Este sábado 29 miles movilizaron por las calles porteñas en solidaridad con el pueblo de Palestina y en repudio al intento de excarcelar a represores condenados por delitos de lesa humanidad. El acto pro-dictadura, custodiado por la Policía de la Ciudad, no juntó más de 70 personas, que se apuraron a retirarse antes que llegara la columna principal de la marcha.
Fotos: Nicolas Solo ((i))
La lluvia persistente, en momentos torrencial, no detuvo a la marea popular que se reunió en los alrededores del Congreso de la Nación para marchar hasta la Plaza de Mayo y expresarle que no hay tolerancia para la impunidad que pretenden, una vez más, los negacionistas y reivindicadores del terrorismo de Estado.
Estos, a pesar de haber estado durante un mes agitando con el acto pro-genocida, no lograron reunir más que un puñado de partidarios, unas 70 personas entre militares retirados y sus familiares. Los trolls afines intentaron dibujarla luego con fotos con encuadre cerrado, sin mucho éxito.
La Policía de la Ciudad montó uno de esos operativos desproporcionados con los que Jorge Macri demuestra su sumisión ante los protocolos antiprotesta dispuestos por el gobierno nacional, instrumentados por la ex ministra Patricia Bullrich, recién asumida como senadora. Sin embargo, no hubo mayores actos de provocación, a diferencia de marchas anteriores.
Mientras la marcha avanzaba desde el Congreso, un grupo de activistas de varias organizaciones políticas y de derechos humanos se había adelantado para hacer sentir el repudio en Plaza de Mayo.
También allí, la Policía de la Ciudad desplegó un operativo y protegió al grupo de partidarios de los genocidas.
Cuando la columna principal se acercó, los mismos efectivos les pidieron que se retiraran.
Luego, se realizó un acto con varias intervenciones, entre las que se contaron las intervenciones de Adallah El Tibi, palestino que vive en Buenos Aires, que señaló que “el genocidio continúa y la ocupación también”, y la lectura de documentos del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia y del Comité en Solidaridad con el Pueblo Palestino, que compartimos más abajo.
Fotos: Indymedia Derechos Humanos
Hablamos con Luna Roja, activista que fue parte del grupo de primera línea que repudió al acto pro-genocida en Plaza de Mayo, para compartir un balance sobre la jornada.
“Ellos niegan el genocidio. El genocidio es innegable, hay demasiada memoria que hemos construido estos años como para que alguien pueda negar el genocidio”.
Indymedia: – ¿Cómo fue el repudio al acto por la impunidad de los genocidas que se realizó este 29 de noviembre? ¿Cómo actuó la “primera línea” en Plaza de Mayo y cómo se construyó la marcha principal del Encuentro y otras organizaciones?
Luna Roja: – El repudio al acto del veintinueve de noviembre expresa una solidaridad de clase enorme, porque se pudo hacer converger a todos los sectores que están en la calle, que están en lucha, en una misma acción de unidad por la jornada internacional por Palestina, y al mismo tiempo, por la urgencia que tenía el Encuentro Memoria Verdad y Justicia, por repudiar todo intento de avance en la calle de los milicos. En ese sentido, se buscó coordinar las dos acciones, se hizo un pañuelazo a continuación de la marcha como tal como se viene haciendo de Congreso Plaza de Mayo, y hubo sectores que estuvieron en la primera línea, estuvieron atentos a la llegada temprana de los genocidas, buscando cuidar los pañuelos que están en la pirámide de Plaza de Mayo, evitando que el acto de los milicos se haga ahí. Y bueno, concretamente esperando al masivo que dada la lluvia, dado el temporal, bueno, llegó algo más tarde.
((i)): – Parece que el acto por la impunidad de los genocidas fue muy débil, finalmente, y no sólo por el clima, porque la marcha en repudio fue grande. ¿Cuál es tu balance?
LR: – El acto por la impunidad de los genocidas, no solo que fue débil, sino que fue bastante cagón. Si bien estaba convocado a las cuatro de la tarde, a las tres y media ya estaban formados a una cuadra de Plaza de Mayo, con una bandera argentina, algunos milicos de fajina. Por las edades, nos podemos dar cuenta que eran de mando medio para abajo de esa época, que siguen teniendo una convicción ideológica, de hecho tenían una bandera reivindicando el Operativo Independencia.
No hicieron intentos serios de ir a la Pirámide de Mayo, si bien tenían todo un caminito trazado por la policía para lograrlo. La policía los condujo atrás de las vallas y les dejó la valla del medio abierta apuntando a la Pirámide. La realidad que les compañeres que estábamos ahí no lo permitimos, haciendo todo lo posible al mismo tiempo por no caer en en provocaciones. Y ellos hicieron como pudieron su acto, lo más cerca de la Plaza de Mayo que pudieron, cuidados por fila de policías, de tortugas, y nosotros pateándole las vallas y cantándoles milicos asesinos.
La verdad que en su mejor momento, casi sin juventud, eran unas setenta personas, y si bien era poquita la gente que estaba del otro lado de las vallas, la columna que llegó después tenía, yo diría la misma cantidad de gente que la última marcha de Palestina, y eso es un montón, dado la lluvia. O sea, que nosotres hemos convocado más que veces anteriores, porque efectivamente siempre la lluvia hace que haya menos gente, más en una marcha de Congreso a Plaza de Mayo, lluvia fuerte, de hecho estábamos calados hasta los huesos, y la verdad que hubiese sido muy interesante poder hacer realmente el Pañuelazo en la cara de este sector.
Así que diría que mi balance queda trunco, porque hay una potencialidad ahí que hemos desaprovechado, más que nada por el mismo clima, creo yo, que estábamos esperando que lleguen compañeros a Congreso para arrancar, que discutíamos, qué hacer en un lado, en el otro. Digo, en la Plaza de Mayo también, se hicieron algunas rondas esperando a la columna, fue lo que fue, pero creo que no nos va a volver a pasar, porque está dado el primer paso y está dado el gesto de solidaridad enorme de todos los sectores que tuvieron la lucidez política de ver que no siempre iban a ser trolls por las redes, y aunque Villarruel no lo ponga en sus redes, hay sectores que buscan negar el genocidio, que buscan la libertad de los milicos. Y hoy lo que podemos hacer balance, que es la izquierda, la que está enfrentando esto, es la izquierda y los sectores que se solidarizan con Palestina, algunos del campo popular, del campo peronista, pero lamentablemente sin sus dirigentes, que la verdad que han colaborado con el sionismo a través de Wado de Pedro, por qué habrían ahora de de marchar por Palestina, ¿no es cierto? Así que cerrando el balance es que hemos aprendido mucho.
((i)): – ¿Cuáles son los puntos de contacto entre el repudio al genocidio sionista en Palestina y el repudio a la impunidad de los represores de los 70 que confluyeron en la marcha de este sábado 29?
LR: – Los puntos de contacto son todos, entre un genocidio y el otro, por eso la reivindicación. Tenemos que entender que el genocidio son una serie de técnicas articuladas que la burguesía ha empleado durante el siglo XX, reciclando cuestiones, obviamente, del pasado. Podríamos ir hasta Colón, ¿no es cierto? Y podríamos pasar por la “Conquista del Desierto”, pero no sólo en Argentina, sino también en todos los países del Abya Yala.
Y en el siglo XX concretamente, la Escuela de las Américas, que mamó de toda la experiencia del ejército francés en Argelia. Básicamente instruyó a militares a lo largo y ancho de nuestra Latinoamérica a hacer genocidios. Eso fue el Plan Cóndor. Por eso había una articulación internacional en la que compañeres argentinas podían desaparecer de Uruguay, compañeros uruguayos en Argentina, en Chile, Paraguay.
Esa coordinación estuvo, esas técnicas estuvieron, y yo estoy diciendo que se aprendieron en Francia, bueno, todos los países colonialistas las han usado, y el sionismo ha aprendido a ser colonialista. Su balance de lo que llaman el Holocausto es que, básicamente, que ellos tienen que ser los perpetradores y los únicos que se instalen en su tierra santa. Y es tristísimo, pero es lo que es, y sitúa lamentablemente en plano de igualdad a un sector muy amplio del hermano pueblo judío, al sector que apoya al sionismo. Y que quede muy claro, no es lo mismo sionismo que judaísmo. En este momento repudiamos el sionismo, que es el genocida.
((i)): – ¿Cómo pensás que sigue la lucha contra estos intentos de la ultraderecha de construir una lógica que es a la vez negacionista y reivindicatoria del accionar de la dictadura militar genocida?
LR: – Y hay que discutir política, me parece. Ellos niegan el genocidio. El genocidio es innegable, digo, hay demasiada memoria que hemos construido estos años como para que alguien pueda negar el genocidio.
Pero la reivindicación de la dictadura militar es la reivindicación de un actor político. Y eso hay que delinearlo, señalarlo, mostrar que ese es el enemigo, y para eso uno tiene que construir un actor político que esté mirando a ese actor.
Ojo, la apuesta es de muchos sectores, porque no es que este sector está directamente apoyado por la Libertad Avanza como un bloque homogéneo, no, ellos son una bolsa de gatos, todos colgados de las tetas de Estados Unidos. Este es el sector que nada encima en la contradicción de querer un poquito de la teta de Estados Unidos mientras canta el himno nacional y se dice patriota.
Nosotros tenemos que discutir en todo caso qué es lo que ellos están queriendo reivindicar. Y eso se puede escuchar en sus propios discursos, hoy lo dijeron muy claramente, que no hay genocidio, que como dije es innegable, sino lo que ellos hicieron fue luchar contra un sector que quiso tomar el poder.
Bueno, quizás hay que pensar por qué luchaban los 30.400 compañeros detenidos desaparecidos, qué poder querían construir, para qué, y eso es discutir política. Y a partir de eso, guiar nuestra agenda reivindicatoria de una manera que no sea sólo reaccionando ante los bombazos que nos tiran de arriba, sino en función de una construcción de poder.
((i)): – Decinos lo que quieras agregar.
LR: – Nada para agregar, solo que venceremos.
Documento del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia
CABA, 29 de noviembre de 2025
Desde el Encuentro Memoria Verdad y Justicia (EMVyJ), levantamos nuestra voz para hacer oír el más enérgico repudio al genocidio contra el pueblo palestino. Genocidio que lleva adelante el Estado Sionista de Israel desde hace muchísimo más que dos años, ante la mirada indiferente o cómplice de la mayoría de los gobiernos del mundo. Este genocidio se constituye como herramienta para la supresión colonial, a través del desplazamiento poblacional, la limpieza étnica y la ocupación de los territorios, desplazando a quienes les pertenece que por derecho propio: el pueblo palestino. Hoy, día internacional de solidaridad con ese pueblo expresamos nuestro apoyo a la Resistencia en todos los territorios palestinos ocupados.
También nos convoca en esta emblemática Plaza, que guarda gran parte de la memoria de la lucha de nuestro pueblo, un definitivo y contundente rechazo a toda manifestación de apoyo o pedido de libertad para los genocidas de nuestro país. Ellos son los responsables de los secuestros, tormentos, asesinatos y desapariciones de les 30 mil militantes populares detenides desaparecides que, en la década del 70 enfrentaron con decisión y coraje el plan económico que el imperialismo y sus servidores locales planificaron para argentina y para gran parte del continente.
En este momento, en el que el gobierno de Milei y Villarruel promueven políticas obscenas de negacionismo y más aún, de directa apología del genocidio decimos: ¡¡Los pañuelos de quienes luchan por Memoria Verdad y Justicia son los blancos de las Madres!!! y el único lugar para un genocida acá, en Palestina, y en cualquier parte del mundo es la cárcel común, perpetua y efectiva. La plaza de mayo es de las luchas populares, de las Madres de Plaza de Mayo que la habitan desde 1977 cada jueves y NO es un espacio para reivindicar la impunidad. Ellas nos marcaron un camino que desde el movimiento de derechos humanos sostenemos. No vamos a claudicar, ni permitir que se arrebate ni ensucie y seguiremos exigiendo la desclasificación y el acceso público a los archivos de la represión que comprenden el período de 1974 hasta 1983.
Por todo esto les convocamos a levantar bien alto sus pañuelos blancos mientras gritamos :
30 mil detenides desaparecides Presentes !!
Palestina vencerá desde el río y hasta el mar!!
Cárcel común perpetua y efectiva a los genocidas de todos los tiempos !!
Documento del Comité Argentino de Solidaridad con el Pueblo Palestino:
El genocidio continúa, la lucha también
No al plan colonial de Trump y Estados Unidos para Gaza
Cárcel a los genocidas de ayer y de hoy
A pesar del cese al fuego que debía entrar en vigor el 10 de octubre, el Estado de Israel continúa atacando al pueblo de la Franja de Gaza. Más de 300 personas fueron asesinadas desde entonces y al menos 1.500 edificios destruidos. La ayuda humanitaria, solo ingresa a cuentagotas, debido a la continuidad del bloqueo israelí, por lo que sigue haciendo estragos el hambre. A su vez, las tropas israelíes permanecen apostadas dentro del territorio costero.
En medio de este terrible panorama, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobó el lunes 17 de noviembre una resolución que convalida el plan colonial diseñado por el gobierno de Donald Trump para Gaza. El cual establece una junta de gobierno (mal llamada “Junta de Paz”) que tendría al mismísimo Trump al mando y una fuerza de ocupación internacional (mal llamada “Fuerza Internacional de Estabilización”) con poderes hasta fines de 2027.
Mientras se busca imponer este protectorado colonial en Gaza, se incrementan los ataques de las bandas de colonos armados en Cisjordania, donde el gobierno israelí prepara la puesta en pie de un nuevo asentamiento llamado E1, que la dividirá una vez más en dos, de norte a sur, poniendo fin a la continuidad territorial en lo que conocemos hoy como Cisjordania y Jerusalén Este.
A su vez, esta semana Israel bombardeó Líbano, rompiendo, una vez más, otro acuerdo de paz. A todos estos hechos, se suma la presencia militar israelí y las agresiones armadas contra Irán, Yemen, Siria y Qatar, demostrando que el verdadero agresor en la región es el Estado sionista, y no el pueblo palestino, que lucha por su derecho a la liberación y autodeterminación.
El gobierno argentino, alineado con Estados Unidos e Israel, recibió a principios de semana al canciller israelí Gideon Sa’ar con el fin de fortalecer las relaciones bilaterales entre ambos países, en este marco el presidente Javier Milei anunció que Argentina trasladará su embajada a Jerusalén el año que viene y que él viajará para su inauguración.
Repudiamos el alineamiento del gobierno argentino con el Estado de Israel y la complicidad en el genocidio y limpieza étnica del pueblo palestino. Rechazamos la persecución política y judicial contra quienes denuncian el genocidio en Palestina, como Vanina Biasi y Alejandro Bodart, les docentes Federico Puy y Ana Contreras y el jubilado chaqueño Daniel Vera.
Este 29 de noviembre, día internacional de solidaridad con el pueblo palestino, somos miles movillizándonos en todo el mundo. Esta jornada viene precedida de grandes manifestaciones globales, paros obreros de solidaridad (como los de Italia y el Estado Español) y valientes acciones, como la de la flotilla global Sumud que intentó quebrar el bloqueo a Gaza. Defendemos la solidaridad con el pueblo palestino como solidaridad efectiva, como responsabilidad de todes, poniendo el cuerpo y movilizándonos.
Y en esta jornada de lucha, en esta Plaza que es la Plaza de las madres, las abuelas, la lucha por los Derechos Humanos, repudiamos el acto negacionista del genocidio perpetrado por la última dictadura cívico militar.
Rechazamos la provocación del gobierno de Milei que designa al militar general Presti, Jefe del Estado Mayor del Ejército, al frente del Ministerio de Defensa, una provocación contra la lucha por los derechos humanos.
En este acto gritamos con fuerza ¡no olvidamos, no perdonamos y no nos reconciliamos!
Fueron 30 mil y fue genocidio.
El genocidio continúa, la lucha sigue.
Por eso decimos:
No al genocidio del pueblo palestino y a la persecución de quienes lo denuncian
No al plan colonial de Trump
Cárcel a los genocidas de ayer y de hoy
Fuera las tropas israelíes de Palestina, Siria y Líbano
Boicot, desinversión y sanciones contra Israel
Ruptura de relaciones diplomáticas, comerciales y académicas con Israel
Fuera Mekorot de Argentina y Palestina.
Viva la resistencia del pueblo palestino
COMITÉ ARGENTINO DE SOLIDARIDAD CON EL PUEBLO PALESTINO
Por una Palestina libre del río al mar