Santa Victoria Este (Enviado Especial). A esta altura del año ya comienza a sentirse el calor aplastante del trópico norteño en Santa Victoria Este. Es un lugar donde amanece muy temprano. Alrededor de las 7 de la mañana el sol inicia su abrumador e implacable recorrido. Aquí, en el Nordeste de la Provincia, de Tartagal a unos 120 Km al fondo de puro camino de inquietante tierra suelta, con un pobre panorama desolado de churquis, algarrobos viejos y secos, despuntan como raro atisbo, ciertos colores pintados por la inminente Primavera.

Por el momento allí viven unas 6.000 indígenas de las etnias wichí, chorote, chulupí, toba, tapieté, entre otras cumunidades.

Apenas asoma agosto el panorama ciertamente se enriquece porque aparecen por sobre los grises árboles medianos de espinas, blancos de la tierra.

Como contraste, entre los "churquis" sobresalen los lapachos, de incipientes flores rosadas, amarillas y blancas. Puede sentirse también en el aire el perfume del Palo Santo mezclado entre fuegos permanente de las chimeneas de las plantas gasíferas Tecpetrol, Pluspetrol o Refinor. La plantas están cerca, a unos 80 Kilometros de Santa Victoria Este.

El gran Algarrobo es un árbol apreciado por su sombra y frutos. A sus pies los indígenas ubican sus chozas de hojarascas y techo de barro. Allí aún sobreviven, temerosos de los "afuereños": las mujeres están hilando o tejiendo el chaguar, cuidando a sus hijos, y los hombres cazando, pescando o moldeando artesanías de palo santo.

Saben que el implacable "progreso" está a las puertas de lo poco que queda de sus comunidades aborígenes que rodean al pueblo criollo de Santa Victoria Este.

Oro negro y oro verde

El panorama es desolador para cualquier capitalino común que observa una superficie -en apariencia- de monte degradado y poco productivo.
Bajo tierra, en sus entrañas, subyace la riqueza codiciada: una gasíferas y petrolíferas que está entre las más ricas del país y de Sudamérica.

Mientras viajamos por el polvoriento camino con destino al pueblo de Santa Victoria Este, cualquiera podría preguntase: ¿quién quiere venir a vivir aquí?. ¿por estas tierras desiertas de clima seco hay tanto problema?. Pero pensar así es una grave equivocación.
Sobre esta tierra está la riqueza vegetal de progreso rápido para el agricultor inescrupulos: la siembra de la degradante soja, un cultivo nutritivo como pocos, planta adoradora del sol, altamente cotizada en los mercados, que crece sola y no necesita mucha mano de obra.

La situación para los indígenas de la zona no es fácil. La pobreza, el hambre, la marginación, los mantiene postrados en el olvido. Y no les queda otra que esperar.
Los caciques entrevistados por Salta Libre dicen que esperan que la Justicia impida el Referéndum, y elevan sus ruegos para que los espíritus de sus antepasados estén presentes para darles fuerza para torcer el destino y poder seguir viviendo del sustento de su Pachamama.

Esperanza en la Justicia

Los caciques reunidos por el INAI (Instituto Nacional de Asuntos Indígenas) y la mayoría aún nucleados en la Fundación Lhaka Honhat ("Nuestra Tierra"), están confundidos por la acción de un Gobierno que debiera regirse por las leyes, pero que no lo hace. Y esperan el resultado de los recursos presentados a través del CELS.

La esperanza y la preocupación está montada en la dura realidad social y económica del ser indígena que debe seguir conviviendo, ya no sólo con la desnutrición, la desprotección estatal, el aislamiento de los niños, el avasallamiento y la explotación, sino también con la usurpación, la venta sistemática de sus territorios y el atropello ilegal de los estados a favor de políticos, funcionarios, folcloristas famosos o empresas multinacionales.

 Filiberto Barbieri, cacique

Ahora Filiberto Barbieri es uno de los caciques con más rango dentro del INAI. Lo eligieron delegados de diversas comunidades indígenas de Rivadavia. "Aquí lo que se ve es siempre el problema del Gobierno con Lakhat Honhat -explica-. Ahora también nuestros propios paisanos están como una delegación del gobierno. Hay gente que tiene personería jurídica, esto hace que todos estemos dividos". Filiberto dice que va a tratar de unir a todos para no hacer lo que el gobierno quiere.

 Francisco Pérez, cacique más de 30 comunidades

El Cacique Francisco Pérez de la Fundación Lakha Honhat informa que tenían la oportunidad declarar nula o rechazar la votación en el Concejo Consultivo del INAI, pero que no lo hicieron. "La Ley dice que tienen que votar sólo los caciques y en la reunión en Tartagal votaron todos, hasta los amigos y acompañantes. Ahora los elegidos van a trabajar para el referéndun, lo que no saben es si el INAI va a permitir eso". Afirma que cada vez están mas divididos. Pérez representaba a una 40 comunidades de Rivadavia. Ahora dicen que son 30 las comunidades que lo apoyan. Todos esperan el resultado de la presentación del CELS, para ver si es referéndum se puede evitar.

"El gobernador sigue insistiendo en que firmemos su propuesta. Dos veces insistieron. La segunda vez, fueron el Sr. Luciano Tanto y Sonia Escudero.
Ellos intentaron que firmáramos esa propuesta. Era un alto de papeles como un libro, elaborado por su grupo de trabajo. Nos decían: "Ustedes Tienen que firmar y aprobarlo, luego se corrige. Pero nosotros no teníamos confianza en esas correcciones".

Respecto a la Ley del Referéndum subrayó: "Qué vamos a hacer si es una ley. No sé si va a ser fácil anular esta ley. Lo que sabemos es que se envió un documento a la Justicia. El CELS, presentó un recurso de amparo. Y bueno, estamos esperando eso. La Justicia dirá si eso se va a anular o no".

 Valentino Díaz, cacique.

"El Referéndum que quiere el gobierno, nosotros no queremos. Se quiere confundir. Siempre es político. No se puede confundir así. Que no se haga el referéndum, es una posición de la mayoría de las comunidades. Muchos quedamos en acuerdo. El trabajo será hablar con todos sus hermanos para que este referéndum no se haga", dice en su entrecortado castellano Valentino Díaz, caique de la comunidad Puntana. Luego con cierto lamento dijo: "Yo no entiendo. Hay paisanos que hacen lo que el gobierno quiere. Esos pedazos no sirven para nada. Los criollos siguen alambrando. ¿El paisano que pide?. Nada más que lo que nos pertenece. Si recibimos estos pedacitos cuando se acabe la madera qué vamos a hacer..."

"No estamos de acuerdo con el referéndum porque confunden, quieren confundir. Además que el gobierno no tiene por qué preguntar. Las cosas como deben ser ya están en las leyes. Lo que tiene que hacer es entregarnos porque eso ya está así".

"El gobernador, engaña al pobre paisano, y eso no es bueno. No se qué les da. No se qué hace. Le da plata, bolsones y ya están conformes. Esos paisanos que no están a favor nuestro. Yo quiero que todos unidos pidamos territorio para nuestros hijos para el día de mañana".

"El gobierno tiene que entender. Esa es la preocupación nuestra. El quiere hacer las cosas a su manera y que no agradamos, porque el quiere darnos lo que no pedimos. Conozco porque el siempre hace eso".

"Viene con no se qué... viene con plata, viene como comprando personas que no entienden. Y lo reciben, y se conforman con eso. Yo vengo de Puntana, comunidad muy grande. Y bueno, ahora nosotros estamos muy preocupados por este problema. ¿Qué quiere el hermano gigante?. Nosotros no sabemos, somos gente Wichi, no entendemos bien lo que son las leyes".

"Yo niego hacer negocios, dependemos de cultura, es mi descendencia. Ahora tenemos paz porque hemos formado una organización, porque antes teníamos problemas entre chorotes, tobas, y otras etnias y entre nosotros Wichis, llenos de problemas. Ahora nosotros hemos buscados nuevas formas de vida, con nuestros jóvenes y ancianos. Nosotros estamos dentro de una organización. Lakha Honath, (nuestra tierra) es de todos, no es de nadie. Nosotros vamos a defender porque este pedazo es último. Si el gobierno nos hecha entonces, entonces, la otra banda del otro lado del Rio Pilcomayo ya pertenecen a Bolivia y Paraguay. Acá nosotros queremos vivir o morir en esta nuestra tierra Argentina y punto. Así lo vemos nosotros. Nos están empujando al otro lado".

"El gobierno maniobra. Usa otras personas que no son descendientes de caciques para quitarnos la tierra. Ahora tenemos otros problema que hay que votar a "si" o "no". Yo creo que nunca hemos visto. Creo que tiene que cambiar la cosa porque nosotros estamos muy firme. Nosotros trabajamos juntos, muy limpio. El gobierno dice que ha hablado con otras personas que son caciques, pero no son caciques... son elegidos del señor Romero, están en el IPPIS. Entonces no nos conviene. Estamos por no aceptar el referéndum. Ya tenemos los papeles hechos ya en la Justicia. El gobierno ha pedido un gran estudio. Se hizo mapas, historia, un montón de papeles, con número y detalles. La ley tiene que intervenir y ellos aceptar".

 Felipe Segundo, Cacique

"Yo tengo casi 34 años y 11 años estoy trabajando con ancianos, mis abuelos y papás. Yo estoy viendo que está grave lo que está haciendo el gobierno de la provincia de Salta, Juan Carlos Romero. Muy grave... porque desde que nosotros empezamos la lucha de las tierras cuando el gobierno ve que nosotros estamos organizados..."

"Lo que quieren entregarnos son lotecitos, que no nos sirven para nada. Nosotros vivimos todavía del monte y de la pesca. Esto yo lo digo como una historia. Mas antes habíamos tenido montes lindos. Ahora lo que no vemos es agua, antes había muchísima agua. A uno de nosotros como indígenas, si nos hacía falta de comer, nosotros salíamos de la casa, campeábamos mas o menos unos 30 a 60 kilómetros; entonces si se quedaba en el monte había agua".

"Todos los papás de nosotros y nosotros mismos, también sabemos que habían lindas lagunas por ahí en el monte. Esas aguas no se acaban, pero ahora, lo que nos perjudica mucho son los ganaderos, los afuereños, los que tienen sus animales. Ahora están a nombre de chaqueños, ellos. Pero no son chaqueños, son afuereños. Ven un monte lindo, una laguna linda y empiezan a alambrar. Y van a la gobernación y le presiona al gobierno. Le dicen yo tengo mil o ochocientas cabezas, chivos, chanchas, yo necesito estos lugares. Eligen las partes más buenas, la que tienen el agua, la que hay un algarrobo lindo. Donde nosotros vivimos. Entonces cuando uno de nosotros va a campear, ya no puede porque es una tierra privada. ¿Ahora que tenemos que hacer nosotros?: trajinar, cinco o diez litros de agua para salir de la casa. ¿Entonces como se puede?. Ya está privada todo donde nosotros vivíamos. Cuando llega el tiempo de la fruta de algarrobo, ya no podemos entrar a esa parte linda, donde hay muchos algarrobos, porque ya está alambrado y el gobierno les acepta su solicitud, y les da títulos también".

"Cuando el gobierno sabe que nosotros en el lote 55 y 14 ya existíamos, que es de los pueblos indígenas, pero él sigue dando parcelamientos, sigue aceptando solicitud y sigue dando títulos a los afuereños. Y no son válidos".

"Yo creo que el gobierno no está pensando de nosotros como indígenas, piensa en los ganaderos y afuereños, pero de nosotros no piensa. Nosotros no somos silvestres, no somos animales. Somos personas. Nosotros vivimos y estamos en la democracia, todos somos documentados, ahora cada vez el Gobierno da más trabajo cuando sabe que el pedido de nosotros es la tierra, la tierra".

"El gobierno usa gente de nosotros..."

"El gobierno usa otras gentes, mismo gente de nosotros, mismos indígenas..! Caso de Puntana: está el cacique Valentino Díaz que ha sido elegido en la comunidad. Pero usa otras persona de la misma comunidad para su fin. No está respetando el cacique que se ha elegido. Con el IPPIS, se entrega una credencial, entonces empieza a dividir a la gente del mismo pueblo indígena. En todas las comunidades no se está respetando los caciques que han sido elegidos. El gobierno empieza a usar la gente; por eso es que hay muchísimas peleas entre nosotros, muchísima..."

"También entrega personería jurídica. Yo creo que no hay fundamento para esa personería que entregan a la otra gente. Pero el gobierno usan otros paisanos de nosotros, y le entregan la personería jurídica. Hasta ahora no sabemos cuáles son los nombres de la comisión. Hay una pelea entre nosotros ahora."

"El referéndum. Nosotros sabemos que el que vota "si", es porque quiere tierras.
El gobierno les llama a esa personas sin consultar a la gente. Y cuando llegan esas personas, le dicen vos tenés que votar sí. Pero nosotros que somos caciques, originales, titulares decimos que "no". No queremos".

"Y esta denuncia que nosotros estamos haciendo, no están haciendo los gringos, no están haciendo la gente de Italia, Francia. Somos nosotros mismos que somos del lugar. Le queremos decir al gobierno que respete la organización, la ley y que no sigan jugando con nosotros como pueblos indígenas".