Heroicas huelgas patagònicas.
Por EL MILITANTE -
Wednesday, Jun. 08, 2005 at 9:35 PM
EL MILITANTE - Versíon
para imprimir | |
Las heroicas huelgas patagónicas |
|
Autor : Marcelo
García Fecha : ( 08-Junio-2005 ) Categoria : Movimiento
obrero
|
a
clase obrera de la Patagonia Argentina viene protagonizando una
serie de luchas históricas que sacuden a las sociedades de las
provincias del extremo sur del país. Con el templado espíritu de los
peones rurales que efectuaron la Patagonia Rebelde, los obreros y
los trabajadores de Santa Cruz y Chubut han dado claras muestras de
que están dispuestos a luchar por su dignidad.
Por
Marcelo García. Periodista e investigador
La alta conflictividad social que se viene
experimentando en todo el país no escapa a la Patagonia Argentina.
Los obreros y los trabajadores ocupados y desocupados han iniciado
una oleada de luchas casi sin precedentes en las provincias del
extremo sur del país.
Los 37 días de huelga de los
obreros de la pesca en Chubut y los casi 50 días de los trabajadores
municipales y provinciales de Santa Cruz son una demostración más
que en la Patagonia no todo funciona como los gobernadores y el
Estado Nacional se empeñan en expresar.
Los salarios
siguen estando en niveles bajísimos, mucho más aún si se tiene en
cuenta que los estándares de vida patagónicos han tenido incrementos
descomunales. Por ejemplo, los precios de la canasta familiar en
Comodoro Rivadavia (ciudad más importante de la Patagonia) están
entre un 40 y un 50 por ciento por encima de los resto del país. Si
a esto se le suma que para vivir en las frías tierras del extremo
sur de la Argentina hace falta más luz, más gas, más leña, más
kerosén, más alimentos con potencial calórico, etc.; el nivel de
vida se hace casi inalcanzable para cualquier trabajador.
Aunque inconscientemente, los trabajadores
patagónicos han retomado el ejemplo de los peones rurales de la
histórica Patagonia Rebelde y se pusieron en pié de guerra contra
estos gobiernos y patronales opresoras que pretenden seguir pagando
lo mismo que hace 10 o 15 años atrás.
Las importantes
huelgas patagónicas bien pueden ser divididas en dos grandes actos,
aunque mucho de lo que hoy sucede tiene que ver y tuvo sus
antecedentes en el paro que los trabajadores petroleros
santacruceños realizaron en marzo del 2004, que se extendió por casi
un mes, y que le torció el brazo a las multinacionales del sector.
El aumento de 260 pesos en concepto de ayuda
alimentaria que obtuvieron los petroleros de santacruceños hace un
año, hoy es el motivo por el que los petroleros chubutenses han
iniciado un plan de lucha. Porque aunque Chubut y Santa Cruz son
provincias vecinas y los trabajadores petroleros desempeñan
funciones indistintamente en ambas provincias, las petroleras le han
negado a pagarle a los petroleros de Chubut la cifra que sí abonan
en Santa Cruz.
Buena parte de estas peleas también
tuvieron sus inicios junto a los constantes y continuos cortes de
ruta de los desocupados chubutenses y santacruceños que en casi toda
la cuenca petrolera del Golfo San Jorge conquistaron más de 1.000
puestos de trabajo genuinos y pagaron el precio de seis piqueteros
presos, hoy liberados, en Santa Cruz.
Primer acto
En el orden cronológico inverso, por estos días
de junio se viene desarrollando uno de los mayores paros estatales
de la historia de la provincia del presidente Néstor Kirchner. A
punto de cumplir 50 días de lucha (las protestas escalonadas se
iniciaron sobre finales de abril) los estatales provinciales y
municipales de casi toda Santa Cruz son parte de luchas que se han
extendido a casi la totalidad de la provincia y que en algunas
localidades del norte santacruceño se han convertido en verdaderas
puebladas, tal es el caso de Pico Truncado y Caleta Olivia.
Reclamando un aumento en los sueldos básicos los
municipales caletenses iniciaron un plan de lucha escalonado que
terminó desencadenando un paro por tiempo indeterminado en Caleta
Olivia al que se sumaron localidades como Pico Truncado, Las Heras,
Los Antiguos, Perito Moreno, Puerto Deseado, San Julián, etc. En
fin, la casi totalidad de las localidades del norte y el centro de
Santa Cruz son parte del paro y los múltiples cortes de ruta que
estallaron en la provincia.
En la mismísima casa del
presidente Kirchner se inició una de las huelgas más profundas y
duras de los últimos tiempos en la Argentina, pero claro que se
trata de la provincia que fue gobernada por el actual primer
mandatario nacional y es este motivo suficiente como para que el
conflicto no sea cubierto por los grandes medios de prensa y sea
minimizado cuando se habla de estos laburantes patagónicos.
Los empleados estatales y municipales piden un
aumento de 200 pesos al básico porque están cansados que los
incrementos salariales sean en negro y que luego de una larga década
kirchnerista más del 70 por ciento de sus salarios esté por fuera
del básico y sea parte de los aumentos no remunerativos o parte del
presentismo.
El gobierno de Sergio Acevedo, ex
vicegobernador de Kirchner y ex secretario de la SIDE, se ha
mantenido intransigente ante los reclamos de los trabajadores y se
ha cansado de acusarlos de ser partícipes de una interna política
del justicialismo. Desde que Acevedo llegó a la gobernación de Santa
Cruz se rumorea que está enfrentado con el presidente.
Aunque el tiempo pasa, los trabajadores siguen
fuertes en su pelea y lejos de debilitarse cada día que pasa están
más fuertes. El primer viernes de junio, a los 40 días de iniciado
el paro, en Caleta Olivia se efectuó una movilización sin
precedentes que reunió a casi 10.000 personas. De la misma tomaron
parte los trabajadores en huelga, los comerciantes y hasta las
mujeres de los efectivos policiales, quienes dicho sea de paso se
negarían a reprimir a los huelguistas.
Como si todo
esto fuera poco en Pico Truncado se produjo un paro cívico al que se
sumó la casi totalidad de los habitantes y la jueza de instrucción
(Ruata de Leone) debió negociar con los estatales piqueteros un
cronograma de apertura de los cortes de ruta y fue así como logró
que cada ocho horas se permita el tránsito durante 30 minutos.
Para desprestigiar la lucha de los trabajadores en
las primeras horas del martes 7 de junio se especula que las
autoridades municipales de Caleta Olivia instalaron un artefacto
explosivo en la Municipalidad que causó serios daños y rápidamente
culparon a los huelguistas del “vandalismo”.
Segundo acto
La otra contienda
salarial significativa de la región la han protagonizado los
trabajadores de la pesca de la provincia del Chubut. Luego de 37
días de huelga, los fileteros (denominación que reciben los obreros
que industrializan los filetes de merluza) consiguieron a finales de
mayo un triunfo histórico: incrementaron la hora de trabajo en un 80
por ciento y consiguieron que las empresas del sector firmen un
acuerdo para abonarles una garantía horaria que significa percibir
un salario mínimo de casi 1.300 pesos más allá de la materia prima
que haya para procesar.
La lucha de los fileteros de
Puerto Madryn, Rawson y Comodoro Rivadavia fue durísima y debieron
soportar la embestida de las grandes empresas pesqueras nacionales y
de las multinacionales del sector. Hasta la embajada de España en la
Argentina intervino extraoficialmente para defender los intereses de
los empresarios pesqueros de la península ibérica.
Los obreros de la pesca lucharon a brazo partido,
cortaron el tránsito en los tres puertos del Chubut, tomaron
municipalidades y marcharon los más de 70 kilómetros que distan de
Puerto Madryn, en la costa chubutense, a la ciudad capital de
Rawson.
Tras cinco semanas de huelga consiguieron el
aumento que reclamaban y le marcaron el camino al resto de los
trabajadores del Chubut y la región. En medio del conflicto de la
pesca se produjo una huelga de la CTA y la CGT chubutense en
solidaridad con los fileteros, lo que se transformó en un hecho
histórico para la región.
La mayoría de los obreros
del sector concluyó su contienda a finales de mayo, pero los
trabajadores de la empresa Barillari aún siguen con su huelga ya que
esta pesquera se ha negado a pagarles los aumentos conseguidos y es
por eso que los puestos de Comodoro Rivadavia (en Chubut) y de
Caleta Paula (en Santa Cruz) siguen paralizados por los reclamos aún
no resueltos.
Mientras estos incumplimientos se
suceden los gobiernos de las provincias de Chubut y Santa Cruz no
han tomado ni una sola medida contra Barillari. Los gobiernos
provinciales son los que otorgan los permisos de pesca a las
empresas privadas para realizar las capturas en sus aguas
jurisdiccionales y ante esta situación ninguno de los dos Estados ha
suspendido o quitado estas autorizaciones de pesca.
| |
argentina.elmilitante.org