La estrella de la esperanza
En una libretita Víctor Jara escribió su última letra que no llegó a canción: "Canto que mal que sales cuando tengo que cantar espanto. Espanto como el que vivo, espanto como el que muero". Después, sus torturadores saltarían sobre sus manos y se las quebrarían por completo. Creyeron que lo habían callado.
Por Silvana Melo (APe).-
Cincuenta años después de la crueldad inmensa de su muerte, la justicia anduvo poniendo penas largas para los asesinos de Víctor Jara. Aquel hombre de 40 años que vio caer a Salvador Allende y supo que era el principio de una oscuridad infinita, de sangre y mordaza. Aquel que cantó la vida de los pobres y los imaginó cielo de una pirámide invertida. No se lo perdonaron. Y el 16 de septiembre de 1973 le destinaron 44 balazos para poder matarlo....