y como del mismo subsistimos, de postergaciones de todo tipo que limitan innegablemente nuestra vida. Frente a esto, la burocracia gremial manifiesta que “los docentes perdieron “el 14,6 por ciento de poder adquisitivo” respecto al año pasado. Sencillamente esto que dice tan descaradamente el dirigente sindical y que a su vez es ratificado por el Plenario de Secretarios generales de Agmer, es una incriminación de la entrega del 15% del salario sólo el año pasado. A raíz de esto surge que “La condición necesaria para discutir salarios de 2019, es ponernos a tono con esa pérdida. Discutiremos cómo”. Y el “cómo” es “un posible acuerdo con el gobierno debe incluir cláusula gatillo”. Dicha cláusula –“Cláusula gatillo” sin más, sin ningún aditamento-ha sido aplicada rigurosamente el año pasado por el Gobierno ajustador de Santa Fe y demostramos en http://obreroypopular.org/content/documento-sobre-salario-docente-amsafe-agmer que las mismas son para bajar el salario, porque lo que sencillamente “ los docentes perdieron el 14,6 por ciento de poder adquisitivo” que entran en el pozo negro del reclamo burocrático en el CGE. Sino saquen la cuenta de lo que se viene perdiendo, digamos en las últimas dos décadas -y como para muestra sirve un botón-, el año pasado fue impuesto el cuento del “monitoreo de la inflación”, con la cual estuvimos esperando el “1,3%” de diciembre de 2017 que se pagó recién en enero de 2019. En este sentido se ratifica que por medio de un supuesto método de actualización se nos han ido reduciendo el salario real. Por importante que esto sea, no es más que una cuestión lateral a la determinación de la suma de la cual partirá cualquier actualización, porque la actualización de una miseria sigue siendo otra miseria. No nos cabe duda que la única y verdadera reivindicación salarial es el reclamo de un salario igual a la canasta familiar, es decir, de un monto suficiente como para adquirir la cantidad de medios de vida que alcancen para vivir sin las privaciones que corrientemente nos imponen.
En estos días en que hay muchas chicharras estridulando, escuchamos a mucho político PJ, mucho burócrata celeste-rojoynegro chirriar para desmarcarse de Macri y sin embargo hacen en definitiva el mismo canto. Entonces decimos que de esto se trata el ajuste de Macri, los Gobernadores y la complicidad de la burocracia, cantar cada uno en su árbol, pero cantar todos juntos por la gobernabilidad y la entrega. Por esta razón, al ajuste de la caja patronal hay que confrontarlo con la defensa de nuestro derecho a un salario acorde con nuestras necesidades, no con las pretensiones voraces del imperialismo y los capitalistas vernáculos. Y nuestra necesidad se refleja en la canasta familiar, que hoy ronda los $ 50.000
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SALARIO IGUAL AL COSTO DE LA CANASTA FAMILIAR, ACTUALIZACIÓN AUTOMÁTICA SEGÚN LOS ÍNDICES SACADOS POR LOS PROPIOS TRABAJADORES.
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ABAJO EL PACTO DE MACRI, LOS GOBERNADORES Y LA BUROCRACIA.
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POR UNA NUEVA ORGANIZACIÓN DE LOS TRABAJADORES CLASISTA, INTERNACIONALISTA, ANTIBUROCRÁTICA, INDEPENDIENTE DE LOS PATRONES, EL ESTADO Y LOS PARTIDOS DE LA BURGUESÍA.
2/02/2019
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