El actual párroco de la Iglesia Inmaculada Madre de Dios de Gonnet, Eduardo Lorenzo, fue denunciado por abuso sexual con acceso carnal agravado. Ex capellán general del Servicio Penitenciario Bonaerense y allegado al Arzobispado platense, Lorenzo deberá responder ante la justicia en la UFI 1 de La Plata donde todavía no ha prestado declaración por los hechos.
“Hace 11 años que tiene una causa penal y sin embargo está en contacto con menores”, comienza diciendo Belén Bartoli, la hermana de Julián, un empresario platense de 32 años que dio testimonio sobre el abuso sexual ejercido contra su persona por el cura Eduardo Lorenzo. El ex capellán del Servicio Penitenciario Bonaerense ya suma tres declaraciones en su contra sobre hechos ocurridos en diferentes parroquias de la ciudad de La Plata en el período 1990-2008.
Impulsada por la Red de Sobrevivientes de Abuso Eclesiástico de Argentina, la semana pasada se realizó en la sede de la CTA de los trabajadores de La Plata una conferencia que tuvo el testimonio de Julián, quien relató en detalle su traumática experiencia durante la adolescencia junto a Lorenzo, en la parroquia Nuestra Señora de Lourdes de la calle 20 y 38.
Allí, Julián, en coincidencia con las denuncias de otras víctimas, advirtió que Lorenzo “tiene como ´modus operandi´ hacer fiestas en quintas que él mismo alquila. A la noche siempre hay alcohol, nunca hay mujeres y siempre hay varones mayores y menores de edad. Yo habiendo sido invitado a una fiesta, él me manda a llamar a su habitación privada, y cuando entro, estaba semidesnudo exhibiendo su pene acostado en su cama, ¿qué les parece que esto genera en la psiquis de un chico? Al día de hoy no puedo acordarme qué pasó y qué me hizo”.
Belén señala que “el objetivo de la conferencia de prensa era decirles a todas las víctimas que han pasado por esa situación o que están pasando, que no están solos y que nosotros les creemos. Que somos un espacio de contención, que se acerquen”, dice al tiempo que reconoce que luego de la conferencia de prensa han recibidos muchos llamados de apoyo y también de gente que había atravesado situaciones similares.
“Si bien la justicia sigue la investigación, hubo una condena social tácita”, dice Belén y agrega “es tan clara la verdad que cuenta mi hermano que no deja dudas” en referencia al impacto que tuvo la noticia en los medios de comunicación.
Pero ese impacto implicó también que el arzobispo Víctor Manuel Fernández le haya escrito una carta a Lorenzo pidiéndole que «evite realizar cualquier actividad pastoral con menores de 18 años», sin embargo el cura continúa en funciones en la Iglesia Inmaculada Madre de Dios de Gonnet, ubicada en la calle 502 entre 15 y 16. “Por parte de la iglesia hasta ahora no ha habido respuestas. ‘Tucho’ Fernández como obispo de La Plata tiene la oportunidad de dar el ejemplo con esta situación que es insostenible”, señala Belén y aclara que “Si (Lorenzo) es tan inocente como dice serlo no le costaría nada dar un paso al costado de manera momentánea hasta que haya un dictamen formal”.
Belén recuerda dos llamadas puntuales: “Previo a que Julián declarara, sí llamó Eduardo Lorenzo a la casa de mis papás después de 20 años de no estar en contacto. Esa llamada fue grabada y está a disposición de la justicia. También, el día previo a que Julián Declare, Alfredo Gascón, que es el abogado de Lorenzo, llamó a mi papá. También está grabada esa llamada y está a disposición de la justicia”.
Eduardo Lorenzo todavía no fue citado a declarar en la causa en la que ya acumula tres denuncias en su contra. “Me llama la atención, que un cura que está al servicio de la gente tenga plata para pagarle a un abogado tan caro”, sostiene Belén. La Red de Sobrevivientes de Abuso Eclesiástico de Argentina lleva más de 68 curas y monjas denunciados en todo el país.
En el día de ayer, los y las vecinas de Gonnet pegaron afiches en las inmediaciones de la Iglesia con inscripciones «Lorenzo abusador. No te creemos», para alertar al resto de la comunidad sobre el cuidados de sus hijos e hijas.
La causa
La causa contra Eduardo Lorenzo comenzó el 25 de agosto de 2008 cuando el padrino de Diego (ex León), realizó la denuncia que recayó en la UFI 1 de La Plata a cargo de la fiscal Ana Medina. Bajo la carátula de abuso sexual con acceso carnal agravado, la causa fue archivada y recién volvió a reabrirse en marzo de este año con el aporte de dos declaraciones testimoniales: la de Julián y la de un testigo de identidad reservada.
Allí, se lo acusa a Lorenzo, quien fue confesor del sacerdote Julio César Grassi, de abusar sexualmente a adolescentes varones entre los años 1990-2008 en Olmos, el casco urbano de La Plata y Gonnet. Las familias de las víctimas no descartan que se sumen nuevas denuncias.
Diego, quien decidió hacer pública su identidad luego de la conferencia de prensa de Julián, era un chico que vivía en situación de calle cuando fue ingresado en un Hogar, en donde conoció a Lorenzo. “Fue muy triste verme sometido por este hombre en muchas de las brutalidades, como el abuso de todo tipo”, contó Diego por primera vez a los medios de comunicación y señaló que junto a Lorenzo “había perdido todos mis derechos”, “no podía decir que no para nada” y “la única salida que tenia era terminar con mi vida”.
En 2008, los padrinos de Diego denunciaron a Lorenzo tanto en la justicia penal como en el Arzobispado de La Plata, sin embargo la causa fue archivada y el cura sigue cumpliendo funciones en la parroquia de Gonnet. La causa se desarchivó el 25 de marzo de este año, gracias a la insistencia de Diego y su familia, que son patrocinados por Juan Pablo Gallego, el abogado que llevó adelante la causa contra el padre Grassi, condenado y encarcelado por abuso sexual infantil.
Fuente: http://www.andaragencia.org/el-cura-eduardo-lorenzo-acumula-denuncias-por-abuso-sexual/