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Jujuy reeditó una actividad milenaria de la cultura andina
Por Fuente: Telam -
Saturday, Oct. 30, 2010 at 12:29 AM
Se trata de la Feria Internacional del Trueque, que se reeditó en la localidad de Catua, en la puna jujeña, para revalorizar esa tradición y fortalecer el espíritu de hermandad entre comunidades indígenas de Argentina y Chile.
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La Feria Internacional del Trueque, una actividad milenaria de la cultura andina, se reeditó en la localidad de Catua, en la puna jujeña, para revalorizar esa tradición y fortalecer el espíritu de hermandad entre comunidades indígenas de Argentina y Chile.
Como hace miles años, el fin de semana pasado, miembros de la comunidad de San Pedro de Atacama llegaron a Catua -departamento de Susques- para intercambiar sus productos con los habitantes locales, aunque ya no en burros, sino en automóviles.
En tanto, la gente de la comunidad indígena de Catua se interesó principalmente por calzados y abrigos que trajeron los chilenos y que los cambiaron por alimentos no perecederos, principalmente harina y frangollo.
La ceremonia de inicio formal de la XVII Edición de la Feria Internacional del Trueque se realizó sobre la avenida principal, donde los organizadores reivindicaron esta práctica ancestral y se rindió homenaje a la Pachamama en la apacheta (montículo construido con piedras) para la ofrenda a la madre tierra.
Luego, unas 40 personas que llegaron de San Pedro de Atacama colocaron sus productos sobre una fila de mesas para que sean apreciados por los catuenses.
Mientras, una larga fila de niños de entre dos y 10 años pugnaba por unos lápices de colores, gomas de borrar, otros útiles escolares y juguetes, como autos de carrera y muñecos de peluche.
Después de “negociar” con un padre una bolsa de harina de 50 kilos por un televisor de 14 pulgadas, Isidro González, de Atacama, indicó que “es una cosa muy buena recuperar nuestras tradiciones”, aunque antiguamente eran otras las necesidades.
“No hay reglamento rígido, pero si que se respete que la gente lo troque por la necesidad pero no por lo comercial”, aclaró a su lado el delegado titular de la comunidad aborigen Catua-Coquena, Pantaleón Cañari.
El 100 por ciento de la comunidad de Catua es descendiente de aborígenes y, si bien posee una comisión municipal, la distancia con las urbes (está a más de 400 kilómetros de San Salvador de Jujuy) hace que su población conserve sus tradiciones.
La gente de Catua pudo intercambiar en la feria sus artesanías, tejidos en lana de llama y oveja y mercadería, entre la que sobresale la harina, el frangollo, polenta y la sidra por calzado.
También otros productos nativos como chañar y algarrobo, fruta seca (orejones) de membrillo o pera para la preparación de anchi, ropa, utensilios y, en menor cantidad, artículos del hogar.
La Feria duró tres días: El viernes fue la recepción de las delegaciones; el sábado, la apertura con la ceremonia protocolar, ofrenda a la Pachamama y encuentro cultural con números artísticos y folclóricos, y el domingo una mesa de diálogo y debate de cara a la próxima feria, posiblemente el 25 de noviembre en Chile.
Nota correspondiente a la publicación del día Lunes de 25 de Octubre de 2010
www.telam.com.ar/vernota.php?tipo=N&idPub=201830&id=383115&dis=1&sec=1